REAL MADRID 127 - DALLAS MAVERICKS 123

Los 29 euros por cada minuto de Doncic que indignaron al madridismo: "Es una putada"

El precio medio de la entrada fue de 144 euros y el esloveno no jugó más de 5 minutos.

Luka Doncic ante Tavares en el partido del WiZink./Efe
Luka Doncic ante Tavares en el partido del WiZink. Efe
Guillermo García

Guillermo García

La noticia caía a plomo en los alrededores del WiZink apenas unos minutos antes de comenzar el partido entre el Real Madrid y los Dallas Mavericks. O lo que es lo mismo, la vuelta de Luka Doncic al WiZink tras cinco años de ausencia. La franquicia tejana anunciaba que el jugador esloveno arrastraba problemas en el gemelo izquierdo y apenas iba a disputar 5 minutos.

El recibimiento del WiZink a Doncic.Relevo | N. Gómez

Dicho y hecho. Doncic saltó a la cancha antes de comenzar el choque y se llevó el cariño de una grada que no olvida lo que hizo vistiendo la camiseta blanca. Agradeció las palabras y se quitó el chándal para formar parte del quinteto inicial del equipo de Dallas. A los 4:59 Jason Kidd cumplió con el guion y retiró a Doncic del parqué para no volver a sacarlo más. En ese tiempo Doncic anotó 9 puntos (tres triples de cinco intentos) y dio una asistencia. Y hasta ahí podíamos leer.

No era lo que los aficionados esperaban de un partido marcado en rojo en sus calendarios. No obstante, los precios que habían pagado por las entradas eran de todo menos populares. La entrada más barata eran 48 euros para los socios en lo más alto del coliseo madridista hasta los 240 euros que pagaron por los asientos más caros en las primeras filas del Palacio. Por no hablar de los 350 por un pase VIP.

Es decir, que la entrada media para ver el regreso de Luka Doncic a Madrid, sin contar con los palcos VIP, costaba 144 euros. O lo que es lo mismo, un precio de más de 28 euros por cada minuto de la estrella eslovena en cancha. Una cuota que indignó a buena parte del madridismo que esperaba con ansia poder ver al esloveno.

"Es una putada" comentaba Ángel, un aficionado madridista vestido con el uniforme de los Mavs para la ocasión. "Sobre todo porque ha sido a última hora. No me parece bien porque el Madrid está utilizando su rotación habitual y tienen partido de Euroliga el jueves y los Mavericks están jugando con los suplentes. Está un poco sobrepagado esto. Pero bueno".

"No me parece bien porque el Madrid está utilizando su rotación habitual y tienen partido de Euroliga el jueves y los Mavericks están jugando con los suplentes"

Aficionado del Real Madrid

La opinión de Ángel era generalizada en las gradas del recinto madridista. También había quien se resignaba y prefería quedarse con la parte positiva, como fue el caso de Jorge y Diego, aunque lo hacían con la boca pequeña. "Es cierto que no mola, pero qué le vamos a hacer. Nosotros venimos a disfrutar del baloncesto y el hecho de que venga un equipo de fuera aquí para jugar es motivo más que suficiente para disfrutar".

El baloncesto era el que mandaba en las gradas del WiZink. La ausencia de Doncic no empañaba la fiesta, aunque sí la nublaba un poco. "Es cierto que es lo que la mayoría veníamos a ver", respondía Enrique que había pagado 320 euros por su entrada y la de su acompañante. "Pero bueno, no podemos hacer nada, así que ahora lo que toca es disfrutar de lo que hay".

Ni siquiera los gritos de la afición durante el final del tercer parcial y todo el último cuarto sirvió para 'apiadar' a los Mavs. Luka se dedicaba a saludar desde el banquillo, pero no volvió a pisar una cancha que le llevaba esperando mucho tiempo.

El problema no fue sólo que Luka Doncic apenas durara 5 minutos en la cancha. Kyrie Irving, la otra estrella del equipo, ni siquiera se vistió de corto por unos problemas en la ingle que también le 'borraron' de la cita ante el Madrid. Eso sí, su ausencia no evitó que hiciera las delicias del público al que se paró a firmar y atender en todo momento.

Apasionado del baloncesto desde niño, Guillermo García ha conseguido hacer del deporte de la canasta su profesión. Licenciado en Humanidades por la Universidad Carlos III y con un Master en