F1 | GP CATAR

Verstappen, Russell y una guerra que no tiene vuelta atrás: "No le soporto"

El cuatro veces campeón del mundo arremetió contra el británico: "Es mejor que se vaya a la mierda".

Verstappen charla con Leclerc. /EP
Verstappen charla con Leclerc. EP
Agencia EFE
Equipo Relevo

Agencia EFE y Equipo Relevo

El neerlandés Max Verstappen (Red Bull), que el pasado fin de semana se proclamó matemáticamente tetracampeón del mundo en Las Vegas (EEUU) y que este domingo ganó el Gran Premio de Qatar, el penúltimo del Mundial de Fórmula Uno, pasó facturas a George Russell. En plena alegría, quitó el freno y se lanzó dialécticamente a por su rival, acordándose de la sanción en qualy. Recordemos lo que sucedió. En la Q3, el neerlandés rodaba "innecesariamente lento" preparando su vuelta rápida y Russell, que venía detrás, tuvo que frenar para evitar males mayores. Pues bien, aunque al principio parecía que el caso no iba a pasar a mayores, el británico habló con los comisarios y al final Verstappen acabó sancionado.

"Me sorprendió bastante todo lo que pasó en la sala de los comisarios. Sinceramente, es muy decepcionante porque todos los que estamos aquí nos respetamos y yo en mi carrera he estado en esa sala muchas veces con gente con la que he competido. Pero nunca había visto a nadie tratar de fastidiar a otro de esa manera. Para mí… he perdido todo el respeto", declaró el cuatro veces campeón del mundo.

"No podía creerme la sanción. Pero de alguna forma tampoco es algo que me sorprenda en este mundo en el que vivimos. Hay que pasar página. No fue divertido, es la primera vez que se penaliza a alguien en una vuelta de calentamiento. Además yo intenté hacerlo bien, quizás no debía haberlo hecho. Al final de la sesión todo está más o menos decidido y yo no quería fastidiar la vuelta de nadie o la preparación de nadie. Me penalizan por hacerlo bien. Es lo que traté de explicar a los comisarios, pero fue como hablar con una pared. Di razones válidas y estaba claro que a mi alrededor tenía situaciones diferentes, con gente con neumáticos fríos, así que tenía que apretar y no quería que en la última curva nadie pudiera empezar su vuelta", explicó.

Ante los medios de su país, se mostró más furibundo: "¿Hablar con Russell por lo de ayer? No, no por ahora. De hecho, ¿sabéis qué? Siempre se muestra muy educado delante de las cámaras, pero cuando lo conoces en persona, se convierte en una persona completamente diferente. Realmente no lo soporto. Es mejor que se vaya a la mierda, no quiero tener nada que ver con él".

Después de este ataque, el piloto se centró, de nuevo, en valorar el triunfo. "Ha sido una carrera muy buena. Por supuesto, ya ayer, durante la calificación el coche ya iba mucho mejor", comentó tras lograr su sexagésima tercera victoria en la Fórmula Uno, la novena del año, brillando en la noche catarí, en la que se impuso por delante del monegasco Charles Leclerc (Ferrari) y del australiano Oscar Piastri (McLaren), que, por ese orden, completaron el podio.

"Y sí, esa primera tanda fue muy, muy rápida", apuntó el astro neerlandés nada más bajarse del coche este domingo en Lusail. "Lando (Norris, inglés de McLaren) y yo rodábamos en sólo un segundo y ocho décimas de separación entre nosotros durante todo el tiempo, apretándonos el uno al otro. Y, sinceramente, ha estado bien divertido ahí afuera", señaló. "La pista tiene mucho agarre. Y este año, los neumáticos aguantaban. Así que fuimos bastante largos en el primer 'stint' (tanda)", añadió.

"Después, por supuesto, hubo un par de momentos con el coche de seguridad que tuvimos que controlar", advirtió el ídolo deportivo de los Países Bajos después de festejar su novena victoria en el campeonato.

"Pero estoy muy contento. Hacía tiempo que no éramos tan competitivos; y estoy muy orgulloso de todo el mundo en el equipo por haberle dado la vuelta al asunto en un solo día. Ellos también se han merecido esta victoria", afirmó Verstappen después de repetir el triunfo del año pasado en Qatar.