REAL MADRID

Los matices detrás del bajón físico de Karim Benzema

El francés siente que su cuerpo ha ido a menos esta temporada. Estuvo desaparecido contra el Manchester City.

Benzema, en el Etihad./REUTERS
Benzema, en el Etihad. REUTERS
Sergio Santos

Sergio Santos

Karim Benzema (35 años) estuvo desaparecido en los 180 minutos de la eliminatoria contra el Manchester City. Es difícil señalar un solo culpable de la debacle vivida en el Etihad por el Real Madrid, aunque el brazalete que lleva sobre el brazo convierte al francés en protagonista para lo bueno y también para lo malo.

Lo preocupante en el caso del actual Balón de Oro no es tanto el corto plazo (ante los de Guardiola el suspenso fue general) sino el hecho de que en su temporada hayan sido más frecuentes las sombras que las luces. El miedo en el Madrid está en pensar que el mejor Karim se marchó para no volver.

Los números globales son muy buenos (29 tantos en 40 partidos). Unas estadísticas, de hecho, que hubieran sido sobresalientes en aquellas temporadas en las que el francés vivía a la sombra de las dianas de Cristiano. Sin embargo, ahora es el líder dentro y fuera del campo, el actual mejor futbolista del planeta gracias a la excelencia que alcanzó la temporada pasada. Por eso, cuando su nivel baja el Madrid lo acusa demasiado.

Bajón físico

Benzema es el primero que siente que los años pesan sobre sus piernas. Este curso se ha dosificado para llegar en un buen momento a los partidos importantes de la temporada. Brilló en algunos (Liverpool, Chelsea…) y naufragó en otros, especialmente en la final de Copa y las semifinales contra el Manchester City.

Al francés cada vez le cuesta más recuperarse físicamente después de cada partido, de ahí que escoja sus esfuerzos. De hecho, en algunos tramos de la temporada tuvo algunas dudas sobre su continuidad un curso más al primer nivel, a pesar de que firmó en octubre su renovación hasta 2024. La tentadora oferta de Arabia (200 millones en dos temporadas) y su bajón de nivel tuvieron la culpa. Finalmente decidió seguir, aunque está por ver si logra recuperar el excelente nivel de la 2021-22 o si aquel Karim se marchó para no volver.

Ancelotti quería un 'nueve'

El pasado verano, Carlo Ancelotti advirtió al club sobre el problema que podría aparecer en ataque sin un sustituto natural en la plantilla para Benzema (con Mariano nunca se ha contado). En verano fue Hazard quien asomó como recambio, aunque a la hora de la verdad han sido Rodrygo o Asensio quienes han ocupado esa posición de falso nueve durante las ausencias del francés.

En el club madridista aún escuece el fracaso del fichaje de Jovic, que no cuajó después de una fuerte inversión en el verano de 2019. El plan, antes de esta dolorosa derrota, era esperar a Endrick hasta 2024, un verano en el que también se intentarán otros grandes refuerzos que se pongan a tiro, especialmente Mbappé o Haaland. El problema está en saber si Benzema aguantará a un nivel notable hasta ese momento.