Los Hispanos se clasifican para cuartos de final del Mundial enseñando una defensa de campeón
España se jugarán el primer puesto del grupo el próximo domingo ante la selección francesa.
El calendario de los Hispanos en la Main Round de este Mundial de Suecia y Polonia se ha propuesto que la dificultad vaya subiendo con el paso de los partidos y, de manera progresiva, el combinado español vaya poniéndose a punto para los cruces. Si Polonia presentó batalla en el primer partido de esta ronda principal, hoy ha llegado Eslovenia para aprender a frenar un ataque de calidad y derrocar al primer gran día de un portero rival. Una dificultad que ha tenido que sacar lo mejor de Jordi Ribera para ganar la guerra táctica de los banquillos y que la Selección de balonmano de España, a partir del descanso, hiciera efectiva su clasificación para cuartos de final.
Como Ian Tarrafeta comentaba a Relevo antes del Mundial, la Eslovenia de Uros Zorman es una de las selecciones más parecidas al estilo de juego español y eso ya prometía unas dificultades poco habituales. Los Hispanos empezaron bien (llegaron a abrir un hueco de 7-2) pero, como si de un espejo se tratara, los eslovenos iban asimilando el plan español e igualando fuerzas una y otra vez. Lo conseguían hasta en la portería, donde las paradas iniciales de Gonzalo Pérez de Vargas eran respondidas por una racha que ha llegado a ser exhibición de Urban Lesjak, que llegó a rozar el 50% de paradas en el descanso.
La defensa, clave
La lucha de poder a poder parecía difícil de desnivelar, pero los partidos los cambia la defensa. Hoy, liderada por la movilidad de Miguel Sánchez-Migallón, el muro español empezó a bajar los porcentajes disparados de los lanzamientos eslovenos. Ribera sabía que si anulaban su acierto, el partido no se escapaba. Todo se redondea con buenos minutos basados en algunas dosis de la calidad de Agustín Casado, el héroe imprevisto Adriá Figueras en el pivote y la apertura de los extremos cambiando el ritmo.
Si Polonia se quedó con un pie fuera del partido en los primeros cinco minutos de la segundo mitad, Eslovenia aún se pregunta como, en un abrir y cerrar de ojos, se vio abajo por cuatro goles en el minuto 15 del segundo tiempo. Los hermanos Dujshebaev rompieron definitivamente el partido para meter a España entre los ocho mejores del mundo y se asegura con ello su plaza en el Preolímpico de París 2024.
Los Hispanos están en cuartos de final, pero la Main Round no ha acabado. El domingo hay en juego el primer puesto del grupo y el lado del cuadro de aquí a la final del Mundial. El rival será uno de los grandes candidatos a colgarse el oro en la final del próximo día 29 de enero: la seis veces campeona mundial Francia. Una victoria nos llevaría presumiblemente a escapar de la temible Dinamarca en unas presuntas semifinales, pero eso ya es balonmano ficción.