Medio minuto de apnea deja uno de los récords más impresionantes de París 2024: "Llevo 11 años nadando así"

Medalla de oro, un nuevo récord mundial (superando su propia marca de hace apenas un año) y una técnica que cuesta creer. Jincheng Guo dejó la imagen del día en los Juegos Paralímpicos en la tarde de ese jueves, 5 de septiembre de 2024. Es la fecha en la que tendrán que fijarse sus oponentes para superar el nuevo crono de referencia que el chino paró en los 29.33 segundos, un tiempo prácticamente imbatible en los 50 metros que dura la prueba.

En agosto de 2023, en los Mundiales de Natación de Mánchester, estableció la que era entonces la nueva mejor marca en los 29.78, bajando ahora 55 centésimas. Su categoría es la de S5, en la que compiten nadadores que carecen de extremidades (en el caso de Guo, le faltan ambos brazos) o tienen movimiento limitado en la mitad del torso y de las piernas. Esto da pie a ver diferentes técnicas dependiendo de las limitaciones de cada competidor, aunque la técnica que practicó Guo en París es especialmente curiosa.

Mientras otros nadadores braceaban o se valían del movimiento de sus piernas, la silueta de Guo permanecía fija en el agua mientras avanzaba hacia el otro lado de la piscina, dando la impresión de que el asiático estaba, de algún modo, motorizado. La mitad de su cabeza permanecía fuera del agua y su estrategia fue la de practicar una apnea que le permitió ser el más rápido del día con una diferencia pasmosa, impresionante.

No es la primera vez que lo hace, de hecho es su seña de identidad, pero después de los "11 años" que asegura llevar nadando de esta manera sigue resultando impactante para el espectador que no conoce a Jincheng Guo. Además, aseguró tras la prueba que "se siente rápido" y que si sigue compitiendo de esta manera es porque ya está "acostumbrado": "A mi entrenador le gusta. Lo he estado haciendo durante mis entrenamientos y estoy acostumbrado a ello".

Tampoco está sorprendido por su récord: "Estaba preparado antes de esta competición, sabía que podía hacerlo". En Tokyo, el mejor tiempo se paró en casi un segundo más: su compatriota Tao Zheng estableció la plusmarca de 30.31 segundos, lo cual no llegaba a los 30.16 que ostentaba el italiano Antonio Fantin como récord mundial desde junio de 2019. Desde entonces, Guo ha pulido su técnica hasta pulverizar estos tiempos que se le han quedado cortos y parecen de otro mundo para los paratletas que quieran superarlos en un futuro.