RÍO BREOGÁN 74 - COVIRÁN GRANADA 92

Scott Bamforth destroza al Río Breogán en un duelo clave para el Covirán Granada

Los de Pablo Pin se llevan de Lugo una victoria clave ante un rival directo.

Scott Bamforth con la bola ante el Río Breogán. /ACB PHOTO/CARLOS CASTRO
Scott Bamforth con la bola ante el Río Breogán. ACB PHOTO/CARLOS CASTRO
Agencia EFE

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El escolta estadounidense del Covirán Granada Scott Bamforth, con 24 puntos y 22 créditos de valoración, no tuvo piedad de su exequipo, un Río Breogán que se derrumbó en el último cuarto, propiciando que el conjunto nazarí cogiera una renta de mucho valor (74-92) para el basket-average particular en la Liga Endesa.

El Granada se sobrepuso a su mal inicio. El Breogán entró mejor al partido (10-5, min.5), pero su rival no tardó en ajustar su defensa, sobre todo en el juego interior. A eso se unió que Bamforth y Valtonen se entonaron y Jacob Wiley empezó a mandar bajo el aro.

Las rotaciones reanimaron al equipo andaluz, que supo explotar su rebote ofensivo para castigar al Breogán en las segundas opciones (16-23). Cinco puntos seguidos de Toni Nakic acercaron al conjunto lucense. Pablo Pin paró el partido porque su equipo empezó a sufrir en ataque cuando su rival subió su nivel de agresividad defensiva (30-35, min.26).

Un triple del finlandés Valtonen, tras otro rebote ofensivo de Rubén Guerrero, oxigenó al Granada, que supo explotar las pérdidas breoganistas para alcanzar el descanso con una cómoda renta de ocho puntos (40-48).

El Breogán tuvo un amago de reacción en el tercer asalto. Supo explotar la conexión entre Apic y Atic -once puntos entre ambos- y el acierto del estadounidense Darrun Hilliard para situarse a cinco puntos (58-63), pero Noua y, especialmente, el veterano Jonathan Rousselle sostuvieron al Granada antes de que el exbreoganista Scott Bamforth calentara su muñeca.

El inicio del último cuarto del equipo de Mrsic tampoco fue bueno. Encajó un parcial 0-5 de salida que le generó muchas dudas, además de distanciar nuevamente a su rival. Y cuando pareció enchufarse, una falta técnica a Hilliard le hizo daño por el posterior triple del base francés Rousselle (67-80, min.35).

El estadounidense enmendó su error con tres puntos seguidos, que pudieron ser seis si el aro no hubiese escupido su lanzamiento desde la línea de tres puntos, para dar vida al Breogán, muy acertado en los tiros libres (72-80).

Pero, incomprensiblemente, y para enfado de su afición, el equipo celeste se apagó en ataque. Con un parcial 0-10, el Granada se aseguró el triunfo y, probablemente, el basket-average particular.