FÓRMULA 1

Los datos le dan la razón a Carlos Sainz en su camino hacia el Mundial de F1

El madrileño ha mejorado sus prestaciones cada temporada desde que debutó en el Gran Circo en 2015.

Los datos le dan la razón a Carlos Sainz en su camino hacia el Mundial de F1
Óscar Méndez

Óscar Méndez

Dentro de 24 horas, los semáforos del Circuito Internacional de Baréin lucirán un verde impoluto durante la primera jornada de los únicos entrenamientos oficiales que tendrán los equipos de Fórmula 1 antes de comenzar, una semana después y en el mismo trazado, la temporada de manera oficial. Las 10 escuderías tendrán tres días para intentar afinar sus monoplazas antes del primer Gran Premio. Entre los presentes en el país asiático estará Carlos Sainz, que este año afronta una campaña crucial en la que espera seguir creciendo como piloto y pelear por el título. Será su noveno año en el Gran Circo y en todos y cada uno de los anteriores logró mejorar su rendimiento.

Así fue la presentación del nuevo coche de Carlos Sainz.EFE

Hablar de Carlos Sainz es hacerlo de un piloto infravalorado, uno que ha ido aumentando sus prestaciones al volante año a año desde que en 2015 ocupó uno de los asientos disponibles en Toro Rosso. En aquella ocasión a su lado estaba el mayor talento que ha llegado a la F1 en la última década, un Max Verstappen que ya tiene en sus vitrinas dos títulos de campeón del mundo. Y el madrileño le plantó cara, superándole en nueve carreras frente a las 12 en las que se impuso el neerlandés mientras corrieron juntos. Su mejor puesto durante aquel campeonato fue un séptimo y en la general finalizó 15º.

Al año siguiente Verstappen voló a Red Bull muy pronto y Sainz asumió los galones de liderar a su filial con el ruso Daniil Kvyat al lado. El balance tras 31 Grandes Premios no pudo ser más demoledor, con un contundente 21-7 para el español, que también mejoró sus prestaciones generales con varios sextos puestos y la 12ª posición final en el Mundial.

Carlos Sainz y Max Verstappen, durante su etapa en Toro Rosso.  EFE
Carlos Sainz y Max Verstappen, durante su etapa en Toro Rosso. EFE

El 2017 fue el año del cambio, y pese a que comenzó la temporada en la misma escudería que las dos anteriores, en el tramo final se marchó a Renault, con quien ya tenía contrato para el año siguiente. Antes de eso, rozó un podio con Toro Rosso (cuarto puesto en Singapur) y su nivel le llevó al 9º puesto en el campeonato de pilotos. En 2018, ya bajo los colores de la marca francesa, tuvo una dura pugna con un Nico Hülkenberg que le obligó a dar lo mejor de sí para calcar prácticamente los resultados del curso anterior.

Primer podio

En 2019 volvió a estrenar colores, esta vez en McLaren junto a Lando Norris, otro talento que llegaba a la Fórmula 1 como una de las grandes esperanzas de presente y futuro. Sainz, sin embargo, mostró su veteranía en el Gran Circo y le superó por 47 puntos en la clasificación, llegando al sexto puesto final y consiguiendo su primer podio al subirse al tercer puesto del cajón en Brasil.

Más complicado para toda la parrilla fue el año 2020 por la pandemia de la COVID-19. El madrileño repitió equipo y compañero y mejoró de nuevo sus resultados deportivos. Volvió a firmar un podio, aunque esta vez fue un segundo puesto en Monza, y aunque también terminó sexto en el Mundial, sumó más puntos que el curso anterior (105 frente a 96) en menos carreras. Norris, de nuevo, quedó por detrás de él.

Gran año 'rookie' en Ferrari

En 2021 le llegó la gran oportunidad. Ferrari, uno de los grandes dominadores en la historia de la Fórmula 1, le eligió para ser el acompañante del monegasco Charles Leclerc, que ya acumulaba dos años de experiencia con los italianos, con los que ya había sido cuarto en el campeonato (2019). Sin embargo, en el cara a cara esa primera temporada se impuso el español, tanto en podios (cuatro frente a uno) como en puntos (164,5 frente a 159), algo inimaginable antes de la primera carrera. Sainz acabó aquel Mundial como quinto clasificado.

En 2022 repitió puesto final en el campeonato, pero elevó su puntuación hasta los 246. Además, por fin consiguió hacer sonar el himno español en su honor tras imponerse en Silverstone en una carrera que ya es historia tras desafiar a su propio equipo cuando le sugirieron que se dejase pasar por Leclerc en las últimas vueltas. El balance del año se saldó con ese triunfo y ocho podios más (tres segundos puestos y cinco terceros).

Sainz y Leclerc, este año en la presentación de Ferrari.  EFE
Sainz y Leclerc, este año en la presentación de Ferrari. EFE

Ahora, en 2023 espera recuperar el nivel de regularidad que tuvo hace dos años y no se descarta para poder pelear por el título, aunque sabe que necesitan tener un año redondo. "Obviamente, intentaré mejorar lo que hice el año pasado. Creo que la prioridad del equipo es dar otro paso adelante en comparación con la temporada pasada. Cuando estás en Ferrari y eres tan competitivo como soy yo, el objetivo tiene que ser luchar por el campeonato e intentar ganar, así tiene que pensar todo el equipo. Me siento más capaz, mejor preparado. Con el coche del año pasado no estaba listo, pero ahora sí lo estoy", dejó claro en la presentación del equipo hace unas semanas.