A los fantasmas de siempre del Real Madrid se le suma el 'apagón' de Dzanan Musa
El escolta, que no termina de encontrar su juego tras la lesión, firmó en Lyon su peor partido de la temporada. El jugador se ha desactivado las redes en las últimas horas.
Si se busca a Dzanan Musa en las redes sociales... no aparece nada. Un vacío que hace sólo unas horas sí que llenaba tanto en X (lo que era Twitter) como en Instagram con las publicaciones del perfil del jugador bosnio del Real Madrid y que coincide con el bache que está viviendo también a nivel de juego. Porque desde que volvió de su lesión de tobillo no ha sido el mismo. Y el caso es que el equipo lo está notando y él también lo sabe. Y muestra de ello fue el partido en Lyon ante un ASVEL Villeurbane que se llevó el duelo en el último segundo -literalmente- y que volvió a dejar al Real Madrid sin saber lo que es llevarse un partido ajustado al final esta temporada (80-78).
Durante la cita en la cancha francesa, los fantasmas de siempre del equipo blanco volvieron a reaparecer. Las desconexiones defensivas -sobre todo cuando no está Edy Tavares-, la nula defensa del tiro exterior, el no saber cerrar partidos ajustados, la falta de acierto... Así se vio, de hecho, durante la primera parte y así lo reconoció el propio entrenador del Real Madrid, Chus Mateo. "Ha sido un partido muy ajustado que no hemos empezado bien en defensa, permitiendo muchas canastas en la primera parte", dijo el técnico, que sí que destacó cómo la mejoría en este aspecto tras el descanso les hizo volver al partido.
"En la segunda parte nuestra defensa ha sido mejor y eso nos ha permitido hacer más canastas. Hemos llegado con opciones de ganar al final, pero así es el baloncesto", se resignaba el técnico. Aunque lo cierto es que las sensaciones que dejó el equipo, en general, no fueron buenas. Sobre todo con ese batacazo de la segunda unidad al que, además, se unió el apagón de Dzanan Musa. Porque más allá del de sus redes sociales, su juego tampoco está encontrando la luz tras los siete partidos de parón que tuvo.
📽 RESUMEN@LDLCASVEL 80- 78 @RMBaloncesto#EuroLeague pic.twitter.com/Ti3gbIMZhC
— Real Madrid Basket (@RMBaloncesto) December 3, 2024
Cuando regresó de esa lesión del ligamento deltoideo del tobillo derecho ante el ALBA Berlín fue casi a contrarreloj. El bosnio aceleró su recuperación para así poder acudir también a la llamada de su selección en las pasadas Ventanas FIBA, pese a que, como él mismo llegó a reconocer, el club le había aconsejado que no lo hiciera. Y la realidad es que en ese primer partido -y en el de Bosnia-Herzegovina- parecía haber vuelto, algo que daba aire a Chus Mateo, pues recuperaba a una de sus piezas clave para el juego exterior. O eso parecía. Porque todo cambió el pasado jueves en el Palau.
En el ya considerado Clásico de los Clásicos por esas dos prórrogas, Musa estuvo en pista 31:24 minutos en los que anotó 9 puntos, cazó 6 rebotes, dio 3 asistencias y se quedó en sólo un 9 de valoración. Pero el problema está en que sus sensaciones sobre el parqué no fueron buenas, se le veía algo desubicado a ratos y, además, pese a estar en pista tanto en el último cuarto como en las dos prórrogas, no logró sumar ningún punto desde el tercer cuarto.
Tras ello llegó el duelo del domingo ante el Joventut Badalona. Un partido donde el buen juego de la Penya y el desgaste que acumulaba el equipo blanco hizo que la victoria se quedase, y de forma más que meritoria, en Badalona. Y ahí, lo cierto es que el Real Madrid también echó de menos al bosnio: aunque anotó 10 puntos, sus porcentajes fueron bastante bajos: 2/7 en tiros de dos, 1/3 en triples y 3/4 en tiros libres.
Y después, este martes en Lyon, llegó su apagón total. Musa, que antes de lesionarse era el máximo anotador del Real Madrid en la Euroliga con 13,8 puntos de media y mostraba un buen porcentaje en el tiro exterior, por encima del 41%, no logró ver aro... salvo desde el tiro libre y sólo en una ocasión en los 14:19 minutos que estuvo sobre el parqué. De hecho, es que apenas tiró a canasta:0/1 en tiros de dos; 0/2 en tiros de tres; 1/2 en tiros libres, 3 rebotes, 2 asistencias y un pobre 1 de valoración. Pero, más allá de los números, se le vio frustrado, con cierta ansiedad en el juego, bajo en defensa y con errores que no son propios de él. En definitiva, firmó su peor partido de la temporada.
Sus porcentajes en los dos últimos partidos de la competición continental han bajado a una media de 5 puntos y un 20% de acierto en triples. Cifras que, unido a las sensaciones y a su reacción de quitarse las redes, muestran que el bosnio está pasando un bache del que la afición y, sobre todo, su equipo, espera que pueda superar cuanto antes. Porque el Real Madrid necesita de su acierto y buen juego y más en una temporada en la que no termina de encontrar la tecla a nivel general para mantener la solidez. Es jueves, ante el Fenerbahçe, tiene otra cita clave en la competición continental.