La 'gasolina' que mueve a Vinicius en su transformación: "Lo que quiere son títulos"

Parece que fue ayer cuando Vinicius llegaba a Madrid siendo un adolescente. 18 años tenía cuando aterrizó a la capital de España. Rebosaba talento, pero sabía que era importante pulirlo. No parar de trabajar para seguir mejorando y triunfar en el Real Madrid. Justamente, lo que está sucediendo en la actualidad. Su exhibición en Anfield confirma lo que tanto él como sus familiares y amigos estaban convencidos que podía conseguir: estar entre los mejores del mundo.

Se ha convertido en una estrella de las que brillan con luz propia en cualquier escenario. Se toma con la misma seriedad un partido contra el último clasificado de LaLiga que contra el finalista de la Champions. "Es el jugador más determinante del fútbol mundial", afirmaba Ancelotti tras los dos goles del brasileño. El año pasado marcó en la semifinal contra el Manchester City y en la final contra los reds. También ha ayudado en partidos de altos vuelos con asistencias (PSG, Chelsea o final del Mundial de Clubes contra el Al Hilal). Se le puede sumar dos tantos en Clásicos o los otros dos que le ha hecho al Liverpool.

"Él lo único que quiere es jugar y ganar títulos con el Real Madrid" comenta alguien que conoce a la perfección al brasileño. Esa es la gasolina que le mueve a entrenarse cada día al 100% y a luchar por cada balón. Los trofeos individuales como el Balón de Oro no son su prioridad, pero es plenamente consciente que, si quiere optar a ellos. Lo más importante es que a su equipo le vaya bien y marcar goles como lo está haciendo.

Marca a ritmo de récord personal. Son 18 esta temporada y ya está a solo cuatro de la pasada, la mejor en este aspecto desde que es profesional. Está en una progresión no solo de superarlo, sino de pulverizar la marca: si sigue con esta efectividad va camino de los 29. Números para acabar con el dichoso mito de que 'no tiene gol'. No solo lo tiene, sino que se le cae de los bolsillos.

Vinicius ha seguido un plan específico desde que está en Madrid para llegar al punto en el que está ahora. Largas sesiones de fisioterapia, recuperaciones con máquinas en casa, una dieta estricta, restringir salidas y, lo más importante, mantener la cabeza centrada en lo que más le ocupaba: ser el mejor futbolista posible. Su sueño siempre fue triunfar en el Real Madrid.

A pesar de lo bien que le está yendo, no se conforma. "Tengo 22 años y quiero seguir evolucionando", comentaba tras el encuentro en los micrófonos de TNT Sports Brasil. "No juego para callar las críticas. Estoy centrado en evolucionar y quiero seguir aquí mucho tiempo, donde desde el primer día me siento como en casa", añadió. Es feliz en Madrid donde quiere seguir haciendo historia.