La paciencia de Chus Mateo no basta y pone al Real Madrid en un brete
El equipo blanco mantiene los mismos errores y se queda fuera de los puestos de playoffs tras la derrota ante el Anadolu Efes con un balance de 4-6.
Se acabó el salvavidas. Ese que daban los partidos en casa, el hasta ahora fortín para el Real Madrid, en una temporada llena de altibajos, imprecisiones y, ahora también, golpes de realidad. Porque lo que ocurrió ante el Anadolu Efes este jueves (64-74) es el claro ejemplo de que sí, la Euroliga "tiene una dureza difícilmente comparable a otras competiciones en el mundo", pero el equipo blanco sigue teniendo prácticamente los mismos males que con los que empezó la temporada. Esos que salían a relucir sobre todo lejos de Madrid, pero que ayer se hicieron presentes desde el principio en el WiZink Center y que ya empiezan a diluir la "paciencia" que pedía a principios de semana -y que se ha convertido en un habitual- Chus Mateo. El Real Madrid dormirá hasta la semana que viene fuera de los playoffs de la Euroliga, con un balance de cuatro derrotas en los últimos cinco partidos en la competición continental, en la que ya acumula seis tropiezos.
"El resumen del partido es claro. Hemos empezado con la mentalidad errónea, yendo a lo más fácil, que era jugar en el perímetro de nuestro ataque. Hemos respetado poco a un rival que venía haciéndolo muy bien fuera de casa. Conceder demasiadas licencias en la primera parte ha sido la clave. Hemos perdido diez balones, hemos tomado más tiros de fuera que buscar a los interiores en la pintura", dijo el técnico blanco. Y es que el Real Madrid se fue a vestuarios con un paupérrimo 1/17 en triples, perdiendo de 22 puntos e incluso llegó a perder de 27. ¿El problema? Que este mal es algo que ya se ha visto -con asiduidad- desde que arrancó la competición.
Al igual que también el hecho de que el juego colectivo no fluya, esto provoque pérdidas, ni se comparta bien el balón. De ahí que la bola no llegase a la pintura. Y si está claro que una de las principales armas del equipo es Edy Tavares y no le llega la bola… Y basta con ver sus números: 2/4 en tiros de dos, 0/0 en triples… y un 0/0 en tiros libres que demuestra que si el pívot no recibe la bola, como es lógico, tampoco puede buscar la falta que le haga ir a la línea del tiro libre.
📽 RESUMEN@RMBaloncesto 64 - 74 @AnadoluEfesSK#EuroLeague pic.twitter.com/8WL42eIY2g
— Real Madrid Basket (@RMBaloncesto) November 14, 2024
De hecho, ese contundente "no hemos jugado una mierda" que dijo Facu Campazzoal descanso es una evidencia de que, otra vez, en la plantilla del Real Madrid volvieron a tratar de hacer cada uno la guerra por su cuenta… y sí, eso han comprobado que es otro error. "Eso ha sido clave para que al final no pudiéramos llegar cuando hemos querido y cuando hemos demostrado el orgullo de querer defender y estar bien colocados. Hemos empezado tarde; era complicado después de estar veintitrés abajo volver al partido. Tenemos que afrontar todos los partidos respetando más. Ya nos ha pasado en dos o tres ocasiones dar demasiada ventaja al contrario y es algo que tenemos que saber que no puede pasar", dijo el técnico.
Pero lo cierto es que otra de las cosas que se volvió a ver fue la apuesta por 'los de siempre'. Basta con ver las rotaciones -o ausencias de estas que ya en su día criticó Mario Hezonja- que hubo en la segunda mitad, cuando llegó la reacción (insuficiente) del equipo.
En el tercer cuarto, sólo una: a falta de 0:58 para el final, Alberto Abalde (que hizo un buen trabajo defensivo tras el receso, sobre todo en el último cuarto, con Darius Thompson) entra por Sergio Llull. En el último cuarto, a falta de 7:05 minutos Abalde entra y sale Gaby Deck… y no vuelve a haber más rotaciones hasta los últimos tres minutos: a falta de 3:02 Deck entra por Abalde; a falta de 2:49 Abalde entra por Llull; a falta de 1:12 Llull entra por Abalde; a falta de 0:28 Ndiaye entra por Llull tras hacer la quinta falta; y a falta de cuatro segundos, Abalde vuelve a ingresar al parque tras la descalificación de Campazzo.
¿Resultado? Minutada de Campazzo (34:54 minutos); de Mario Hezonja (36:29 minutos) y de Edy Tavares (31:03 minutos), mientras que Deck, que acabó con 25:22, y Abalde, con 24:14, tampoco se quedaron atrás. Y todo esto son evidencias de que los mismos problemas de siempre… continúan. Y por más que Chus Mateo mantuviera el pasado lunes eso de que "estamos empezando la primera parte de la competición y debemos tener paciencia", el hecho de que en diez jornadas, el Real Madrid lleve sólo 4 victorias, mientras que las derrotas ascienden a 6, ya pesa en demasía.
La vuelta de Andrés Feliz se espera como agua de mayo en pleno noviembre, y tras lo visto este jueves, seguramente el domingo ante el Hiopos Lleida podría llegar de forma definitiva, pero la gran pregunta es: ¿es suficiente dadas las circunstancias? Porque Dzanan Musa seguirá siendo baja y con la lesión de Usman Garuba, como dijo el propio técnico hace una semana, "a ver qué pasa con él".