Tsitsipas explota contra su padre y rompe con él como entrenador: "No ha sido muy inteligente"
El griego desata su ira contra su progenitor tras perder contra Kei Nishikori en primera ronda.
El tenis tiene ese componente mental que hace que en ocasiones algunos de los que lo practican no parezcan del todo cuerdos. Jugadores que gritan, que hablan solos, que revientan raquetas a golpes contra el suelo. Jugadores frustrados, en definitiva, porque se sienten solos y desangelados en un entorno hostil. Dicen que es el deporte más solitario porque incluso en el boxeo, cuando te pegas con otro ser humano, al menos tienes el calor del cuerpo del contrario, sin red que te separe.
En el elenco de tenistas que a veces pierden el oremus está Stefanos Tsitsipas. El griego tiene talento, pero quizá no los resultados que se esperarían de un jugador así, y su frustración sale con frecuencia. Cada día más, de hecho. Se le notó en Montreal, donde perdió sin mucho que decir contra Kei Nishikori. Como estamos en 2024, un tiempo en el que ya no se espera nada del japonés, más cerca de la retirada que de otra cosa, sorprende esta clara derrota.
Pero no es la mayor sorpresa de la tarde. Esta vino con el enfado de Tsitsipas con su entrenador. Si fuese solo su entrenador no sería tan raro, la literatura del tenis está también bastante llena de tenistas enfurecidos con su equipo, pero es que en este caso quien le ayuda es su padre, que lleva junto a él todos estos años. Y tan fuerte fue la disputa que ha terminado apartándole de su equipo técnico.
"He tenido una discusión con mi padre durante el partido, no estoy acostumbrado a algo así, pero un partido de Masters 1000 es para mí un partido muy importante. Necesito y merezco un entrenador que me escuche y esté atento a mi feedback como jugador", decía el jugador tras el partido.
Entiende Tsitsipas que le está fallando la derecha y considera que esos errores tendrían que ser la prioridad para su progenitor. "Mi padre no ha sido muy inteligente a la hora de manejar esto, y no es la primera vez que le pasa. Estoy muy decepcionado con él. No sé si debería considerar hacer algún cambio, pero estoy muy decepcionado", relataba tras el partido, evidentemente enfadado con el estado de las cosas.
Unas horas más tarde ponía un tuit para explicar que tantos años después buscará una nueva ayuda. Y, también, de algún modo, para pedir disculpas. "Mi padre ha estado intentando durante los últimos años entrenarme, criarme de la manera correcta y brindarme conocimiento y sabiduría, tanto dentro como fuera del campo. Le agradezco por eso. Le agradezco los sacrificios, el dolor y el sufrimiento que ha soportado para que este esfuerzo sea un éxito. A partir de ahora, su papel permanecerá dentro de los límites del papel de padre, y sólo eso", explicaba en su nota de despedida.
"Mi padre seguirá viajando conmigo y estará allí para apoyarme y brindarme asistencia fuera del campo, como siempre he querido. He confiado a mi padre el puesto de entrenador durante muchos años y considero que nuestra colaboración ha sido un éxito. No estoy seguro de quién ocupará su lugar y todavía no estoy en condiciones de decidirlo", añadía en una asunción de ciertos errores por parte del griego.
Σας ενημερώνω με βαριά καρδιά ότι η συνεργασία μου με τον πατέρα μου ως προπονητής έχει φτάσει στο τέλος της. Προτιμώ να κρατήσω τον πατέρα μου στον ρόλο του ως πατέρας, και μόνο ως πατέρας.
— Stefanos Tsitsipas (@steftsitsipas) August 9, 2024
Η φιλοσοφία μας διδάσκει ότι η σοφία έρχεται μέσα από την κατανόηση των ορίων μας και…
"Lo más importante para un jugador es recibir información correcta por parte de su entrenador. El entrenador no es el que usa la raqueta, es el jugador quien ejecuta el plan. Es un trabajo colaborativo en el que ambos deben aportar. Tiene que ser recíproco si quiero desarrollar mi tenis", explicaba el jugador, que en sus palabras obviaba el hecho de que ese señor que es su entrenador también es su padre. Su padre seguirá siendo, ya no su entrenador.