FÓRMULA 1

Un circuito semiurbano 100% descarbonizado para el regreso de la F1 a Madrid en 2026

Los responsables del proyecto que quiere devolver la F1 a la capital trabajan en una ambiciosa propuesta de trazado alrededor de IFEMA para la temporada 2026.

Exteriores del edificio principal del IFEMA de Madrid. /IFEMA
Exteriores del edificio principal del IFEMA de Madrid. IFEMA
Sergio Lillo

Sergio Lillo

Las negociaciones entre la Fórmula 1 e IFEMA, consorcio organizador de ferias y congresos de Madrid, avanzan con paso firme. El proyecto para que el Gran Circo vuelva a la capital de España ha completado sus cimientos y mira hacia delante con el compromiso inicial de estrenar el circuito semiurbano en la zona norte de la capital en la temporada 2026, como adelantó Relevo a principios de septiembre.

El presidente del Comité Ejecutivo de IFEMA, José Vicente de los Mozos, director mundial de Fabricación y Logística del Grupo Renault y presidente de la compañía del rombo en España y Portugal, capitanea personalmente la negociación. El directivo ha sido en los últimos años pieza clave en la continuidad de las plantas de fabricación de la compañía francesa en Valladolid, Palencia y Sevilla.

De los Mozos se reunió en Madrid con Stefano Domenicali, CEO de Formula One Group -responsable de la promoción y los derechos de la F1-, después del verano para cerrar el acuerdo de exploración de la inclusión de Madrid en el calendario de los grandes premios, según han confirmado a Relevo fuentes cercanas a las negociaciones. El objetivo del proyecto liderado por De los Mozos tiene como principales pilares la ausencia de dinero público y la sostenibilidad como referencia de modelo de negocio y medioambiental.

La propuesta contempla el diseño de un circuito semiurbano que recorrería parte de las instalaciones de IFEMA (a escasos cinco kilómetros del Aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid Barajas) y que se adentraría en el barrio de Valdebebas, uno de los de más reciente creación al norte de Madrid y aún en expansión.

Uno de los planteamientos claves es que la construcción y el funcionamiento del trazado (suministro eléctrico de las diferentes instalaciones, asfaltado, barreras de protección, etc.) han de cumplir el requisito de la neutralización de las emisiones de CO2. Para ello, se utilizarán energías renovables en todo el proceso y se compensarán las emisiones con distintos proyectos de captura de CO2 de la atmósfera.

Un proyecto que encaja con el futuro de la F1

Este filosofía encaja a la perfección con la de la propia F1, que en la temporada 2026 estrenará su nueva generación de motores de combustibles sintéticos. Estos consumirán un 30% menos de combustible y contarán con tres veces más energía eléctrica durante su funcionamiento. Esto ha atraído ya la entrada de Audi como nuevo fabricante de propulsores para la categoría, en asociación con el equipo Sauber, y el interés de otros fabricantes.

Además, en 2030, el campeonato quiere tener emisiones cero emisiones netas de carbono en toda su actividad, algo en lo que la Fórmula E (categoría de monoplazas 100% eléctricos que corren en circuitos urbanos creados por Alejandro Agag) fue pionera en 2020.

El proyecto no contempla la inversión de dinero público. Por ende la organización mantiene conversaciones con varios inversores internacionales interesados en asociarse a la idea. De llevarse a cabo, la carrera en Madrid se uniría a las otras siete en circuitos urbanos o semiurbanos, de las 24 totales, que actualmente forman parte del calendario de la F1.

"Este proyecto es el único serio y profesional para devolver la Fórmula 1 a Madrid actualmente", aseguran fuentes cercanas a las negociaciones, que descartan la remodelación del Circuito del Jarama para adaptar el circuito a los criterios actuales de la FIA para albergar un Gran Premio de F1. El trazado madrileño fue el último lugar donde se celebró una carrera del Gran Circo: el 21 de junio de 1981.

Han pasado más de 41 años sin F1 en Madrid, pero el regreso de la máxima categoría podría estar en el horizonte, después de varios intentos infructuosos en el pasado, como el del circuito de Pinto o el de la carrera en el Paseo de la Castellana. Ahora sí, parece que los pasos que se están dando son sólidos, con pausa, pero sin descanso.