Mbappé, en territorio hostil: mandó callar a la afición del Brest por sus gritos homófobos contra Achraf y lo califica como un rival 'jodido'
En 2023 protagonizó una gran polémica en Francia por su reacción tras marcar el gol de la victoria de penalti. El entrenador Eric Roy y parte de la prensa criticaron su postura y Kylian contestó con dureza.

Kylian Mbappé lo sabe. Brest, última escala del Real Madrid en esta liguilla de Champions, es para él territorio enemigo. Y aunque el partido no se jugará en el estadio local, Francis-Le Blé, sino en el Roudourou de Guingamp, donde ha jugado el equipo bretón toda la competición, a poco más de 100 kilómetros de distancia, la afición será la misma y se podría decir sin ánimo de equivocación que para ellos el parisino es 'futbolista non grato' desde octubre de 2023.
Conocedor de la situación, el propio futbolista, cuando el sábado pasado fue preguntado en los micrófonos de Real Madrid TV por el próximo compromiso, definió al conjunto bretón como "un equipo jodido que juega bien". Es consciente de que encontrará en el rival una motivación especial sobre su persona y que la afición no habrá olvidado lo sucedido durante aquel Brest-PSG de la temporada 23-24. De hecho, aquello trascendió a nivel nacional en Francia. En un principio no tenía que ser más que un partido del Campeonato, pero la soleada tarde se fue enredando. Los parisinos, entrenados por Luis Enrique, se adelantaron en el marcador con dos goles de ventaja, el segundo marcado por el propio Mbappé. La reacción local llevó a los hombres de Eric Roy, actual técnico, al empate y en el último minuto se produjo un derribo a Kolo Muani en el área bretona.
Kylian, cerca de la jugada, comenzó a pedir la pena máxima de manera intensa, pero el árbitro no lo señaló. Siguieron las protestas, ya de todo el equipo, y se supone que también una llamada desde el VAR, y el colegiado fue a ver la acción al monitor. Señaló penalti. Minuto 89. Mbappé, lanzador. Dispara con la derecha, flojo, y el portero despeja, pero el delantero aprovecha el rechace y marca (2-3). Kylian corrió por toda la línea de fondo y se llevó un dedo a su boca para mandar callar a la afición local. Por mucho que sus compañeros le abrazaban, él mantenía su gesto. Devorado por la clásica piña de celebración, Kylian se hizo todavía un hueco para con la mano seguir mandando callar a los aficionados que cada vez estaban más iracundos con sus gestos.
Tuvo que terminar el partido para entender la no habitual reacción del jugador y sus razones para mandar callar al público. Según su apreciación, a lo largo del encuentro su compañero y amigo Achraf Hakimi había sido objeto de gritos homófobos por parte de la afición local, que aprovechó que el futbolista había sido imputado unos meses antes en un supuesto caso de agresión sexual para arremeter contra él de manera impune. Los gritos sobre el jugador, al parecer, existieron porque así lo denunció posteriormente también la Asociación Francesa contra la Homofobia, "Rouge direct".

Los acontecimientos se precipitaron. En el propio estadio, con las palabras de los protagonistas, sobre todo de los hombres del Brest, y en las redes sociales, donde Mbappé explicó por qué había reaccionado de esa forma y contestó a un periodista de L'Équipe TV, que le echó en cara que "un capitán de la selección francesa nunca debe hacer un gesto como ese de hacer callar al público". Kylian no se ocultó: "Y claro, ¿qué debía hacer? ¿Ponerme a cantar con ellos cuando insultaron a mi compañero? Algunos, verdaderamente, jamás han pisado un terreno de juego, poco importa el rival". Respuesta rotunda.
