Las horas más tensas en el Granada CF tras una alineación indebida que pudo evitarse

El Granada CF camina hacia una eliminación inevitable de la Copa del Rey, toda vez que el Arosa ya ha presentado la denuncia pertinente por la alineación indebida de Adri López, portero de 24 años que según el artículo 251 no podía jugar al no tener menos de 23 tratándose de una competición no profesional. En el club nazarí trabajan desde anoche en preparar un recurso agarrándose a distintos recobecos, pero el margen es exiguo, porque la norma es clara al respecto. El Barça y el Athletic ya evitaron la infracción el año pasado cruzándose mails con la Federación. 

El club ha hecho público un comunicado en el que se defiende con la siguiente argumentación: "El Granada Club de Fútbol quiere aclarar que la Copa de SM el Rey es una competición profesional de acuerdo a lo establecido en los artículos 83 y 84 de la nueva Ley 39/2022, de 30 de diciembre, del Deporte, que entró en vigor el 1 de enero de 2023.

Por lo tanto, la alineación de un portero del equipo dependiente menor de 25 años es correcta. El Granada Club de Fútbol se opondrá a la Reclamación de Alineación Indebida interpuesta por parte del Arosa Sociedad Cultural, y defenderá sus derechos ante todas las instancias"

Tratamos de reconstruir lo sucedido en las últimas horas, desde que en este medio nos percatamos de que el Granada iba a cometer una infracción. No había sido la primera vez.

En Relevo saltó la alarma cuando el club anunció la alineación. Tras unos minutos de comprobaciones, nos pusimos en contacto con el club para indagar si era segura la presencia del guardameta Adri López en el equipo inicial o un error y contrastar la hipótesis de que su participación incurriera en causa de alineación indebida. Quedaba media hora para el inicio del partido. Tiempo suficiente para dar marcha atrás y cambiar a Adri López por André Ferreira, que viene siendo el guardameta titular, o Pol Tristán, del Recreativo Granada y de 21 años de edad. No obstante, tras revisar internamente su documentación y la reglamentación, el club considera que no hay ningún tipo de infracción. Tampoco se informa al cuerpo técnico.

Paco López no conoce la situación hasta el término del partido. De haberlo sabido, seguramente hubiera cambiado de portero para evitar cualquier problema. Que participara uno u otro en una primera ronda copera ante un Segunda RFEF no era tan importante como para enrocarse en que fuera Adri, ante la mínima sospecha de que pudiera producirse una alineación indebida. La rueda de prensa previa y posterior dan prueba de que Paco no tenía ningún conocimiento al respecto. La noticia llega al palco antes de que se publique. Y Matteo Tognozi, el nuevo director deportivo del Granada, no da crédito. Su enfado es mayúsculo. Nada más llegar se encuentra con una más que probable eliminación copera. Una crisis recién estrenado despacho.

Las horas pasan y hay quien no duerme. El Granada se ha entrenado hoy apenas 12 horas después del partido, tratando de olvidar lo sucedido y centrándose en una final, la del partido de Liga en Mestalla, a la que el Granada llega 19º, en una situación límite. La contrariedad en los altos cargos es grande y lógica. Pero las responsabilidades pasan de un lado a otro. Hay quien alude a que este asunto dependía de Nico Rodríguez, el director deportivo saliente, dado que Tognozzi acaba de llegar y está fuera de sospecha. El caso es que ni el delegado, Manuel Lucena, allí presente, ni las personas que valoraron el asunto in extremis, justo antes del inicio del encuentro, consideraron que hubiera problema alguno.

Pero llueve sobre mojado, porque el año pasado contra el Yeclano y el Oviedo ya se cometió alineación indebida, por partida doble. Relevo ya informó ayer de que había sido alineado Adri López en esos dos partidos. Pero también puede confirmar que Erick Cabaco jugó esa primera ronda contra el Yeclano cuando se encontraba sancionado.

Además, LaLiga, desde el Departamento de Competiciones, envió una circular a los clubes participantes en la Copa para puntualizarles distintos asuntos, como que los jugadores del filial o dependientes no debían obtener el visado de LaLiga, y el que afecta directamente al caso del Granada. De manera textual: "Al tratarse de una competición que no tiene carácter 'profesional', aquellos jugadores inscritos en equipos dependientes o filiales que participen en Copa del Rey deberán ser menores de 23 años y no se aplicará lo establecido en el artículo 250 del Reglamento General de la RFEF, en relación con los porteros". En el Granada, o no lo recibieron o no supieron interpretarlo.

Ahora, desde el club se trabaja en un recurso para tratar de evitar la eliminación por alineación indebida. La argumentación del Granada va por la consideración de competición profesional de la Copa en alusión a que se recoge así en la Nueva Ley del Deporte que entró en vigor en enero. Aunque la realidad es que esto queda, precisamente, en contradicción con la propia circular de LaLiga anteriormente citada, al especificarse la circunstancia de los porteros.

La crisis abierta en el Granada ahonda en una situación de lo más preocupante desde el punto de vista deportivo. La planificación tras el ascenso no fue ni mucho menos la idónea, afectada en tiempo y forma por una venta del club que parecía hecha pero que nunca llegó a consumarse. Los fichajes tardaron en llegar y tampoco han supuesto una subida de nivel como para afrontar la temporada con tranquilidad. De hecho, seis puntos de 33 posibles y con el agua al cuello. Pero el cambio de rumbo que se ha querido dar con Tognozzi ha quedado empañado ya por esta alineación indebida, en una semana clave antes del partido contra el Valencia.