Así se cuece el espionaje entre equipos del Tour de Francia: de piratear las radios a los datos secretos del Strava

Etapa plana en marcha, pelotón con los brazos bajados resentido por la paliza física de la víspera. Se han marchado sólo tres ciclistas a la escapada y cuatro equipos de velocistas quieren forzar la llegada masiva: ocasión ideal para relajarse, para recuperar cuerpo y mente hoy que la temperatura y el trazado ofrecen un respiro. Y entonces cae una orden en la radio del UAE Team Emirates de Tadej Pogačar: "Muy bien, chicos. Ahora hacemos el Plan C. Todo el mundo a saltar al tigre. Cuando los cocodrilos naden, saltáis".

Risas. Todo el mundo comprende que es una broma, y el propio Fabio Baldato, el director deportivo de UAE Team Emirates autor del mensaje, lo reconoce cuando le pregunta France Télévisions. Una ironía sobre las team radio, una de las grandes novedades de este Tour de Francia: la retransmisión en ligero diferido de algunas órdenes de los directores a sus corredores en carrera.

En realidad, no existe la necesidad de 'codificar' los mensajes. Si los equipos interpelan a ASO, organizadora de la gran ronda francesa, solicitando explícitamente que un mensaje concreto no sea difundido, los moderadores lo dejaran fuera de la emisión. Es más: uno de los criterios con los que se decide qué mensajes se hacen públicos es no desvelar tácticas ni estrategias antes de que se produzcan.

No hace tanto tiempo, el pirateo de radios estaba a la orden del día. Los mensajes delicados se daban directamente desde la ventanilla del coche: el 'capitán' bajaba a la cola del pelotón para hablar con el director y recoger tanto bidones como directrices. Algunos equipos iban un paso más lejos y servían a sus ciclistas a través del pinganillo unas órdenes contrarias a las pactadas en el autobús, para confundir a oídos indiscretos. Y famoso es cómo Lance Armstrong engañó al Telekom de Jan Ullrich en una etapa de montaña del Tour de Francia 2001 comentando sus malas sensaciones por la radio, dejándose caer a las catacumbas del grupo… simplemente para que fueran ellos quienes tiraran del pelotón, y después rematarles en el Alpe d'Huez.

Sin embargo, el espionaje ahora se realiza de manera mucho más sutil. Los datos de rendimiento son la clave. Permiten saber cuál es el límite del cuerpo ajeno; cuándo es éste más vulnerable, dónde tiene tu líder una ventaja competitiva respecto a sus rivales. "No te puedo decir mucho sobre esto", comenta a Relevo el mánager de un equipo participante en el Tour de Francia. "Digamos que hay muchísimos datos disponibles en plataformas como Strava… pero que, más allá, los científicos del deporte que son verdaderamente brillantes no necesitan tirar de Strava para saber cuánto anda un rival. Pueden calcular su rendimiento simplemente conociendo el tramo, sus porcentajes, la velocidad, las condiciones meteorológicas… y toda esa información se puede encontrar".

"Lo de Strava es interesante", aporta un director deportivo con más de diez Tours de Francia de experiencia. "Puedes inferir muchos datos de tu rival, pero lo cierto es que tiene truco. Los entrenamientos importantes de verdad no siempre se publican. Y, además, tampoco la información que hay está detallada de manera que se pueda llegar a conclusiones firmes. La mayoría oculta las series; e incluso éstas tienen truco, porque no siempre sabes qué precede a esas intensidades y eso es básico a la hora de interpretarlo".

"Cualquier dato es interesante para ver cómo trabajan los rivales, e incluso para aprender sus técnicas y confirmar las nuestras". Quien tercia es un preparador físico del UCI WorldTour. Le preguntamos si la Inteligencia Artificial, agregando todos los datos que un ciclista haya publicado en su Strava, puede llegar a predecir el rendimiento de un ciclista en su cénit. "Nosotros estamos trabajando en ello", reconoce. "Sin embargo, queda mucho por enseñarle a la IA. Mi gran duda es qué parámetros podrá inferir la IA en el futuro que nosotros no podamos conocer a día de hoy".

Otro asunto es el scouting. Los mejores equipos del mundo, como UAE Team Emirates o Jumbo-Visma, cuentan en su cuerpo técnico con analistas de carrera. ¿Cuál es su trabajo? "Analizan sobre todo a los rivales", explica el mánager. "En un partido de fútbol sólo debes controlar a un equipo; en una carrera ciclista, hay 22. Cuando diriges o ves una carrera, te centras sobre todo en tu propio equipo. Los analistas nos ayudan porque se fijan en los rivales: en entender mejor lo que hacen, cómo se comportan, cómo reaccionan, sus fortalezas y debilidades…".

El objeto de análisis son los patrones de conducta de los rivales. "Quitando ciclistas como Tadej Pogačar, que siempre te puede sorprender, los demás son predecibles", explica el director. "Jumbo-Visma, por ejemplo, hace las cosas muy bien. En las vueltas salen cada día con una intensidad planeada y no entran al juego de revolucionar la carrera así como así. Juegan con paciencia y plantean un par etapas espectaculares en cada 'grande' para romperlo todo. Ineos Grenadiers, por su parte, siempre ha competido igual, aprovechando la calidad de sus corredores y que contaban con líderes que remataban tanto en montaña como en contrarreloj. Trazan un guión en el autobús y lo siguen, pase lo que pase".

La conclusión la aporta el director. "Disponemos de tanta información que todo está bastante medido. Yo mismo sé cuánto gasta un ciclista cada vez que baja al coche del equipo a por bidones. Por eso procuro reducir esos viajes al mínimo y plantear muchos 'extra feed' donde un par de masajistas estén en la cuneta, esperando con bolsas de bidones. Hay que evitar ese sobreesfuerzo". Cada gramo de energía, cada vatio, cuenta; más todavía si el rival sabe los que tienes.