Kyle Lowry, el hijo pródigo, volvió a Toronto
El mejor jugador de la historia de los Raptors, regresó al Scotiabank Arena vestido con una camiseta diferente, la de Miami.

Se vivía en Toronto una situación algo extraña. El mejor jugador de la historia de la franquicia volvía a casa defendiendo la camiseta de otra franquicia. Kyle Lowry, la mayor leyenda de la historia de los Raptors visitaba el Scotiabank Arena con los Heat, su segunda visita desde firmar por Miami. La primera fue la del homenaje, la de la ovación, el cariño y toda la atención: esta vez llegaban dos equipos a medio partido de diferencia.
Siempre es especial su vuelta por todo lo que representa. Lowry fue el primer jugador de nivel All Star que, junto a DeMar DeRozan, prefirió quedarse en Canadá a volver a Estados Unidos. Kyle tiene una relación de amor y odio con la prensa de Toronto: respeto y al mismo tiempo no querer hablar, aunque siempre lo hiciera, y hoy no ha sido excepción. Y todavía quedan algunos de sus excompañeros, a los que ayudó a formar, Siakam, Anunoby y sobre todo un Fred VanVleet que se convirtió en el heredero.
Con Lowry es especial
Toronto tiene una historial largo con el abandono de sus mejores jugadores. Vince Carter se fue dejando el trono vacío y corazones rotos (tardaron algo más de una década en perdonarle). Chris Bosh cambió el invierno de Canadá por Miami y LeBron James y hasta Kawhi Leonard, campeón y MVP con los Raptors, hizo las maletas tras el anillo rumbo a Los Angeles Clippers. Pero con Kyle Lowry es diferente porque Lowry es, para toda Canadá, el mejor jugador que ha tenido la franquicia.
Es líder histórico de la franquicia en asistencias, robos, triples, anotados y lanzados, el que más triples-dobles ha conseguido o balones ha perdido. Y en lo que no es primero, está cerca. Es segundo en puntos, partidos, minutos, tiros lanzados; tercero en tiros libres, rebotes y rebotes defensivos, y hasta se cuela en el top 10 en rebotes ofensivos, donde promedia 0.8 por partido.
En estadística avanzada, nadie ha generado tantas victorias (75.5) como Lowry, en ataque (50.5) como en defensa (24). Es, con seis nominaciones, el jugadores que más veces fue All Star representando a Toronto (Bosh y Carter tienen cinco) y hasta fue nombrado All NBA en el tercer equipo, en 2016. Es una mezcla entre longevidad, premios individuales, rendimiento de los Raptors y, por supuesto, el anillo de 2019. Solo le falta un homenaje y será cuando se retire.
El mentor de Fred VanVleet
No fue hasta el año después del anillo, tras la marcha de Kawhi y de Danny Green, dos de los titulares, que Kyle y Fred VanVleet compartieron titularidad. Era la primera vez que los dos bajitos dirigían al equipo, aunque Lowry seguía siendo el mejor jugador. Llegó la pandemia, el equipo se mudó a Tampa y la situación cambió por completo. Los Raptors iban a entrar un periodo de reconstrucción, que a la postre duró un año, y Lowry la agencia libre. Las intenciones de equipo y jugador eran opuestas y se decidió lo mejor para todos, incluyendo VanVleet.
En agosto de 2021, Lowry fue traspasado a Miami a cambio de Precious Achiuwa y Goran Dragic. El equipo, que había sido de Lowry cada año desde 2014 con la excepción de Kawhi Leonard, pasaba a nuevas manos. Fred VanVleet y Siakam se convertían en las referencias de los nuevos Raptors, un equipo que hoy está por encima de Miami en la clasificación. "Es divertido jugar contra Lowry, no hay nada que pueda hacer para frustrarme", explicaba VanVleet tras el triunfo sobre los Heat. "Pensaba que estaba viejo hace tres años, pero sigue compitiendo".
La relación entre mentor y alumno va más allá de la pista: hablan cada día, Lowry sigue viendo todos los partidos de los Raptors y VanVleet, cuando puede, los de Miami (aunque haya dejado claro que solo lo hace por Lowry, que no le gustan los Heat). "Hablamos de todo, de la vida, de la familia, de baloncesto. De lo mismo que hablarías tú con tu mejor amigo. De todo". Y también sobre cómo ha sido parte en el proceso tras su salida: "Me ha ayudado a ser el líder, durante esta transición. Desde hace años siempre he confiado en él, le he pedido consejo".
Y ese es, también, parte de lo que hizo Kyle Lowry por Toronto. No solo se dejó la piel cada noche, no solo fue estadísticamente el mejor jugador que se ha puesto la camiseta de los Raptors y trajo el primer anillo de la historia de la franquicia. También fue parte del proceso de crecimiento de los nuevos Raptors, especialmente de Fred VanVleet. Y su vuelta a casa siempre es especial, sobre todo la noche que le retiren el siete al techo del pabellón.