EUROLIGA | BARÇA - AS MÓNACO (1-2)

Darío Brizuela estalla contra el arbitraje en mitad del partido ante el AS Mónaco tras el 2-21 en tiros libres al descanso: "Cuando juegas contra jugadores que están por encima del reglamento es muy difícil jugar"

El base-escolta del Barça se queja de una diferencia del criterio arbitral durante la primera parte del cuarto duelo de la serie de los playoffs.

Una acción entre Strazel y Darío Brizuela que acaba con el español en el suelo. /EFE
Una acción entre Strazel y Darío Brizuela que acaba con el español en el suelo. EFE
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Si uno mira el resultado al descanso del cuarto partido de la serie de los playoffs de la Euroliga entre Barça y AS Mónaco comprueba que la ventaja es leve (35-38). Sin embargo, si se ve lo que ha sido la primera parte, la puesta en escena culé -excelsa, por cierto- y cómo poco a poco el conjunto monegasco ha ido reenganchándose al duelo hasta irse por delante en el marcador al descanso se encuentra con un gran enfado por parte del Barça, tras una primera parte muy física, que apunta hacia el arbitraje y que ha evidenciado públicamente Darío Brizuela.

El base-escolta, que incluso llegó a quedarse en el banquillo con enfado tras el último tiempo muerto en el que Joan Peñarroya le dijo eso de: "Darío, estas con dos... que te cueste la tercera también, vamos no me jodas", al ver su molestia por quedarse fuera de la jugada, no dudó en mostrar la crispación culé con las decisiones arbitrales tras llegar el receso. Ante los micrófonos de Movistar Plus+, el donostiarra aseguró: "Cuando juegas contra jugadores que están por encima del reglamento es muy difícil jugar", una frase que recoge el malestar culé por lo que fue la primera parte.

Y es que la diferencia de faltas y, sobre todo, de tiros libres lanzados por uno y otro equipo (2 para el Barça por los 21 que tiró el AS Mónaco) calentó el segundo cuarto hasta el punto de que incluso Tomas Satoransky y el propio Joan Peñarroya vieron la técnica, en un cuarto que acabó remontando el Mónaco, precisamente, desde la línea de personal.

La realidad es que tras un primer cuarto impecable, en el que los azulgranas dominaron con buen juego y un gran Jabari Parker (23-14), en los segundos diez minutos el partido comenzó a embarrarse, sobre todo cuando le pitaron la técnica a Peñarroya, precisamente por reclamar los contactos que entendían que no se estaban señalando en los ataques del Barça, mientras que por el otro lado sí se pitaban.

Además, otra de las cuestiones clave que encendió mucho al Barça fue esa discutida falta de Álex Abrines sobre Mike James, que fue la que hizo al Mónaco ponerse por delante en el marcador (33-34) y también la de Satoransky casi al final del cuarto que acabó dándole a Strazel tres tiros libres y uno más, ya que también le supuso la técnica, para poner el 35-38 tras el que llegó el enfado culé y del Palau, y la crítica pública de Brizuela.