Carlos Fabra y Álex Debón, cara a cara con la justicia por cohecho en el aeropuerto de Castellón
El expresidente de la Diputación y el expiloto mundialista, acusados de un pago encubierto de 360.000 euros en comisiones ilegales por contratos de patrocinio.

La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Castellón acoge desde este lunes 19 de mayo un juicio que promete reabrir viejas heridas políticas y deportivas en la Comunidad Valenciana. El procedimiento, que se desarrollará ante un tribunal del jurado, tiene como protagonistas al expresidente de la Diputación de Castellón y del PP provincial, Carlos Fabra, y al expiloto de motociclismo Álex Debón, acusados de un presunto delito de cohecho vinculado a contratos de patrocinio del aeropuerto de Castellón.
El juicio comenzará a las 10:00 horas y está previsto que se prolongue hasta el jueves 22 de mayo, en varias sesiones que servirán para esclarecer si existieron pagos ilícitos entre ambos implicados, tal y como sostiene el Ministerio Fiscal.
Carlos Fabra, apartado de la primera línea política desde que fue condenado por delitos fiscales en 2013 y cumplió condena en la prisión de Aranjuez, regresa ahora al foco judicial a sus 79 años. Aunque había mantenido un perfil bajo en los últimos años, fue visto recientemente en un acto político en Valencia organizado por el expresident de la Generalitat Francisco Camps. La causa que ahora le sienta de nuevo en el banquillo tiene su origen hace casi una década, y vuelve a poner en cuestión la gestión del aeropuerto de Castellón, una infraestructura promovida por el propio Fabra durante su etapa al frente de la Diputación.
Patrocinio bajo sospecha
La Fiscalía solicita para Fabra y Debón una pena de tres años y tres meses de prisión, además de una multa de 6.480 euros. En el caso del político, también se pide la inhabilitación para empleo o cargo público durante cinco años. El origen del proceso está en los contratos de patrocinio firmados entre la empresa pública Aerocas, gestora del aeropuerto, y la compañía del expiloto Debón, Motosport69, durante los años 2010 a 2013. Según la acusación, Debón habría recibido más de 3,6 millones de euros por esos acuerdos, de los cuales presuntamente destinó un 10% —unos 360.000 euros— a pagos personales a Carlos Fabra.
La investigación apunta a que algunas de esas transferencias, justificadas bajo el concepto de "préstamo", se realizaron justo después de que Aerocas abonara las cantidades estipuladas a Motosport69. La jueza instructora del caso consideró en su auto que existían "indicios racionales suficientes" para entender que esos pagos no fueron casuales, sino parte de un acuerdo encubierto de ciloohecho.
Un piloto en el centro de la polémica
Álex Debón, natural de la Vall d'Uixó, fue una figura destacada del motociclismo español durante más de una década. Participó en 152 Grandes Premios en la categoría intermedia del Mundial, logrando dos victorias y cuatro podios en su mejor temporada, 2008. Su vinculación posterior con el mundo empresarial del deporte y su relación con instituciones públicas ha estado bajo el escrutinio desde el inicio de esta causa.
Aunque inicialmente se investigó a once consejeros de Aerocas por presuntos delitos de malversación y prevaricación, estos cargos fueron sobreseídos en 2016. Sin embargo, el procedimiento contra Fabra y Debón ha seguido su curso, con el delito de cohecho como principal acusación.
El desarrollo del juicio servirá para arrojar luz sobre uno de los episodios más oscuros en la historia reciente de la política y el deporte valenciano. Y, de nuevo, colocará a Carlos Fabra en el centro de la controversia sobre la gestión pública, mientras que el nombre de Álex Debón, hasta ahora ligado al motociclismo, se ve envuelto en una trama judicial de alto voltaje.