NBA

Las estrellas NBA estallan por la permisividad a los insultos desde la grada: "No hay consecuencias"

Draymond Green, jugador de los Warriors, fue el último en tener un choque contra un fan que terminó expulsado del pabellón.

Draymond Green protesta una jugada durante el Bucks-Warriors./AFP
Draymond Green protesta una jugada durante el Bucks-Warriors. AFP
Guillermo García

Guillermo García

Pagar por una entrada no da derecho a todo en un recinto deportivo. Y es algo sobre lo que la NBA está intentando actuar viendo los incidentes que se suceden en las últimas temporadas, en los que los jugadores se han visto implicados en refriegas por los insultos que reciben desde la grada y en redes sociales, donde algunos como Westbrook ha recibido incluso amenazas de muerte. 

El último episodio en esta guerra entre estrellas e hinchas lo ha vivido Draymond Green en su visita al Fiserv Forum de Milwaukee. A falta de cinco minutos para el final del tercer cuarto Draymond Green llamó la atención de los árbitros del partido que enfrentaba a los Bucks y a los Warriors. El ala-pívot señaló a la grada y apuntó a un aficionado que incluso llegó a amenazarle.

"¿Qué es ese pase? ¿Cuál es el pase? Me encantaría saber qué es ese pase. No eres una mierda... Eso pensé. Explícate si quieres que te escuchen", le gritó Green al aficionado, que terminó siendo expulsado del pabellón. "Estuve así de cerca de volverme y lanzarme, pero simplemente volví y se lo dije al árbitro".

"No hay consecuencias reales. Sí, quizás no puedes volver al partido, o incluso si te arrestan no pasa nada... solo espero que llegue el punto en que las ligas puedan trabajar con los abogados para implementar leyes, porque es la única cosa que puede corregir este problema", explicó el jugador de los Warriors, que pide más mano dura a la NBA respecto a una actitud cada vez más generalizada en las gradas.

Una actitud que contrasta con la imagen que trasladaban los fans de la mejor liga del mundo hasta hace 20 años. Tradicionalmente el público que asistía a los partidos de la NBA solía responder a un perfil tranquilo, aficionados que se lo tomaban como un espectáculo e iban a las canchas a disfrutar de un pasatiempo.

Todo cambió a comienzos de siglo y alcanzó su punto álgido con la famosa pelea del Palace, en la que Ron Artest y Stephen Jackson terminaron subiendo a la grada para golpear a un aficionado de los Pistons que le había lanzado un vaso. Fue el peor momento para una NBA que siempre había vendido imagen de ejemplaridad. La mano dura empleada con los fans y con los jugadores parecía templar los ánimos de unos y otros.

Sin embargo, desde hace tres temporadas el ambiente ha vuelto a caldearse con actitudes de algunas aficiones contra algunos jugadores que rayan lo ilegal, profiriendo graves insultos contra ellos, lanzándoles objetos o provocándoles descaradamente, encarándose a veces con ellos directamente con ellos desde las primeras filas de asientos. Una actitud a la que ni siquiera los dólares dan permiso.