EUROLIGA | BARÇA 87 - PARIS BASKETBALL 103

El secreto del asalto al Palau del Paris Basketball nace en Tiago Splitter, un base 'bajito' y la idea futurista del "baloncesto moderno"

Con la victoria ante el Barça, el equipo parisino se sitúa entre los cuatro primeros de la Euroliga y ya es la gran revelación del año.

TJ Shorts, con el dorsal '0', a la derecha, durante un tiempo muerto de Tiago Splitter esta temporada. /GETTY IMAGES/LUCA SGAMELLOTTI
TJ Shorts, con el dorsal '0', a la derecha, durante un tiempo muerto de Tiago Splitter esta temporada. GETTY IMAGES/LUCA SGAMELLOTTI
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Baloncesto rápido, atrevido, vistoso y muy espectacular. Eso es lo que ha traído esta temporada, la primera de su historia, el Paris Basketball a la Euroliga. Un tipo de juego diferente a lo visto hasta la fecha, que logró imponerse al que planteó el Barça de Joan Peñarroya, hasta ahora líder de la competición continental, en el Palau para confirmar que lo del equipo de Tiago Splitter no es casualidad, sino que se trata de una realidad que, aunque va "partido a partido" y sin mirar más allá, ya es toda una revelación en la máxima competición de Viejo Continente.

"Al final hemos jugado más al ritmo del Paris que al nuestro... y evidentemente, el que controla el ritmo es el que acostumbra a llevarse la victoria", aseguraba el técnico catalán tras la derrota de este viernes en un partido en el que, aunque lograron reengancharse..., no pudieron con los parisinos, sobre todo con TJ Shorts: 24 puntos, nueve asistencias, un rebote y 36 de valoración, casi nada para un recién llegado que apenas mide 1,75 m.

"A día de hoy está dominando, es el jugador que más impacta en la competición. Está mostrando su talento, un juego diferente, está claro que nos ha generado problemas tanto en anotación como en la creación. Nos han hecho daño en el último cuarto, sobre todo. Es un equipo que juega con ritmo importante, generan mucho desequilibrio en el 1x1", explicaba Peñarroya. Y es que Paris Basketball ha logrado irrumpir en la Euroliga imponiendo su juego al de los demás, un estilo que hace que ya acumule siete victorias en diez partidos.

¿Y cuál es el secreto? Pues tiene dos actores clave. Por un lado, la visión de un entrenador "novato", Tiago Splitter, que en su gran estreno como técnico está consiguiendo dar que hablar en todo el continente; y por otro, ese loco bajito que tiene como director de juego, TJ Shorts, y que, aunque es un recién llegado a la competición, se empieza a erigir como una de las estrellas esta temporada en la Euroliga. Como ya hiciera hace un año en su debut en Eurocup, la cual ganó, y el anterior en la BCL... que también ganó. Pero, además, también influye la gran relación que existe entra ambos, una conexión que ha llegado de forma casi inmediata y que, según Splitter, nace gracias a su bagaje como exjugador de baloncesto.

Durante un momento del partido en el Palau, Shorts se fue a hablar con su técnico para explicarle cómo estaba viendo él ciertas situaciones. Sin embargo, esta estampa no es nueva. "TJ es un base que ve el juego, un líder y la verdad es que en mi carrera como pívot, tenía mucha relación con los bases. Jugué con Huertas, Prigioni, Ginóbili, Tony Parker… Esa gente entiende muy bien el juego y creo que es muy importante tener ese link entre el pívot y el base. Y creo que tengo eso con TJ. Me escucha, es un líder, tiene gol, pase y es un competidor nato. Siempre estamos hablando durante el partido, no es la primera vez y vamos a seguir haciéndolo", explicaba Splitter. Y esto se debe a su forma de leer y entender el baloncesto.

El técnico ha logrado poner su sello en un estilo de juego que, en algunos aspectos, ya le venía heredado del entrenador anterior Tuomas Iisalo, ahora entrenador ayudante en los Memphis Grizzlies. Una forma de hacer baloncesto que poco a nada tiene que ver con la que se juega en Europa y que, tal y como se vio en el Palau, basa su juego en posesiones rápidas, mucho físico, jugadas exteriores y rotaciones. Muchas rotaciones. Todo con el fin de que los jugadores siempre puedan estar frescos para correr la cancha.

"La temporada es muy dura. A veces de domingo a domingo tenemos cuatro partidos y los cambios son para mantener la intensidad. Los minutos van a ser los mismos, pero sí que así [con los cambios] van a tener intensidades más cortas donde pueden presionar al otro campo, correr, llegar tirando… esa es un poco la idea", explicaba Splitter.

La realidad es que el baloncesto que plantea el Paris Basketball es lo más parecido al baloncesto que se juega en la NBA. Y esto es algo que el propio técnico reconoce y que entiende que será el baloncesto del futuro. "Es un poco, a mi modo de ver, cómo se va a jugar el baloncesto moderno. Ya se juega así en algunos lados: en la NBA es uno de ellos. Europa es más reacia al cambio, eso es verdad, mucha gente dice que no va a funcionar y a veces no y a veces sí. Pero tengo jugadores que este tipo de juego le viene bien. Si nosotros jugásemos despacito, pasando el balón, nos iba a costar más. Es nuestra manera de jugar", dijo.

La verdad es que esa manera de jugar les está dando bastantes éxitos. En Euroliga han logrado asaltar el Palau, ganar al vigente campeón, el Panathinaikos, al AS Mónaco, Zalgiris o Baskonia, entre otros. Un balance de 7-3, pero peleando absolutamente todos los duelos, algo que hace a muchos preguntarse si las aspiraciones del equipo, visto lo visto, son ahora mayores que cuando empezaron como rookies que son la temporada. Y, para eso, Splitter lo tiene claro: "No nos pusimos ninguna meta".

"Desde el principio le dije a los chicos que íbamos a jugar partido a partido, que iba a ser una guerra cada vez. Puede pasar lo que sea, pero ellos van a pelear partido a partido, posesión a posesión, eso es lo único. Porque si pensáramos más allá estaríamos cortando nuestra mentalidad", explica el técnico. Y lo que está claro es que, aunque, como reconoció, no quiera "echarse flores" porque es "un novato" y trabaja "humildemente", de momento la propuesta que está llevando a cabo le está funcionando a la perfección.