Se acaba el 'Caso 'Horner' en Red Bull tras desestimar la apelación de la empleada que le denunció por acoso

El caso más polémico de los últimos meses en Fórmula 1 se ha cerrado. Meses después de conocerse que Christian Horner, director de Red Bull, había sido denunciado por una trabajadora por "supuesta conducta inapropiada", se ha conocido que la apelación para terminar de culpar al británico ante instancias superiores ha sido desestimada y, por tanto, el caso queda totalmente cerrado con el mismo resultado que hace apenas unos meses, Horner queda completamente exculpado. 

Todo el culebrón Horner comenzó hace ya ocho meses. El alto cargo de Red Bull fue acusado de haber mantenido comportamientos inaceptables con una trabajadora del propio equipo. "Niego las alegaciones que se han hecho. Pero estoy en un proceso y lo respeto. Claro que ha sido una distracción, pero el equipo está unido en esto. Somos un equipo, un grupo y los accionistas son un apoyo para el equipo. He liderado a Red Bull durante 20 años, no tengo dudas sobre eso", dijo en la presentación del nuevo RB20.

A pesar de que en un primer momento la denuncia fue desestimada, la aparición de nuevas pruebas llevó a la empleada -que fue suspendida de empleo y sueldo-a recurrir en busca de otra solución. Algo que finalmente no ha ocurrido ya que la apelación, tal y como se ha conocido este jueves, ha sido desestimada y el caso se ha cerrado definitivamente.

"A principios de este año se investigó una denuncia presentada contra Christian Horner. Esa queja fue tramitada a través del procedimiento de quejas de la compañía mediante el nombramiento de un KC [King's Counsel] independiente que desestimó la queja. La denunciante ejerció el derecho de apelación y ésta fue tramitada por otro KC independiente", comenzaba explicando el comunicado difundido por el equipo.

"Ya han concluido todas las etapas del proceso de apelación, con el resultado final de que no se estima el recurso. Las conclusiones del KC han sido aceptadas y adoptadas por Red Bull. El proceso interno ha concluido", concluía. Una solución solución favorable para el director de la escudería vigente campeona del mundo que, además, llega en un momento crucial para los austriacos.

Después de anunciarse la inesperada salida de Adrian Newey -del que aún se desconoce destino-, de la marca de bebidas energéticas, la semana pasada se hizo oficial que su director deportivo, Jonathan Wheatley también abandonaba el barco con destino al proyecto de Audi. Dos bajas sensibles que se suman a la pérdida de eficacia que atraviesa actualmente Red Bull y a las últimas polémicas con Checo Pérez y el entorno de Max Verstappen.

En cuanto a la trabajadora, desde el equipo han dejado claro que podrá regresar a su puesto de trabajo de manera normal y sin represalias. Eso sí, sin opción de viajar a los grandes premios para evitar así conflictos internos y poder seguir manteniendo su privacidad como hasta ahora.