Angela Cullen fue mano derecha de Hamilton, pero se hartó y acabó en la F4 española: "Tenía un trabajo muy exigente en un mundo muy íntimo"
Vivió cuatro Mundiales en los siete años que pasó pegada al británico. Ahora, prefiere el anonimato y la vida lejos de los focos.
El "I don´t do interviews" (no doy entrevistas) de Angela Cullen dice mucho sobre su nueva vida. Fue la mano derecha de Lewis Hamilton durante su época dorada en Mercedes pero se hartó de los sofocantes focos del Gran Circo. Acaparó casi tantos tiros de cámara como el británico durante los cuatro Mundiales que ganó a su lado pero se cansó. Ahora, viaja por circuitos nacionales en la humilde Fórmula 4 española aunque, a pesar de haberse alejado de la élite, sus ingresos no parecen haberse desplomado demasiado.
Es poco habitual que alguien pase de tanta exposición a rozar el anonimato de la noche a la mañana. Es oficioso que Cullen añoraba la tranquilidad y que se cansó de estar todo el año fuera de casa. "Siempre estaremos en la vida del otro", exclamó el piloto en el largo comunicado de despedida que le dedicó cuando se separaron. Sonaban a una expareja más que a dos extrabajadores, ya que lo habían compartido casi todo entre 2017 y 2023. "La Fórmula 1 es un mundo muy íntimo, tenía un trabajo muy exigente, con tanto viaje y alejada de su familia", explicó Hamilton tras separar sus caminos en marzo del año pasado.
"Crecimos muy cerca juntos. Si estabas cenando, el finde o viajando, sois tú, tu fisio y tu familia. Angela vive su vida ahora, tiene muchas ideas de cosas que quiere hacer, hablamos cada día, buceamos juntos y estamos pegados el uno al otro. La quiero un montón y espero que tengamos una de las relaciones más largas del mundo del deporte". Hamilton le dedicó más palabras de cariño hace año y medio nada más anunciarse su separación, consciente de su rol en sus éxitos: "Me ha hecho mejor persona".
Cullen, que era inseparable del piloto y de su perro Roscoe, no quiere entrevistas porque ha abrazado la tranquilidad y la paz mental, como escribe en sus publicaciones en redes sociales. Llama la atención que su salario, presumiblemente, no ha perdido demasiados ceros pese a estar muy lejos de la máxima categoría. Sin conocer lo que cobraba al lado de Hamilton ni lo que percibe ahora, este medio ha podido averiguar que la familia del piloto al que asiste en España es poderosa. Se entiende que pagarán una cantidad generosa por tener a una profesional de primer nivel al lado de su hijo.
Ahora, la exfisio y performance coach de Hamilton toma el sol felizmente, como un lagarto, tumbada en el pit lane de Montmeló. Es la estampa que mejor define su nueva etapa en España. Cullen no ha abandonado las carreras, ya que sigue realizando las mismas labores que desempeñó entre 2017 y 2023 con el británico pero con una mejor salud mental. No hay críticas de la prensa ni polémicas con la FIA.
La neozelandesa prepara, asiste y se preocupa ahora por otros pilotos: Marcus Armstrong, del equipo Chip Ganassi de la IndyCar, e Isaac Barashi, del equipo GRS de la Fórmula 4 española. Es inevitable encontrársela en un box del circuito de Montmeló y no sorprenderse. Ha pasado de estar en el foco mediático a, fruto de la saturación y el desgaste, pasar a un segundo o tercer plano.
Del Gran Circo a la Fórmula 4
Angela Cullen llegó al equipo GRS en enero de la mano de uno de sus pilotos, el británico Isaac Barashi. Era pretemporada y, después de haber hecho cuatro rondas de la F4 española, decidió seguir en el equipo para hacer la temporada completa de la EuroCup-3 este año. Los pilotos, ya desde bien jóvenes, cuentan con coach de pilotaje, preparador físico y otro tipo de profesionales dedicados a potenciar su rendimiento en pista. Estos servicios son ajenos al equipo y la decisión de contar con ellos es del piloto.
La preparadora acudió a los tests y carreras junto a Barashi y, por tanto, se podría decir que ha formado parte del equipo en esos fines de semana. En la escudería reconocen lo metódica que es en su trabajo cuando prepara las rutinas de ejercicio y calentamiento del piloto: le acompaña en los ejercicios, le proporciona el material necesario para el entrenamiento y hasta le quita la sombra cuando está subido al coche.
Cullen ya es una más en el día a día del equipo y mantiene una actitud cercana y agradable con sus integrantes, más allá del joven piloto. Los recursos de su familia, como ocurre con la mayoría de pilotos, le han ayudado a participar en la categoría. En Montmeló, durante el último fin de semana de F4, aparcaron su imponente autocaravana dentro del circuito.