El Valencia y Figueroa Vázquez dieron el 'cante' en Cartagena: "Esto es una lección"

El Valencia pasó de ronda en Copa del Rey en un partido para olvidar en Cartagena. Los che salieron dormidos al terreno de juego y eso propició que en apenas cinco minutos fueran un gol por debajo, previo tanto de Ortuño. El partido se convirtió en una montaña desde ese momento pues los locales se encerraron de manera sobresaliente y evitaron que se crearan ocasiones de peligro... Hasta que el colegiado decidió ser protagonista.

Figueroa Vázquez perdió el control del partido en los últimos minutos de la primera parte y eso le pasó factura. Primero perdonó a Musto la tarjeta roja. El del Cartagena agarró del cuello a Pepelu, mientras el ex del Levante no entendía nada. Para mayor gravedad, mientras le agarraban del cuello, un jugador del Cartagena desde el suelo le arreó una patada... que también quedó sin sanción y al no haber VAR no hubo la consecuente revisión.

La acción se saldó con amarilla a Musto y amarilla, inexplicable, a Pepelu. Una mala resolución que fue extrañamente compensada minutos después. Calero llegó tarde a robarle el cuero a Fran Pérez en una entrada dura, pero no agresiva ni sucia, y ahí Figueroa Vázquez decidió sacarle la cartulina roja para sorpresa de todos los futbolistas.

Finalizado el 'cante' de Figueroa Vázquez -no hubo más incidencias más allá de repetidas amarillas-, llegó el del Valencia. Los che ni contra diez fueron capaces de generar ocasiones de peligro en lo que pareció más un partido de balonmano que otra cosa. Pase horizontal, horizontal, horizontal... Y así hasta que apareció un notable Sergi Canós para de un derechazo desde fuera del área anotar el empate.

Apenas hubo más ocasiones y si el Valencia pasó de ronda fue gracias a la fortuna. Un centro envenenado de Gayà, con la derecha además, de esos que no toca nadie, se coló en la portería local para poner el definitivo 1-2 en la segunda parte de la prórroga. Un gol que no limpia la mala imagen de los che pero hace que lo vivido en Cartagonova quede como una mala noche de la que solo se recordará el debut de David Otorbi, el más joven en la historia del club.

Baraja al término del encuentro lo dejó claro: su equipo salió dormido. "No hemos salido bien, esto es una lección. Es verdad que esperábamos su inicio, pero no solo nos han marcado, es que nos habían avisado previamente con una ocasión y no hemos sido capaces de levantarnos. Es un aviso, una lección".