CHAMPIONS LEAGUE

¿Hay bolas en el nuevo sorteo de la Champions League?

En el sorteo de la nueva Champions League casi todo el protagonismo recae sobre el algoritmo.

Imagen del sorteo de las eliminatorias de la Champions League 2011. /AFP
Imagen del sorteo de las eliminatorias de la Champions League 2011. AFP
Javier Mercadal

Javier Mercadal

El sorteo de la Champions League es uno de esos puntos álgidos de cada temporada. Especialmente por todo por lo que representa. Supone el pistoletazo de salida para la máxima competición europea de fútbol y se trata de un momento de incertidumbre e ilusión para todos los aficionados, deseosos de saber el camino a seguir de sus equipos.

Por todo ello, desde la UEFA han querido mantener la tradicional ceremonia del sorteo, pese a que la Champions League 2024/25 poco tiene que ver con sus predecesoras. En el nuevo sorteo de la Champions League casi todo el protagonismo recae sobre un software informático. Es el algoritmo el que decide tanto los rivales de cada equipo, como qué partidos ha de disputar como local y cuáles como visitante. Todo ello, en cuestión de segundos y respetando los diferentes requisitos de la competición (como por ejemplo que en la primera ronda no se enfrenten dos equipos de un mismo país). Entonces, ¿dónde queda el ritual de los bombos y la bolas?

¿Hay bolas en el nuevo sorteo de la Champions League?

En el nuevo sorteo de la Champions League sí hay bolas. Concretamente 36, una por cada equipo participante. Sin embargo, ya no poseen el papel protagónico que tenían en el pasado. Su presencia en la ceremonia tiene mucho de folclórico y poco de relevante, pues se podría llegar al mismo resultado sin su concurso.

Sin embargo, la UEFA no ha querido perder la parte de la ceremonia en la que una mano inocente extrae de un cuento una bola con el nombre de un equipo dentro. Así, la mecánica del nuevo sorteo de la Champions es la siguiente: primero se extraerá la bola de un equipo del bombo 1 y el ordenador determinará automáticamente todo su calendario. Posteriormente, se extraerá un nuevo nombre y, así, equipo por equipo, bombo por bombo, hasta que los 36 equipos posean todos sus enfrentamientos definidos.

¿Se podría hacer sin todo el ritual de las bolas? Desde luego, pues al fin y al cabo es el software el que determina todos los partidos. Sin embargo, la ceremonia del sorteo, como evento que da inicio al fútbol continental, perdería parte de su esencia, al menos en lo estético.

¿Para qué sirven los bombos en el nuevo sorteo de la Champions?

Además de bolas, el sorteo de la Champions League 2024/25 también cuenta con bombos. Concretamente, los 36 equipos participantes han sido divididos en cuatro bombos de nueve integrantes cada uno. En este caso, la división sí tiene un sentido funcional. En la nueva Champions cada equipo posee un calendario diferente pero los resultados se vuelcan a una clasificación única. Por lo tanto, existe el riesgo de que se levanten suspicacias si un equipo posee enfrentamientos a priori más complicados que otro.

Para evitar el agravio comparativo, la UEFA ha buscado equilibrar los enfrentamientos de cada equipo dividiendo a los participantes en cuatro bombos según su coeficiente UEFA. De esta manera, todos los equipos jugarán con dos equipos de cada bombo (un partido como local y otro como visitante). Aunque no tiene una ventaja per se partir de un bombo u otro, sí que da una imagen de la valoración que se tiene de ese conjunto como potencial rival.