A la tercera... cayó el Lyon: el Barça mantiene su reinado en Champions

Bilbao.- Dicen que sanar heridas del pasado te hace una persona más feliz. El Barça fue esa persona. La que se saca una espina. La que se hace más fuerte. La que no teme ni ante sus peores fantasmas. El Olympique de Lyon se presentó en San Mamés como esa bestia negra a la que nunca había ganado. Ese equipo que le había robado la ilusión hasta en dos finales. No hubo una tercera. Porque del Barça de 2019, aplastado por las francesas en su primera gran cita europea por 4-1, queda muy poco. Por no decir nada. Ahora es un equipo completamente ganador. En esta temporada, ha sido demasiado en Liga, Copa, Supercopa y también en Champions. Un póker inédito en el que puso la gran guinda en su final de San Mamés. Era suya, sí, con Bilbao siendo Barcelona. Todo fue mágico para volver a reinar en Europa en un debate sobre si estamos ante una nueva hegemonía. Es la tercera Champions frente a las ocho del Olympique de Lyon. Sin embargo, la sensación es que esto no ha hecho más que empezar. Con Aitana Bonmatí y Alexia Putellas, goleadoras y ganadoras de los últimos tres premios en el Balón de Oro, el éxito está asegurado.

El partido arrancó sin apenas revolución en los onces de cada equipo. Giráldez dejó a Ona Batlle en el banquillo como gran sorpresa y Sonia Bompastor repitió la alineación con la que venció al PSG por 2-1. Con todas las fichas sobre el tablero, el balón empezó a rodar en medio de un ambientazo (récord en una final con 50.827 espectadores) y aplastante superioridad azulgrana en la grada. Con un tifo que decía 'mueven el mundo', lema de las catalanas en este tramo final de la Champions, el Barça se sintió en casa. Tanto que sus jugadoras mostraron esa seguridad de quien sabe que todo lo tiene a su favor. ¿Qué podía salir mal?

La respuesta era "poco o nada". Y el fútbol les respetó en esa venganza justa. Aunque con permiso de un Olympique de Lyon que, lejos de aquel equipo que te mataba con mirarte, sigue siendo un rival a la altura de una final. Así, ambos equipos dejaron un pulso bonito, disputado, en el que pronto llegaron los sustos. Diani apretó nada más saltar al campo y Salma Paralluelo tuvo la primera en el minuto 6. De tímidas a grandes llegadas, con dos palos del Lyon. El segundo, de Renard, hizo temblar a las culés.

No obstante, el Barça siguió fuerte. Había aprendido del pasado. Patri Guijarro tuvo un mano a mano que detuvo Endler y Aitana Bonmatí no dejó de sacar su varita a pasear para poner a San Mamés a sus pies. Con 0-0 en el marcador, el partido se marchó al descanso con dos equipos cómodos en su partido. El Barça tiró de dominio de la pelota. El Lyon buscó el error a través de una gran presión arriba.

La balanza se tambaleaba, pero no terminaba de ceder. Hasta que no pudo resistirse al talento de Aitana Bonmatí. Tenía que ser ella. La jugadora del momento. La que llegó a la final sabiendo que también tenía que ser su partido tras ser una de las heroínas en las semifinales. "Las finales hay que ganarlas, pero también disfrutarlas", dijo como aviso. Y la que hizo disfrutar fue ella, con ese fútbol champagne que hay en sus botas. Tras comerse el campo y echarse a su equipo, como líder y estrella, a sus espaldas, Aitana sacó la garra y el sentimiento de quien se deja la piel por el escudo que hay en su pecho. El escudo que besó tras poner el 1-0 en el marcador en el minuto 63 tras superar a Carperter, que desvió levemente el balón tras el gran zurdazo de la catalana.

Fue la locura. Aitana corrió, se puso la mano en el pecho y soltó un "vamos" liberador. Aunque quedaba mucho partido y el Lyon no iba a bajar los brazos. Carpenter tuvo una que se marchó rozando el larguero y Cata Coll demostró por qué es una de las mejores porteras del mundo, con varios reflejos que evitaron mayor peligro en su portería. Si la noche era mágica, faltaba alguien por marcar. Faltaba Alexia Putellas, que salió desde el banquillo para poner el 2-0 y sentenciar la final. La dos veces Balón de Oro tiró de zapatazo desde el centro del área con un tiro potente e imparable y dejó una celebración para la historia. Aitana y ella tenían que estar juntas en la foto. De mejor a mejor jugadora. Un doblete histórico para que el Barça grite con fuerza: ¡La tercera ya está aquí!

Barcelona (1-4-3-3): Cata Coll; Bronze, Paredes, Engen, Patri Guijarro, Aitana, Keira Walsh; Graham Hansen, Salma y Mariona.

Olympique de Lyon (1-4-3-3): Endler; Carpentener, Gilles, Renard, Bacha; Horan, Damaris Egurrola, van de Donk; Diani, Dumornay y Cascarino.

Goles: Aitana Bonmatí (63'), Alexia (95').

Árbitras: Rebecca Welch (Inglaterra)

Espectadores: 50.827 en San Mamés.