PARIS FC - REAL MADRID

Los fantasmas de París amenazan a un Real Madrid que tira de conjura: "No nos rendimos"

El equipo blanco llega a Francia, donde nunca ha ganado, en medio de la crisis.

Las jugadoras del Real Madrid hacen piña en un partido de la Liga F. /REAL MADRID
Las jugadoras del Real Madrid hacen piña en un partido de la Liga F. REAL MADRID
Mayca Jiménez

Mayca Jiménez

Casi un año después, el Real Madrid vuelve a París. La 'ciudad de la luz' para muchos. La del infierno en Champions para las blancas. En la capital de Francia firmaron su sentencia en la fase de grupos de la pasada temporada (2-1) y sufrieron un duro correctivo en su debut europeo (4-0). Por tercera campaña seguida, el conjunto dirigido por Alberto Toril viaja a París con el escudo de las estrellas de fondo. Y, aunque cambia el rival -se miden al Paris FC y no al PSG-, las sensibles bajas (Caroline Weir, Carla Camacho, Naomie Feller, Linda Caicedo, Sofie Svava y Rocío Gálvez) y la mala dinámica no invitan al optimismo en su nuevo compromiso en suelo galo.

Con todo en su contra, el Real Madrid quiere crecerse. La adversidad aprieta, con Alberto Toril como señalado tras los malos resultados. Sin embargo, sus jugadoras han tirado de conjura para evitar manchar la camiseta que tantas noches de gloria ha dejado en esta competición en su categoría masculina. A esta motivación, a esas remontadas de Champions, se aferran las futbolistas blancas para seguir con vida en la Champions. Suman un punto de seis posibles -empataron ante el Chelsea y perdieron frente al Häcken- y son terceras en su grupo, con otras tres finales más, dos en el Di Stéfano y una en Stamford Bridge.

Hay margen de maniobra y las jugadoras del Real Madrid lo saben. "Sabemos que, históricamente, esta competición es muy importante para la sección masculina y queremos que también lo sea para la femenina. Empezar a escribir nuestra historia. Pero primero queremos ganar mañana y seguir teniendo opciones", aseguraba Olga Carmona, capitana y una de las estrellas del equipo blanco. Su voz no es la única que ha resonado en estos últimos días, con una conjura del vestuario en las redes sociales.

"No nos rendimos", "lo haremos", "déjales hablar"... E incluso alguna jugadora ha rescatado 'lemas' del club como la mítica frase de Santiago Bernabéu que ha lanzado Misa Rodríguez: "La camiseta del Real Madrid es blanca. Se puede manchar de barro, sudor y hasta sangre, pero jamás de vergüenza".

El cuadro madrileño se medirá a un Paris FC que infunde respeto, pese a que diez de sus jugadoras no se dedican profesionalmente al fútbol. Las francesas fueron el verdugo del Arsenal y del Wolfsburgo, vigente subcampeón de la Champions, en la previa de esta competición. Y, pese a que tienen su casillero en blanco en la fase de grupos -perdieron 4-1 ante el Chelsea y cayeron 1-2 en casa con el Häcken-, arrastran una buena racha en Liga y han demostrado ser un hueso duro de roer a domicilio: sólo ha perdido dos de sus últimos once partidos en casa en todas las competiciones, con siete victorias y dos empates.

Sin duda, el reto es mayúsculo para el Real Madrid, que ha recuperado a su goleadora Signe Bruun. La delantera danesa ha estado de baja desde el partido ante el Häcken tras un golpe y vuelve a una convocatoria junto a la canterana Olaya y otras jóvenes del filial como Marisa y Pau Comendador, que repiten en la lista de Toril tras destacar en sus primeros partidos en la élite. Sus nombres dan un soplo de optimismo a un equipo que quiere acabar con las dudas en París.