LIGA ENDESA

Valencia Basket y Unicaja ratifican su gran momento y serán cabezas de serie en la Copa del Rey

El conjunto taronja se impuso al Covirán Granada y los malagueños al Bilbao Basket.

El base estadounidense del Valencia Basket Chris Jones durante el partido ante el Covirán Granada. /EFE
El base estadounidense del Valencia Basket Chris Jones durante el partido ante el Covirán Granada. EFE
Agencia EFE

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El Valencia Basket selló este sábado su condición de cabeza de serie en la Copa de Rey con un nuevo festival anotador que dejó sin opción al Covirán Granada y que le mantiene en lo más alto de la clasificación de la Liga Endesa y que supuso la sexta derrota seguida de su rival (120-94).

El equipo de Pedro Martínez, una máquina ofensiva bien engrasada, se quedó a apenas dos puntos de su récord histórico de anotación, pero con sus 34 asistencias estableció su mejor marca en la ACB en este apartado.

Arrancó valiente el Granada, dispuesto a jugar de tú a tú a los locales dirigidos por el sabio Rouselle. Lo logró cuatro minutos, pero acabó por caerse en el brillante intercambio de canastas que firmaron ambos. El desparpajo de Sergio De Larrea y la velocidad de Jaime Pradilla tuvieron mucho que ver (23-13, m.6).

Empezó el Valencia a encadenar rebotes, contragolpes desatados por Chris Jones y triples de Jean Montero y a los visitantes se les empezó a hacer bola el partido antes de que acabara el primer cuarto (33-14, m.9).

Los visitantes, viendo que el partido se les escapaba, se jugaron la carta de las defensas alternativas y lograron detener el torrente del Valencia unos minutos. El ímpetu de Sergi García y de Jacob Wiley le ayudó, pero la puntería de tres de su rival (anotó once de sus primeros quince triples) hizo un su mejoría no tuviera premio en el marcador.

Al descanso, el Valencia firmó la mejor anotación de su historia en los dos primeros cuartos, 67 puntos frente a los 64 que en enero 2001 anotó contra Cantabria Lobos (67-42, m. 20).

Volvió mejor a la pista el Granada, que juntó a Rouselle y a Sergi García y apostó por una estructura con cinco abiertos en ataque. Pero otra vez no fue suficiente. En este caso fueron un par de triples de Brancou Badio los que le amargaron y espabilaron a los locales, que habían perdido a Nate Sestina por una lesión en el brazo.

Con el Valencia de nuevo en marcha, recuperado el control del rebote, fueron Jean Montero y Matt Costello los encargados de alimentar su marcador. Los puntos de Scott Bamforth y Valtonen, que otro día podrían haberle valido a su equipo, brillaron poco en la Fonteta.

Unicaja, tampoco falla

El Unicaja mantuvo el coliderato de la Liga Endesa y confirmó también su condición de cabeza de serie en la Copa del Rey tras imponerse al Surne Bilbao Basket en Miribilla (81-86) en un partido que apuntaba a correctivo al final del tercer cuarto, pero en el que el conjunto malagueño sufrió un susto en los últimos diez minutos que amenazó con arrebatarle la victoria.

Fue cuando a 1.35 del final Marvin Jones puso el 78-79 en un marcador que había llegado a reflejar un 50-70 a poco del final del tercer periodo tras un claro dominio del juego del equipo andaluz.

Fue precisamente Jones (16 puntos, 13 rebotes, 5 ofensivos y 22 de valoración) el gran impulsor de una remontada local en la que colaboraron también Thijs de Ridder (12 y 5 rebotes) y un Xavi Rabaseda que no dejó de atosigar a los hoy de blanco, pero que también protagonizó una pérdida decisiva.

Aunque, con el encuentro en el alambre, la canasta decisiva, un tremendo triple lateral, fue de Kendrick Perry (12, 5 asistencias y 18 de valoración). El base estadounidense fue el jugador más destacado de su equipo, ayudado por Kameron Taylor (12) dentro de una labor muy coral de los de Ibon Navarro que le mantiene el pulso en la tabla al líder Valencia, con el que está empatado a 13 victorias en 16 partidos y se jugará el liderato la próxima jornada.

Con seis triunfos se quedan los de Jaume Ponsarnau, aún en mitad de la tabla tras dos derrotas consecutivas. Una canasta en la que Balcerowski sorprendió a la defensa local abrió un choque abierto, fluido, con los dos equipos acertados y sin faltas en unos igualados primeros cinco minutos (13-13).

Le costó al Surne seguir el ritmo anotador malagueño, Kalinoski y Perry amenazaron con la escapada visitante en el marcador (13-18, 19-25) que pareció confirmarse con un triple de Sima que puso 8 puntos por delante a los suyos (20-28) antes de que Rabaseda, con un triple desesperado sobre la bocina, acortase a cinco la desventaja bilbaína al final del primer cuarto.

Pero las sensaciones del final de los diez primeros minutos se confirmaron en la reanudación. Al conjunto vasco le costaba horrores anotar y entre Kravish y Taylor aumentaron a 12 una diferencia que a los malagueños les aportó un 5 de 7 en triples para el minuto 15 (25-37).

Aún aumentó a 16 puntos la ventaja el Unicaja a 2.30 del descanso (28-44), pero el Surne consiguió irse a vestuarios con la sensación de tener aún vida para la segunda parte (37-47) a base de pelea y tiros a pesar de no estar tampoco muy acertado en esos lanzamientos a 4,60 metros del aro (18/25).

Fue un espejismo para los de negro, ya que los de Navarro enlazaron un 0-7 nada más volver de vestuarios que parecía dejar el choque visto para sentencia (37-54) casi con la mitad del encuentro por disputarse.

No decayó el Bilbao Basket, pero tampoco el Unicaja dejaba de ir a lo suyo hasta ponerse 20 puntos arriba a poco del final de un tercer cuarto que cerró un contraataque de canasta a canasta de De Ridder (53-70).

Y cuando parecía todo decidido, los 'hombres de negro' entraron en combustión, encadenaron un 10-0 y, impulsados por la grada, se acercaron a 6 puntos (68-74) con cinco minutos todavía por jugarse.

No se quedaron ahí, ya que mantuvieron el impulso, sobre todo Jones, De Ridder y Rabaseda, y se pusieron a solo un punto a 1.35 del final (78-79) en medio del desconcierto visitante, con una versión muy diferente a la ofrecida en los minutos anteriores.

Ibon Navarro se vio obligado a para de nuevo el choque y entre Osetkowski, una pérdida de Rabaseda y un tremendo triple de Perry, devolvieron una buena ventaja al Unicaja (78-84) que ya no pudo enjugar un Surne Bilbao encomiable en el esfuerzo pero que no pudo culminar la remontada.