CHAMPIONS | REAL MADRID - CELTIC

Caroline Weir vuelve al pasado ante un Celtic "dolido" y en el que se le admira: "Es un poco loco"

La escocesa acapara los focos con el objetivo de liderar la primera victoria del Real Madrid en esta Champions.

Caroline Weir, jugadora del Real Madrid. /INSTAGRAM: CAROLINE WEIR
Caroline Weir, jugadora del Real Madrid. INSTAGRAM: CAROLINE WEIR
Mayca Jiménez

Mayca Jiménez

"Conoce bien al Celtic". Fran Alonso, ex entrenador del equipo escocés, apunta a Caroline Weir como "clave" en el duelo de la segunda jornada de Champions entre el Real Madrid y las escocesas. El técnico español, ahora sin equipo tras salir del Houston Dash, devuelve a la estrella blanca al pasado, a su periodo en el Hibernian, antes de dar el salto al Manchester City. Entonces, la escocesa se midió al Celtic, su rival de Champions este jueves (18:45h, DAZN) y frente al que seguirá recuperando sensaciones al volver de su grave lesión. "Estoy disfrutando de estar de vuelta y tratando de alcanzar el buen nivel de forma para ayudar al equipo. Me siento bien", confesó Weir en declaraciones recogidas por Real Madrid TV esta semana, justo un año después de su operación de rodilla. Con tres goles en este inicio de temporada y tras haber regresado a una convocatoria de su selección para el próximo parón, la '10' va a por todas, con la motivación particular de medirse a un club de su tierra.

También será un duelo decisivo para el Real Madrid, que quiere sumar el primer triunfo en esta Champions -perdió 3-2 ante el Chelsea en la primera jornada- y, de paso, acabar con su mal sabor de boca en esta competición -la temporada pasada sumó un punto de dieciocho posibles-. Tampoco ha tenido un buen inicio en esta Champions su rival, el Celtic, que cayó en casa ante el Twente (0-2). Una derrota que no ha sido aislada en estas semanas, pues se sumó un tropiezo en Liga frente al Hearts.

"Es un resultado que puede doler porque el Celtic nunca había perdido en toda su historia contra el Hearts. Es la primera derrota de su historia y eso puede pesar en la confianza de algunas jugadoras, pero creo que para ellas es una oportunidad espectacular poder ir a Madrid", avisa Fran Alonso, que describe en una charla con Relevo cómo ha crecido el Celtic en los últimos y qué puede esperar el Real Madrid de su próximo rival en la Champions.

"Cuando yo fiché, en diciembre de 2019 y enero de 2020, el equipo estaba convirtiéndose en totalmente profesional. En mis primeros meses en el club entrenábamos en cuatro sitios diferentes. La mitad de la plantilla entrenaba algunas tardes porque algunas jugadoras trabajaban y tenían trabajos a tiempo completo fuera del fútbol. Fue un año bastante difícil. Ahora, ya el año pasado, antes de irme, empezaron a construir Barrowfield, que está justo al lado de Celtic Park, y son unas instalaciones de primer nivel. Las instalaciones son fantásticas, con un gimnasio de última generación y se juega principalmente en césped artificial, por el tema climatológico. Si fuera césped se tendrían que suspender muchos partidos porque es un clima muy frío allí. El equipo desayuna y come en Celtic Park...", detalla el técnico español.

A esto, añade: "Cuando yo salí del Celtic para ir a Houston Dash, se pagó por mí y ese dinero se reinvirtió y sirvió para adquirir buenas jugadoras, jugadoras que a lo mejor en mi tiempo allí no nos podíamos haber permitido". Entre los nombres destacados de la plantilla del Celtic, Fran Alonso subraya varios.

Desde Kelly Clark, la capitana y encargada de marcar los tiempos en el equipo escocés, hasta Amy Gallacher, Natalie Ross, Caitlin Hayes o Katherine Loferski, que no estuvo en el último partido y, de jugar ante el Real Madrid, representa uno de los mayores peligros del Celtic. "Es rapidísima, una de las jugadoras más rápidas de la liga escocesa, si no la más rápida, y es muy difícil defenderla. Si el equipo contrario está alto y deja espacio en la espalda, es una jugadora que puede hacer muchísimo daño", apunta Alonso.

Sobre Kelly Clark destaca la inteligencia de su juego. Mientras, pone el foco en Hayes, que es una jugadora "emblema", "muy agresiva en duelos aéreos" y presenta un golpeo "espectacular" con las dos piernas en disparos lejanos y jugadas a balón parad, en Ross que, pese a que ha tenido problemas físicos en el último año y medio, es uno de los pilares del Celtic, y, sobre todo, en Amy Gallagher.

A la centrocampista, de corte ofensivo, se refiere como una de las jugadoras "más inteligentes" a las que ha entrenado: "Tiene mucha calidad técnica, lee muy bien los partidos, la toma de decisiones es fantástica y tiene muy buena definición con las dos piernas. El año pasado fue la máxima goleadora del equipo, este año parece ser que ha tenido un poco de mala suerte con un par de lesiones y no ha conseguido esa forma top que tuvo el año pasado, pero es una jugadora que, como tenga el día, puede ser muy desequilibrante.

Weir, con 'fans' en el equipo rival: "Es un poco loco"

Precisamente, Amy Gallacher es una de las que tomó la palabra en rueda de prensa junto a la entrenadora Elena Sadiku. La futbolista escocesa aprovechó su intervención ante los medios para destacar la figura de Caroline Weir. "Es un gran desafío. Personalmente, admiraba a Caroline cuando era joven y crecía viéndola jugar al fútbol, así que jugar contra ella, estando en el Real Madrid, es un poco loco, así que es algo que estoy deseando hacer, he estado intentando disfrutar del equipo. Crea goles, marca goles. Así que, obviamente, es algo que queremos parar durante el partido. Creo que es una gran jugadora para ellas. Si la detenemos, tendremos una oportunidad. No voy a compararme con ella, pero la admiro y quiero parecerme a ella", indicó Gallacher.

Todas ellas conforman un "equipo agresivo" y que está muy acostumbrado a ganar en la liga escocesa. "No se les puede menospreciar porque pueden sorprender", manifestó Fran Alonso, que recuerda con cariño sus años en el banquillo del Celtic rodeado de una masa social que no ha dejado de crecer y que dejó momentos históricos como el récord en un partido en Celtic Park (17.000 personas).

"No solo en el estadio, sino que cuando jugábamos fuera los fans llevaban un autobús y parecía que jugábamos en casa todos los partidos porque cantaban desde el minuto uno. Todas las jugadoras tienen su canción. Es que es espectacular. Hay una comunidad fantástica y es un sitio entrañable. Hay una unión, en la victoria y en la derrota, muy especial", sentencia el técnico español, que pone en preaviso al madridismo de la esencia de un rival, a priori asequible para las de Alberto Toril, que también tiene sus armas.