TENIS

Nick Kyrgios, obligado a jugar bien por contrato

El polémico tenista australiano participa en un partido de exhibición en México ante Cameron Norrie.

Nick Kyrgios durante un partido ante Majchrzak en Japón. /GETTY IMAGES
Nick Kyrgios durante un partido ante Majchrzak en Japón. GETTY IMAGES
Guillermo García

Guillermo García

Nick Kyrgios siempre es noticia y en esta ocasión, lo es por partida doble. El polémico tenista australiano volverá a las pistas el próximo 9 de noviembre en una exhibición en Ciudad de México. Un partido que le enfrentará al estadounidense Cameron Norrie, número 13 del mundo, y que no tendrá nada de amistoso. Al menos eso pone en su contrato.

Los dos tenistas están obligados a jugar su mejor tenis ante el público mexicano, tal y como les recordaba en rueda de prensa Eduardo Rodríguez, organizador del evento: "Los partidos de exhibición traen esta connotación de que los jugadores van a entretener a la gente, pero no se van a esforzar al máximo. En este caso, los jugadores están firmados para jugar partidos competitivos con un premio económico a revelarse el día del evento. Vienen a ganar".

Kyrgios había confirmado su presencia en el partido en suelo azteca desde el anuncio del mismo. Sin embargo, en el caso de Norrie ha sido la baja de Gael Monfils a última hora, la que le ha abierto la puerta de un partido con una importante bolsa como premio. "Es un lujo para nosotros tener: Cameron Norrie, que está tocando las puertas del Top 10 y la verdad es que para nosotros es un placer tenerlo", aseguraba Rodríguez en la presentación del choque.

Disculpas y una donación

El tenista australiano, por su parte, también es noticia por otro motivo. Aunque en esta ocasión tiene que ver más con su carácter que con su juego. Kyrgios ha llegado a un acuerdo con Anna Paulus, la aficionada a la que llamó "borracha" en la última final de Wimbledon que le enfrentó a Novak Djokovic.

La aficionada interpuso una demanda por difamación contra Kyrgios, que ha emitido un comunicado pidiendo perdón a través de sus abogados: "Le dije al árbitro que una fan, que ahora sé que es Anna Palus, me estaba distrayendo durante el partido, creyendo que estaba borracha. Estaba equivocado y pido disculpas. Para compensar, he donado 20.000 libras a Great Ormond Street Hospital, una organización benéfica elegida por la señora Palus", concluía un Kyrgios que una vez más ha sido noticia por sus reacciones más que por su tenis.