CICLISMO

Movistar Team, "tranquilo" con la actuación de Enric Mas en Suiza: "El Tour será otra historia"

El mallorquín concluyó 7º en la ronda helvética, encadenando actuaciones desiguales mientras arrollaban los compañeros de Tadej Pogačar.

Enric Mas concluyó 7º en la reciente Vuelta a Suiza. /MOVISTAR TEAM / @GETTYSPORT
Enric Mas concluyó 7º en la reciente Vuelta a Suiza. MOVISTAR TEAM / @GETTYSPORT
Fran Reyes

Fran Reyes

La Vuelta a Suiza terminó este domingo en la estación de montaña de Villars-sur-Ollon con una cronoescalada que ratificó lo visto a lo largo de una semana en la que se encadenaron nada menos que cuatro finales en alto. Dos hombres de UAE Team Emirates, Adam Yates y João Almeida, se mostraron muy por encima de la concurrencia para acabar primero y segundo de la general, con dos etapas cada uno en su cuenta particular y tres minutos de ventaja respecto a los rivales más próximos, Mattias Skjelmose (Lidl-Trek), Egan Bernal (Ineos Grenadiers) y Matthew Riccitello (Israel-Premier Tech). Un poco más atrás, séptimo final a cinco minutos del dúo que se pondrá al servicio de Tadej Pogačar en el inminente Tour de Francia, acabó Enric Mas, líder designado de Movistar Team para la Grande Boucle.

La Vuelta a Suiza era la primera aparición del mallorquín en competición desde finales de abril: su cuarta ronda UCI WorldTour de la temporada tras Tirreno-Adriático (12º final), Volta a Catalunya (5º) y Tour de Romandía (6º). Mas volvió a hacer gala de su solidez y competitividad en lo que a disputar puestos de honor se refiere, pero estuvo lejos de la victoria.

Sólo en la quinta etapa, segundo final en alto de la ronda helvética y aquel que concentraba mayor dureza en los 25 kilómetros finales por la longitud y pendiente media de la ascensión conclusiva hasta Carì, Enric Mas se aproximó al triunfo parcial. Sólo él pudo aguantar el par de Adam Yates hasta 900 metros del final, cuando claudicó y fue rebasado por Almeida, Bernal y Riccitello. Ese mismo día, en el 'canutazo' de meta, reconoció no estar "súper feliz" con su rendimiento. "Todavía me falta un punto de forma física, pero espero ir creciendo".

"Para estar súper contentos, deberíamos haber terminado terceros o cuartos", reconocen desde el seno de Movistar Team. "No obstante, estamos tranquilos porque sabemos que su condición física es buena. Su preparación ha incluido mucho volumen y poca intensidad porque no sólo pensamos en el Tour de Francia, sino también en la Vuelta a España. Sabíamos que, en las situaciones límite, le iba a faltar un poco de chispa; pero a nivel aeróbico, en el esfuerzo continuo, ha rendido muy bien. Suiza ha sido una vuelta especial, con muchas etapas 'monopuerto' e incluso algún día corto y explosivo. El Tour será otra historia".

Desde el conjunto telefónico reconocen, asimismo, errores puntuales que afectaron al resultado final. Por ejemplo: en la breve sexta etapa, reducida a 42,5 kilómetros por cuestiones meteorológicas, encaró la ascensión final a Blatten-Belalp mal colocado: "Un detalle que, en una carrera tan específica como fue aquella, se acaba notando". También en la cronoescalada final fue de más a menos: "Perdió casi todo el tiempo en los dos kilómetros finales". Nada grave: sólo dos lecciones útiles en la antesala del Tour.

Concluida la ronda helvética, Enric Mas regresó a capilla. El balear está de nuevo en Andorra, el mismo lugar donde estuvo concentrado durante cuatro semanas (tres de ellas junto a sus compañeros de Movistar Team) antes de desplazarse a Suiza. Allí pasará los próximos diez días en vísperas de viajar a Florencia para participar en la Grande Boucle, con una pequeña posibilidad de que se desplace a Madrid este fin de semana para disputar los Campeonatos de España.