VELA

Un francés cruza el Atlántico en 26 días... ¡haciendo windsurf!

Olivier Defranc navega de Senegal a la Guayana y bate el récord que tenía Christian Marty, fallecido pilotando el Concorde, desde 1982.

Olivier Defranc navega en pleno cruce del Atlántico. /OLIVIER DEFRANC
Olivier Defranc navega en pleno cruce del Atlántico. OLIVIER DEFRANC
Nacho Gómez

Nacho Gómez

El cruce del Atlántico es uno de los grandes jalones en el camino de todo aficionado a la vela. Una vez aprendes a navegar, haces tus primeras travesías diurnas, cruzas a las Baleares, pasas noches a bordo y, si las circunstancias vitales te lo permiten, el sueño de cruzar el Atlántico pasa a ser tu siguiente gran reto. Lo que no es tan normal es cumplir ese sueño... a bordo de una tabla de winsdurf.

El francés Olivier Defranc acaba de completar esta locura de travesía navegando a bordo de su tabla entre las costas de Senegal y las de la Guayana francesa. Lo ha hecho, además en un tiempo de 26 días y ocho horas, batiendo el récord de la travesía, que llevaba vigente desde 1982 cuando el también francés Christian Marty se convirtió en el primer windsurfista en completar esta hazaña en 37 días.

Marty era un personaje de leyenda y su fallecimiento estuvo a la altura de su polifacética vida: era el piloto del Concorde que se estrelló en el año 2000 con 109 pasajeros a bordo nada más despegar del aeropuerto Charles de Gaulle. Antes de ello, su vida se había caracterizado por su afición a los deportes de riesgo, entre los que se encontraba aquél cruce del Atlántico en una tabla de windsurf.

En esa hazaña de 1982, Marty estuvo acompañado durante los últimos doce kilómetros de travesía por un chaval de 13 años que se quedó totalmente fascinado por la gesta y que dedicó las siguientes décadas de su vida a soñar con replicarla. Ese chaval era precisamente Olivier Defranc, que logró culminar su sueño el pasado 5 de enero, casi 42 años después del récord de Marty.

"Tuve la suerte de poder acompañar a Christian Marty en los últimos doce kilómetros , desde las Islas de la Salvación hasta la Place des Roches. Para mí fue una revelación. Mi pasión por el windsurf nació en ese momento y nunca se perdió", relataba Dafranc en su blog personal antes de arrancar la travesía.

Desde que vivió en primera persona la hazaña de Christian Marty, Olivier Defranc se dedició a perfeccionar su técnica en el windsurf, llegando a conseguir resultados decentes en los campeonatos franceses. En 1992, diez años después del récord de Marty y tras dedicar tres años a prepararse física y mentalmente, intentó replicarlo por primera vez, la falta de patrocinadores le hizo desistir. En este 2024 ha vendido su casa para financiar un reto que le ha hecho entrar en la historia.

Olivier Defranc descansa a bordo de su lancha de apoyo.  OLIVIER DEFRANC
Olivier Defranc descansa a bordo de su lancha de apoyo. OLIVIER DEFRANC

Defranc llevaba un barco de seguimiento durante toda la travesía, con un médico a bordo, y descansaba durante las noches a bordo de una lancha para proseguir la travesía al alba. "Cumplir un sueño que llevaba persiguiendo durante cuarenta años es algo que no tiene precio. Ahora ya puedo retirarme del windsurf con la sensación del deber cumplido", afirmó nada más pisar tierra.