BALONCESTO

Musa regresa al punto de partida contra un Olympiacos que pudo ser su casa

El alero bosnio estuvo a punto de firmar con el club de El Pireo con 15 años y un año después debutaba contra ellos en Euroliga.

Dzanan Musa celebra una canasta reciente con el Real Madrid. /GETTY
Dzanan Musa celebra una canasta reciente con el Real Madrid. GETTY
Guillermo García

Guillermo García

Dzanan Musa hoy es una de las grandes figuras del baloncesto continental.Una estrella consolidada que ya apuntaba hasta donde podía llegar en 2014, con apenas 15 años, cuando el Olympiacos se cruzó por primera vez en su camino. Entonces, el hoy jugador del Real Madrid usaba el baloncesto para intentar dejar atrás el horror de la guerra de los Balcanes y consiguió que esa obsesión le diera esperanzas de futuro.

"Soy un niño de la guerra y aunque cuando yo nací ya había terminado, la sentí igual porque mi padre estaba en el ejército. Los balcánicos tenemos 'algo' que no se puede describir porque esa horrible guerra nos hizo más fuertes". Con estas palabras Musa describía su infancia en el documental 'Something in the water', en el que se trata la influencia de la guerra en el baloncesto de un territorio tan fértil en talento. Pero por encima de todos, destacaba un fino alero bosnio, que no tardó en llamar la atención de grandes nombres del baloncesto europeo como es el caso de Olympiacos.

El equipo que hoy recibe al Real Madrid (20:00 en DAZN) fue el primer equipo que llamó a la puerta de los Musa. En concreto fue Georgios Bartzokas, uno de los técnicos más reputados del Viejo Continente, quien se fijó en Musa, que había viajado al Pireo para una prueba con los rojiblancos. El entrenador heleno le acogió bajo sus alas y trabajó con él de forma individual, como recuerda hoy el madridista en BasketNews: "Fue muy especial para mí. Sólo tenía 15 años y me dijo que tenía mucho talento y que tenía que trabajar. Significó mucho para mí".

Bartzokas estaba convencido del potencial de Musa. Hasta el punto de querer firmarle su primer contrato profesional. Todo parecía encauzado para que el joven talento bosnio vistiera de rojiblanco con solo 15 años. Sin embargo una derrota de Olympiacos en playoffs ante Panathinaikos provocó el cese del técnico en el conjunto de El Pireo. Musa se quedaba sin su gran valedor.

La oferta griega (80.000 euros por siete temporadas además de piso y manutención según BasketNews) seguía encima de la mesa, pero aparecieron dos actores que cambiaron la escena, como recuerda el propio Musa. Por un lado, Misko Raznatovic, que se convertiría en el agente del jugador, y que le informó de que la oferta griega era como jugador del equipo junior y no con el primer equipo. El segundo actor fue el Cedevita, equipo que igualó la cantidad de Olympiacos y que sí le ofrecía plaza en el primer equipo.

Musa se decantó por el conjunto croata para comenzar su carrera profesional. Y entonces volvió a cruzarse con Olympiacos como punto de inflexión en su carrera. Fue el 25 de octubre de 2015. Los croatas viajaban a Creta (el equipo rojiblanco no podía jugar en Atenas por sanción) para enfrentarse a los helenos y lo hacían con Musa en la convocatoria por primera vez en su carrera.

El alero bosnio cumplía un sueño. Debutaba en Euroliga y lo hacía contra su gran ídolo, Vassilis Spanoulis. Para colmo, Musa anotó y se convertía en el jugador más joven en anotar una canasta en la historia de la máxima competición continental. Lo hacía con 16 años, cinco meses y siete días. Una marca que más tarde sería superada por Ricky Rubio (16 años y tres días) y Neoklis Avdalas (15 años, 10 meses y 16 días).

Pero eso llegaría más adelante. Durante un año la gloria fue para un Musa que en Grecia comenzó a escribir su propio camino hacia la gloria. El alero bosnio regresa esta tarde al punto de partida, al lugar que estuvo a punto de ser su hogar tras una oferta de 80.000 euros y del que se alejó por una derrota que cambió su destino.