Tatiana Pinto retrata la nueva realidad del fútbol femenino: "Tenemos que estar preparadas para la crítica, ya sea constructiva o destructiva, a mí me dan igual"
El flamante fichaje del Atlético de Madrid atiende a Relevo horas antes del debut rojiblanco en Champions.
"Se te da bien, ¿eh?", comenta Salvador Fenoll -nuestro cámara- mientras fotografía a Tatiana Pinto (28 de marzo de 1994, Oliveira do Bairro, Portugal). Uno de los flamantes fichajes del Atlético de Madrid -el conjunto colchonero ha incorporado hasta ocho caras nuevas este curso- se siente como pez en el agua delante de los focos. Habla tres idiomas y chapurrea un cuarto, el francés. El español, como si fuese del mismo Alcalá de Henares.
Con una trayectoria envidiable, Tatiana Pinto se ha convertido en una voz autorizada para examinar la realidad del fútbol femenino. Su carrera en el Bristol, en el Levante o en el Brighton, entre otros, le avalan. A escasos días para el debut en Champions, el conjunto colchonero se enfrenta al Rosenborg (mañana, a las 13:00h.) en la ronda previa de la competición continental, la internacional portuguesa atiende a Relevo en las gradas de la ciudad deportiva rojiblanca. Acaba de ejercitarse y todavía luce el pelo mojado.
¿Por qué el Atleti?
Por lo menos, para mí fue muy fácil decir que sí. El proyecto también me ha encantado porque estamos aquí todas para construir y para dar un plus más al Atleti y cuando me llamaron a mí para ser parte de eso, pues yo acepté muy rápido porque creía que encajaría bien aquí y aquí estoy.
[La conversación se interrumpe por el ruido del cortacésped y toca volver a empezar. Tatiana pronuncia la misma respuesta sin pensarlo].
Porque cuando te llama un club como el Atlético de Madrid, la decisión es muy fácil y muy rápida. Y fue lo que pasó conmigo.
¿Cómo se produjo? Porque el interés del Atlético de Madrid por ti viene de lejos....
Pues justo al final de temporada, por ahí. El interés del Atlético de Madrid en mí ya es algo antiguo, pero no se ha dado porque la vida es así, hay mucha cosas que cambian. Pero esta vez sentí que el interés era más fuerte. También por el proyecto, porque quiero ayudar a construir algo bonito, a cambiar la mentalidad. No estoy diciendo que sea clave, pero soy una más con experiencia para ayudar.
Vuestra pretemporada ha dejado muy buenas sensaciones. Volvéis a la Champions después de tres temporadas lejos, ¿se habla mucho en el vestuario de esto?
La verdad que estamos trabajando bien. Hay una plantilla muy buena, muy completa, con mucha calidad. El entrenador lo va a tener difícil, la verdad, pero yo creo que eso es lo bonito. Salir de nuestra zona de confort, también internamente, eso sí que nos hace ser mejores futbolistas. Creo que estamos trabajando muy bien, estamos viviendo mucho el día a día.
Todos los equipos quieren tener un entrenador que saque lo mejor de nosotras y yo creo que Víctor lo hace muy buen. Está trayendo una identidad y una personalidad muy fuerte, para que a cualquier campo que vayamos a jugar se sepa que el Atlético de Madrid está ahí y que vamos a competir.
En una plantilla repleta de nombres propios, ¿quién es la jugadora que más te está impactando?
Vilde, no la conocía muy bien, si te soy sincera. Es una jugadora que decide muy bien, es inteligente y a mí me gustan mucho ese tipo de jugadoras. Me impactó muchísimo porque no la conocía. El año pasado, veía partidos del Atleti, pero no me di cuenta. Ahora, trabajando con ella todos los días, me gusta mucho.
Tal y como contabas en X, el otro día, el de la presentación conjunta con los fichajes del primer equipo masculino en el Metropolitano, fue uno de los mejores de tu vida. Cuéntame.
Pues antes estaba supernerviosa, pero mucho. Porque, además, cuando estábamos de camino al estadio, pues mirábamos y había un montón de gente. Y yo flipaba porque eso estaba lleno y no había partido. O sea, toda esa gente había ido para vernos. Yo me estaba sintiendo nerviosa y orgullosa al mismo tiempo y feliz. Una mezcla de emociones y sentimientos. Por la noche, cuando quería acostarme para dormir, fue difícil bajar la adrenalina.
Y, como has dicho, escribí eso lo que sentía de verdad y de corazón. Fue un día muy especial porque nunca lo había vivido y creo que no hay muchos clubes que lo hayan hecho y tener la oportunidad y la alegría de estar ahí y ser parte también de esta historia y de que el Atlético de Madrid haya hecho las cosas diferentes, pues me pone muy contenta. Me quedo con el momento en el que entramos al estadio una por una. Yo había oído hablar de esa pasión, pero no la conocía. Y la verdad es que la sentí, sentí ese cariño, ese apoyo, esa pasión. Es un sentimiento que me hizo olvidarme del resto del mundo.
Vienes del Brighton, ¿qué se dice de la Liga española en Inglaterra?
