ATLETISMO

La nota en la maleta que inspiró a una campeona olímpica en su adolescencia: "Dejé atrás a mi madre y hermanos..."

La atleta santaluceña Julien Alfred cambió su Castries natal por Jamaica, donde no pudo conocer a su ídolo de la infancia.

Julien Alfred, en su victoria en París. /EFE
Julien Alfred, en su victoria en París. EFE
Daniel Knecht Escobar

Daniel Knecht Escobar

Julien Alfred (Santa Lucía, 23 años) tenía el mismo sueño que muchos y muchas atletas que crecieron pegados al televisor viendo cómo un jamaicano rompía récord tras récord todas las páginas del 'viejo atletismo' y escribía unas nuevas con su puño y letra. "Siempre quise ser Usain Bolt. Él era más que mi ídolo", le confesó a Athletics Weekly antes de competir en la Diamond League que se celebra estos 13 y 14 de septiembre en Bélgica.

Por suerte o desgracia para ella, todavía no representa lo que Bolt consiguió en 13 años de carrera , aunque sí que ha sido capaz de redactar el comienzo de su propia historia. En los últimos Juegos de Olímpicos de París, sus primeros, se hizo con el oro en los 100 metros lisos (misma prueba en la que su referente se convirtió en leyenda) y la plata en los 200, lo que la pone en la escena como una de las atletas más prometedoras de la nueva generación.

Más allá de su potencial, esconde una valiosa historia de vida a tan temprana edad. Desde Castries, la capital de su país natal, decidió mudarse cuando apenas tenía 14 años a Jamaica, cuna de grandes ídolos del mundillo como el propio Bolt o su otra gran heroína, Shelly-Ann Fraser-Pryce. A pesar de pasar varios años en el país caribeño, reconoce que nunca llegó a conocerlo, aunque aprovechó su tiempo en la isla de igual manera.

No mucho tiempo después se embarcó en la aventura americana, estudió en la Universidad de Texas y en representación del Longhorns de la ciudad tejana se cultivó de cara a una carrera profesional que hoy en día aborda. Tras actuaciones de enorme mérito en la NCAA (se convirtió en la primera mujer en completar los 60 metros por debajo de lo siete segundos) se coronó en Glasgow con un oro en el Mundial de Pista Cubierta.

Tras dicha victoria y la reválida en los Juegos, recuerda sus comienzos: "Mi padre murió cuando yo tenía 12 años. Me fui de Santa Lucía a Jamaica con 14, dejé atrás a mi madre y mis hermanos". De aquel momento de crecimiento, recuerda en la entrevista un detalle en particular que la impulsó hasta su éxito olímpico: "Mi madre dejó una nota en mi maleta que decía "sigue tus sueños".

Hacer caso a su madre le llevó a marcar un nuevo récord nacional de 10 segundos y 72 centésimas a lo largo de los 100 metros en los que batió a otra gran revelación de su momento, Sha'Carri Richardson. La instantánea es historia de Santa Lucía.

Sha'Carri Richardson se tomó la revancha de París.  AFP
Sha'Carri Richardson se tomó la revancha de París. AFP

Este fin de semana se enfrenta a las pistas de Bruselas y a una Richardson que ya la privó del oro en Zúrich. Aunque para ella no es una cuestión personal: "No quiero usar la palabra venganza, nunca corro contra nadie. Lo hago por mí misma y solo quiero terminar la temporada con estilo. Por la misma razón, tampoco me concentro en los tiempos".