Ben Shelton, el nuevo niño bonito del tenis saca a casi 240 km/h gracias al fútbol americano

Nacho Encabo

Actualizado10 de agosto de 2023, 13:48 h

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Taylor Fritz, número cinco del ranking mundial en aquel momento, no sabía cómo frenar la que le estaba cayendo encima. "No he podido restar un saque en todo el primer set", decía, alucinado con las bombas que lanzaba Ben Shelton desde el otro lado de la red.

Fritz acabó ganando 4-6, 6-4 y 6-3, pero lo más destacado de aquel partido en la segunda ronda de Indian Wells 2023 fue todo lo que hizo Shelton con su saque. En el sexto juego, la joven perla del tenis americano lanzó un servicio a 147 millas por hora, o lo que es lo mismo: a 237 kilómetros por hora. Pero no todo fue la velocidad: unos minutos antes logró un ace de segundo saque porque gracias al top spin hizo que la pelota botara a más de dos metros de altura.

Shelton no es, desde luego, el rival más cómodo que le podría haber tocado a Carlos Alcaraz en su debut en el Masters 1000 de Canadá. Número 41 del ranking con apenas 20 años, Shelton es hijo de un tenista, Bryan Shelton (55 de la ATP), que le inculcó desde pequeño la filosofía Nadal, es uno de los apadrinados por la nueva marca de Roger Federer y si es capaz de sacar a casi 240 km/h es gracias a todas las horas que entrenó en su intento de ser quarterback. Jugaba tan bien al fútbol americano que su padre, de hecho, no le veía ningún futuro en el tenis. Pero los padres a veces se equivocan.

"Desde que era pequeño yo acepté ya que el tenis no iba a ser lo suyo", dijo hace un año su padre, Bryan, a la página de la ATP. "Yo pensaba que iba a destacar en deportes de equipo porque era muy social. Yo era muy introvertido y él es lo contrario, es extrovertido. Yo siempre que le veía pensaba: 'Este niño va a ser un muy buen jugador de fútbol americano'".

Bryan era profesor del equipo femenino de tenis de la Georgia Tech University, donde conoció a Calvin Johnson, apodado como Megatron, que con el tiempo se convertiría en uno de los mejores receptores de la NFL. La relación era tan estrecha que Megatron acudió al noveno cumpleaños de Ben Shelton y le regaló una pelota firmada. Una razón más para que el pequeño Ben persiguiera su sueño de triunfar en el fútbol americano como quarterback.

"Era lo que él quería. Conocía a todos los jugadores de la Universidad de todo el país. Conocía a todos los profesionales. Era un fanático y siempre tenía una pelota en su mano", añadió su padre. Ben entrenaba tanto los lanzamientos en largo que desarrolló una gran fuerza en su brazo izquierdo. Y cuando la familia se mudó a Florida y a Ben le picó el gusanillo del tenis, su brazo ya estaba más que acostumbrado a la exigencia de un entrenamiento de tenis.

"No hay duda de que su saque es el mejor arma que tiene y el hecho de que jugara tanto al fútbol americano es la principal causa de ello", explica su padre. "Yo quiero creer que hay algo que va de padres a hijos, pero la clave de todo es cómo desarrollas los dones que tienes. El hecho de haber levantado el codo y haber hecho determinados ejercicios con el balón le permitió llegar al tenis y desarrollar eso como un arma".

Centrado ya en el tenis, Shelton ha tenido en los últimos años un ascenso meteórico. Pasó de ser el 573 del ranking en enero de 2022 a trepar al top 100 en noviembre de ese año. Y en el 2023 alcanzó los cuartos de final del Abierto de Australia y pisó el número 35 de la ATP. Actualmente ocupa el puesto 41 y en Estados Unidos es visto como una de las grandes esperanzas para volver a tener por fin a un jugador luchando por Grand Slam (el último norteamericano en ganar un grande masculino fue Andy Roddick en 2003).

Su padre le ha inculcado desde pequeño una de las máximas de Nadal: que las victorias no se suban a la cabeza y que las derrotas no duelan tanto. "Habrá momentos altos y otro bajos por el camino, pero tienes que tratar los dos de la misma manera. Se aprenden de los dos y, si lo haces así, sólo hay aspectos positivos", decía su padre. "Si ganas un partido, ¿qué aprendiste? Si pierdes, ¿qué aprendiste? Lo que hay que hacer es seguir empujando y tomarlo con calma. No hay prisa".

Fichado por On Running, la firma deportiva creada por Roger Federer, Shelton se curtió en el tenis universitario estadounidense y no salió de su país hasta que en enero de 2023 viajó para la gira australiana. Hace unos meses no le conocía casi nadie fuera de su país y hoy es una de las grandes sensaciones, uno de los niños bonitos. Esta semana, tras perder con Carlos Alcaraz en Canadá, el propio murciano reconoció también haberse visto sorprendido por la potencia de sus golpes: "Nunca había jugado con alguien que le pegara tan fuerte a la bola", dijo tras terminar el partido. Era la primera vez que se veían las caras. No será la última.

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