En términos de nivel, las ligas son muy, muy parecidas. Lo que pasa es que ese entorno, la marca Liga F, la marca Barclays... O sea, allí todo es muy profesional. Todos tienen de todo, desde el último club hasta el primero. El nivel de infraestructuras, de contratos, de la atención de los medios de comunicación, de los patrocinadores, todo es muy distinto.
Pero yo pienso que aquí en España hay mucha calidad. Mucha, mucha calidad. Creo que el tipo de juego que se juega aquí es más pensado, más pausado, más de cabeza. Ahí es un poco caótico, más intenso, con más ritmo. Yo creo que lo que falta aquí, en Liga F, es dar ese salto, ese salto a nivel de Liga, de tener una identidad fuerte que pueda gestionar la liga, que pueda venir con marcas, con patrocinadores, que nos den visibilidad, es lo que falta porque calidad hay mucha, pero mucha.
El tema del calendario...
Eso fue increíble. Al final, empezamos la pretemporada entrenando antes por la Champions. Pero, claro, hay equipos que estaban entrenando y no sabían contra quién iban a jugar el primer partido. A mí me parece triste tratar una competición profesional así, ¿no? Creo que tenemos que cambiar algo también. Y al final fuimos la única liga donde pasó eso. Y es un poco triste, la verdad.
La Liga española es una de las más largas con 16 equipos. Hay mucho debate sobre eso. ¿Crees que habría que reducir el número?
Yo lo reduciría, tal vez, a 14. También más por el calendario y no por una cuestión de competencia. Porque aquí hay mucha competencia, no creo que sea ese el tema, pero sí el calendario. Recuerdo que el año pasado vosotros terminasteis la Liga el 16 de junio. Me parece una locura para las jugadoras.
Terminaron su temporada, tuvieron unos días y ya se estaban preparando para los Juegos Olímpicos. Me parece mucho, demasiado. O sea, nosotras somos humanas, ¿no? No somos máquinas, no somos robots. Necesitamos descansar, desconectar, respetar nuestro cuerpo, nuestra mente. Después, la Champions, la Supercopa, la Copa de la Reina, los parones internacionales...
¿Consideras que guarda relación con las lesiones?
No soy médica, no soy experta en esto. Pero yo estoy segura de que sí. Como te he dicho antes, nosotras necesitamos respetar nuestro cuerpo en nuestras vacaciones, desconectar totalmente del fútbol y me parece muy complicado si terminas una liga tan tarde y en una semana o dos ya estás pensando en los Juegos Olímpicos es difícil. Es duro. Yo reduciría el calendario, teniendo más en cuenta el descanso de las jugadoras y sus vacaciones.
En estas cuestiones, el fútbol femenino cada vez se parece más al masculino. Otro de los frutos de su desarrollo, podría ser la crítica, más feroz y no siempre constructiva. ¿Cómo la encajas tú?
Bien, yo creo que al estar en el fútbol, o en el deporte de alto rendimiento, tenemos que estar preparados para la crítica, sea constructiva o destructiva. A mí, me da igual. Pues cuando hablan bien, bien. Cuando hablan mal, bien. Tengo que tener ese filtro de cuando las cosas no están bien o cuando no hablan bien. Tener ese filtro y darte igual. Los que importan son mi familia, mis amigos, mi círculo más cercano. Están siempre aquí cuando yo lo necesito porque cuando ganamos, somos las mejores. Todos te envían mensajes y cuando pierdes, cuando llegas a casa y coges el móvil, quien está ahí es tu familia y es la que te hace olvidar las críticas.
Volviendo al fútbol, es tu segunda etapa en nuestra liga, ¿con qué jugadora española te quedarías?
Aitana. Si tengo que elegir, Aitana. Es una locura, una genia jugando. Disfruto viéndola jugar. Ya sea en contra o en la televisión, me da igual. Pero disfruto, es una jugadora que yo disfruto.
¿Qué me dices de Kika?, ¿qué futuro le auguras?
Brillante, brillante. Creo que es una chica muy graciosa, ti ene mucho carisma, creo que se nota. Ella es así, es natural, no está intentando ser algo diferente, es ella. Y eso me gusta en ella porque es una persona transparente, es lo que es, lo que demuestra. Pero además es una jugadora con muchísima calidad. Y creo que nació justamente para jugar en el Barça.
O sea, su tipo de fútbol encaja perfectamente ahí. Sinceramente, no la veía en otro club. Me da pena que esté en el Barça y que no esté aquí con nosotras porque es muy buena (bromea). Somos muchas y estamos representando a nuestro país muy bien.
Oye, y hablando de gente divertida, ¿te han hecho alguna novatada?
Sí... pero, a ver, es que me da mucha vergüenza bailar, ¿ok? A ver, yo hablo, pero soy una persona que tiene vergüenza. Entonces me han hecho bailar para todas. Me ha tocado con Silvia Lloris, que a ella le da menos vergüenza...
¿Qué canción?
Pues una brasileña, así más conocida, porque así podemos bailar todas. Pero bien, me han recibido muy bien, estoy muy contenta.