El Girona empieza su viaje histórico de Champions con una petición a la provincia: "Necesitamos que nos acompañen"

Se utiliza tan a menudo el término 'hacer historia' que la grandeza de la cita se acaba rebajando y desvaneciendo, relativiza el éxito o la magnitud. No es el caso del Girona, que este miércoles hará Historia, en mayúsculas. Por primera vez y tras una temporada difícilmente mejorable, escuchará sonar el himno de la Champions League. No hace tanto, competía en categorías regionales y desde hace un tiempo se ha convertido en uno de los equipos de culto del continente.

En lo futbolístico, el Girona ha crecido muy rápido. La dificultad del club ha sido igualar la velocidad de crucero del proyecto de Quique Cárcel y Míchel. A unas horas del debut en Champions del equipo, el presidente Delfí Geli atiende a Relevo para repasar cómo ha sido todo este proceso. Explica cómo se ha tenido que preparar el club para estar listo para la élite del fútbol.

Se está luchando un poco contra la temporada pasada, todo el mundo tiene el recuerdo presente. Tenemos claro que no es así, pero lo sientes en el ambiente, en la afición. Es lógico que todavía piensen en ella. Pero los que llevamos tiempo en el mundo del fútbol sabemos que cada temporada comienza de cero, tengas el mismo equipo o no. No es lo mismo que el año pasado. Hay que volver a competir, que lo estamos haciendo. En las derrotas, levantarse. Y en las victorias, sin exceso de triunfalismo.

Tenemos ilusión y ganas por competir. Y esto es bueno. Lo que no tiene que llevarte a precipitarte. Tenemos jugadores que han participado en Europa o juegan en selecciones. Es el máximo nivel, tenemos un rival buenísimo, de mucha calidad y tenemos que estar preparados para estar a la altura de la competición.

Nos enfrentamos en la Liga y en la UEFA. El partido en casa sacamos ventaja, 3-0, y medio sentenciamos la eliminatoria. Éramos dos equipos pequeños haciendo un buen torneo, tuvimos en acierto de avanzar de ronda.

Aitor estuvo en nuestro cuerpo técnico y formó parte del club durante casi dos años. El mundo del fútbol da muchas vueltas y te enfrenta a exjugadores, exentrenadores y gente que ha estado contigo. Estamos contentos de que le vaya bien, de que esté en un gran club. El PSG tiene un staff español y nos conocerá muy bien. Pero vaya, al final la tecnología hace que todos los clubes y entrenadores nos conozcamos muy bien.

 

Tenemos un estadio pequeñito y de muchos años. La UEFA pide muchas cosas que hemos tenido que adaptar este verano. Creo que lo hemos logrado, estamos preparados para que se puedan jugar partidos de Champions. De hecho se juegan partidos del mismo nivel. El partido del Barça era de Champions, muchos de LaLiga lo son. Venimos con déficits, pero vamos adaptando el club.

Se está demostrando con lo que ha pasado este verano. Muchos jugadores son pretendidos por muchos clubes. Jugadores que llevan tres, cuatro, cinco, seis años aquí y que van dando pasos y acaban entrenando y debutando con el primer equipo. Tenemos jugadores cedidos en Segunda, otros que se han ido traspasados. Forma parte del crecimiento, el Girona está entre los mejores de LaLiga. El trabajo de años va dando sus frutos, es un beneficio para el club.

Intentamos abarcar todas las necesidades. Tener más recursos humanos, tecnológicos. Hay que hacerlo poco a poco, estamos en el proceso. Cada día somos un club más profesionalizado, pero al mismo tiempo tienes que ser próximo a tu ciudad, a tu provincia. Todos los aficionados vienen a Montilivi con la camiseta del Girona o una indumentaria. Muchos turistas que vienen a la provincia pasan por la ciudad visitan el estadio, la tienda y compran camisetas u otros productos. Esto era inimaginable hace tres o cinco años. Es el tercer año consecutivo en Primera. Forma parte de lo que es y mueve el fútbol, la trascendencia que te lleva más allá de sus fronteras.

Hemos pasado, hace cinco años, en Segunda, de vender más o menos unas 2.500 o 3.000 a vender unas 13.000 o 14.000. Hablo de memoria. Y este año serán más. Este año venderemos más porque todo el mundo quiere una con el logo de la Champions.

Viene de que hace no muchos años, cuando el Girona estaba en Segunda B o Tercera, competía contra el Olot, el Llagostera, el Palamós… los rivales eran equipos de la provincia y ahora ha cambiado de forma radical. Estamos en Primera y la gente de la provincia también se hace suyo el equipo. Tenemos una respuesta muy positiva en la provincia, y más lejos también. Viene al estadio gente de El Maresme, de Osona… Se está logrado un sentido de pertenencia a nuestro club muy importante. Hay un crecimiento social muy grande. Por esto hablamos de provincia, Míchel es muy consciente de ello. Nos sentimos orgullosos de representar a ciudad y provincia de la misma manera.

Estamos intentando que las instituciones y las empresas privadas, todo lo que es Girona y provincia, entienda un poco la visualización a nivel mundial que tenemos, que podemos ser un medio de crecimiento para ellos. Poco a poco se está logrando y necesitamos la implicación de los locales y de todo el mundo, que nos acompañen en este viaje.

Es trabajo que hace la dirección deportiva y el entrenador al jugador. Pero es una información que se ha trabajado desde dentro del club, les hemos dado los argumentos para que puedan explicar las características de nuestra ciudad y nuestra provincia y convencer al jugador. Girona es una provincia donde se puede vivir muy bien, no solo a nivel profesional. A nivel personal y familiar también y esto es importante para cualquier persona que cambia de trabajo. Les facilita las cosas saber dónde irán.

Contamos cómo pueden estar aquí, pero evidentemente vienen por la atracción futbolística. Por el entrenador, cómo juega el equipo, la dirección técnica, cómo pueden ayudar y mejorar a nivel personal y grupal… Se intenta darles todo el conocimiento para decidir venir a Girona.

Es un paso adelante estratégico muy importante, diferencial. Primero porque empezamos a tener patrimonio, instalaciones propias donde crecer. Un lugar de trabajo de primer nivel para nuestros profesionales. De momento para el primer equipo y en un futuro para el resto de categorías. Es mirar cómo han trabajo y crecido otros clubes. Muchos de los que han crecido bien han empezado con una ciudad deportiva. Nosotros sabíamos desde el primer día que este era un paso importantísimo. Poco a poco se ha ido haciendo realidad. El primer equipo está muy a gusto, todo el mundo está encantado. Esperamos que en un futuro sea definitiva.

Siempre hemos intentado aprender de los clubes que hacen las cosas bien, como el Villarreal. Al final te comparas a nivel de ciudad, de provincia, de capacidades… Este es un ejemplo, pero hay más. Tenemos relación con directivos de otros clubes. No es solo ir a comer antes de un partido, es hablar con ellos, contar cosas… Intentamos aprovechar cada oportunidad para comprender y mejorar, aprender de todos. A veces te explican cosas que no podemos replicar pero sí adaptar. Como en cualquier empresa. Hay que estar abiertos a aprender. Los clubes del norte también dan mucha bola a la cantera. Se trata de aprender.

Llevamos unos años, sobre todo desde Míchel, con un modelo futbolístico definido. Dentro de nuestras capacidades, intentaremos jugar a fútbol, tener el balón y hacer un juego atractivo. A veces lo logramos y a veces no. Dentro de las dificultades que nos pondrá la competición, el Girona siempre intentará ser fiel a sí mismo y apostar por un buen trato de balón.