LIGA ENDESA

El Mundial de Catar deja sin poder entrenar a un equipo de la ACB

El Covirán Granada, una de las sensaciones esta temporada en Liga Endesa, se ve obligado a buscar un pabellón en otro municipio por los distintos compromisos del Palacio de los Deportes.

Los jugadores del Covirán Granada Jacobo Díaz y Lluís Costa, durante un partido esta temporada en el Palacio de los Deportes de Granada. /RAMÓN L. PÉREZ
Los jugadores del Covirán Granada Jacobo Díaz y Lluís Costa, durante un partido esta temporada en el Palacio de los Deportes de Granada. RAMÓN L. PÉREZ
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Tener un equipo de baloncesto en la élite no es fácil. El ascenso a nivel deportivo, el papeleo, los requisitos, formar una plantilla competitiva… Son muchos los requerimientos que se necesitan para ello. Sin embargo, todo ello se logró, con creces, este año en Granada. Tras once años fuera de la mejor liga de Europa, la capital granadina volvió a ser ACB esta temporada 2022-23. O bueno, lo volvió a ser el baloncesto gracias al Covirán Granada, porque lo cierto es que la ciudad demuestra sus carencias para asumir un equipo del máximo nivel. El equipo dirigido por Pablo Pin ha tenido que hacer las maletas y buscarse un pabellón en otro municipio para poder entrenar. ¿El motivo? Conciertos, eventos… Y las pantallas gigantes para ver el Mundial de Catar. Esta es la historia de un exilio ante la falta de infraestructuras en Granada.

La casa 'multiusos' más allá del baloncesto

Años atrás, el Covirán Granada había compaginado sus entrenamientos entre el Palacio de los Deportes y el pabellón Veleta. Sin embargo, esta segunda infraestructura municipal no cuenta con nivel suficiente para un equipo de élite. Goteras, mala climatización y diversos factores que afectan al buen estado del parqué. Y, claro, ¿todo eso qué conlleva? Un aumento de riesgo de lesiones y, en definitiva, malas condiciones que no están a la altura de un equipo ACB.

Con el Veleta descartado, salvo un uso muy puntual, el Covirán Granada se quedaba solo con el Palacio de los Deportes. Y aquí empezaba el problema. Este espacio se emplea para acoger otros eventos deportivos así como conciertos o espectáculos de diversa índole, lo que obliga al equipo, cuyo club no tiene instalaciones propias, a precisar de una inexistente segunda instalación deportiva para entrenar.

Luke Maye, este verano en el Veleta, donde se ve el parqué en mal estado.  FUNDACIÓN CB GRANADA
Luke Maye, este verano en el Veleta, donde se ve el parqué en mal estado. FUNDACIÓN CB GRANADA

Primer destierro: rumbo a Málaga

El lunes 31 de octubre, el Covirán Granada comenzó a preparar el partido del domingo 6 de noviembre ante Unicaja. Pero no lo hizo en el Palacio de los Deportes. Un concierto y la preparación de la instalación para acoger el Campeonato del Mundo de tenis de mesa para personas con discapacidad, que se celebraba en este recinto entre el 7 y el 13 de noviembre, obligó a los de Pablo Pin a tener que buscar una alternativa.

Varias llamadas a la Universidad -tiene dos pabellones en condiciones aptas- no llegaron a buen puerto: las horas ya están reservadas para las actividades universitarias y no puede cambiarse con tan poca antelación. Comunicaciones con el Ayuntamiento que tampoco sirven de mucho: la ciudad carece de más instalaciones de nivel y de dónde no hay, no se puede sacar. ¿La conclusión? Un destierro a la provincia vecina de Málaga.

Los jugadores y el cuerpo técnico tuvieron que hacer las maletas. Miniconcentración de tres días en la localidad malagueña de Torremolinos, en The Embassy, el proyecto liderado por los exjugadores Berni Rodríguez y José Manuel Calderón, que está perfectamente equipado: dos pistas oficiales con canastas Spalding, parqué de primer nivel, material de entrenamiento, gimnasio, zona de transferencias, piscinas, marcadores y pantalla gigante. Eso sí, esto, en teoría, era solo un destierro puntual. Pero no ha sido así.

Más eventos... y el Mundial de Catar

Con el club haciendo malabares a tenor de las circunstancias, con un calendario con eventos y conciertos que no coinciden con el partido como local del Covirán Granada, pero sí con los entrenamientos, y en mitad del polémico destierro a otra provincia, el Ayuntamiento hace otro anuncio: pantallas gigantes para ver el Mundial de Catar. ¿Y esto en qué se traduce? En la ocupación del Palacio de los Deportes para ver los partidos de la Selección. Es decir, que si de nuevo coincide con entrenamientos del conjunto rojinegro, una de dos: o el club los cambia de hora o hay que buscar otra instalación para la preparación. Y no, en la capital granadina no la hay.

De hecho, hace unos días el CD Raca, conjunto femenino que militaba en Liga Femenina 2, anunció que se despedía de la competición con esta ya iniciada. ¿Los motivos? Además del económico, por la falta de instalaciones en Granada para poder disputar sus partidos. Y es que el club, que jugaba en el Paquillo Fernández, ya había sido apercibido por la Federación de Baloncesto por no disputar sus partidos en un enclave con el equipamiento necesario requerido.

Otra vez a Málaga y el exilio definitivo a otro municipio

Tras el parón por las Ventana FIBA, el club se puso manos a la obra: tenía una semana para encontrar una solución. Y esta pasa, otra vez, por otra excursión a Málaga para finalmente acabar instalándose en un municipio del Área Metropolitana de Granada. Vamos a explicarlo.

El club tenía que encontrar una instalación que estuviese cerca de la capital y que reuniese las condiciones -de lo que carece el pabellón Veleta anteriormente mencionado- para acoger los entrenamientos del equipo. Y había uno que cumplía: Albolote. Sin embargo, había un problema: las canastas.

Este mítico pabellón, que en su día fue la casa del extinto Oximesa Puleva de baloncesto, ha lijado y remodelado su parqué, pero no tiene las canastas aptas para los entrenamientos de un equipo de élite. Finalmente, el club ha logrado conseguir unas en la provincia de Almería. Eso sí, mientras llegan los de Pin han tenido que volver a hacer las maletas, otra vez, rumbo a la Costa del Sol.

Esta vez ha sido hasta Los Guindos, gracias a la caridad de Unicaja Málaga, que ha cedido la instalación al conjunto granadino y que, de paso, disputó este martes un amistoso contra el Covirán a modo de preparación. El fin de semana vuelve la Liga Endesa y hay que mantener engrasada la maquinaria. Y después de esto, ¿qué? Pues rumbo a Albolote. Esa será la sede del Covirán Granada, ya con las canastas almerienses, para preparar su partido de este domingo ante Breogán… Y los que vienen por detrás en un mes de diciembre lleno de música y fútbol, pero de poco baloncesto, visto lo visto, en el Palacio de los Deportes.