El entrenador del Brest, Eric Roy, también analizó la actuación de Mbappé calificándola de "un poco ridícula". Visiblemente molesto, reconoció que "hace falta reflexionar. Hay actitudes que, cuando eres un jugador de alto nivel, no puedes tener". El centrocampista Hugo Magnetti, que todavía está en la plantilla del Brest y es titular indiscutible, por lo que lo normal es que juegue este partido, también definió lo ocurrido con Kylian Mbappé como una "pequeña falta de respeto". Y advirtió en tono de amenaza que "quedará en el recuerdo para la vuelta": "Estaremos deseosos de vengarnos, aunque es una palabra muy grande. Espero que tengan el coraje de hacer lo mismo contra el Bayern o Real (Madrid)".
Luis Enrique, obviamente, también fue preguntado en la sala de prensa por la reacción de su futbolista. Tiró de regate: "No me gustan este tipo de cosas, son mala energía. Es mejor intentar disfrutar del momento, hay que intentar dar energía positiva. No sé qué pasó exactamente".
Es evidente que algo de resquemor debió quedar de aquella agria polémica, bien alimentada por las redes sociales, porque esa misma temporada, no en el partido inmediato de Liga, sino en un enfrentamiento posterior de los octavos de final de la Copa francesa entre ambos clubes (7-2-2024), Mbappé volvió a ser el epicentro de la situación. Brassier, central entonces del Brest y hoy cedido al Olympique de Marsella, le realizó una durísima entrada en el tobillo que le supuso la tarjeta roja inmediata y que hizo pensar lo peor en forma de lesión. Kylian, que había abierto el marcador, visiblemente dolorido, tardó varios minutos en levantarse. Las imágenes de televisión permitieron ver la dureza de la acción, pero finalmente el futbolista acabó el partido y fue sometido a una inmediata revisión que descartó una lesión mayor.
Mbappé con el PSG se ha enfrentado al Brest en ocho ocasiones en la Liga francesa. El balance es de siete victorias y un empate a favor del ahora madridista. Kylian marcó seis goles en esos encuentros... y vio cinco tarjetas amarillas en cinco partidos distintos. Una cantidad que no se antoja normal para sus características y comportamiento dentro del terreno de juego, pero que puede explicar su especial rivalidad con este equipo. También se enfrentó en dos eliminatorias coperas. La antes mencionada en la que los parisinos pasaron a octavos (3-1), primer gol de Mbappé, y una, anteriormente, en marzo de 2021, con también triunfo parisino (0-3) y dos goles de Kylian. El balance contra el actual técnico bretón, Eric Roy, es más reducido. Solo tres enfrentamientos directos con dos victorias para el ahora madridista, tres goles, y un empate.
Juega en Guingamp con Francia y portada de la revista 'Times'
Tampoco, por supuesto, el escenario del partido, el estadio Roudourou de Guingamp, es desconocido para el nuevo madridista. Allí también ha hecho de las suyas en al menos tres ocasiones. Siendo todavía jugador del Mónaco, en febrero de 2017, con 17 años, sustituyó al ahora rojiblanco Lemar y fue objeto de un penalti que permitió a su equipo ganar el partido (1-2). Ya con el PSG, en agosto de 2018, entró tras el descanso en el campo sustituyendo a Timothy Weah y marcó sus dos primeros goles de los 33 que marcó en su segunda temporada en París. Remontada parisina. Del 1-0 al 1-3. El primer tanto, obra de Neymar.
También con la selección francesa, Kylian tuvo una gran noche en el estadio donde se jugará el partido contra el Real Madrid. El 11 de octubre de 2018, los hombres de Deschamps perdían 0-2 ante Islandia. Mbappé, con molestias, no había sido titular, pero con media hora por delante, el técnico le dio entrada en el terreno de juego por Griezmann. Mano de santo. Participó en el primer tanto de su equipo, un autogol de Eyjolfsson, y marcó de penalti el tanto del empate. Era un simple amistoso, pero hubiera sido la primera derrota de Francia después de conseguir el título mundial en Rusia 2018. Ese mismo día que jugaba en Guingamp, Mbappé fue portada de la prestigiosa revista Times.