El triatlón se aplaza hasta el miércoles por la contaminación del agua... y podría ser un duatlón

El río Sena es el corazón de París y fue el eje vertebrador de la apertura de estos Juegos Olímpicos, pero también es un dolor de cabeza para el comité organizador. Apostaron muy fuerte porque iba a estar a punto para poder nadar en él, pero hay muchas dudas de que eso sea cierto. De momento, ya es oficial el retraso en el triatlón masculino.

La prueba combinada no podrá disputarse este martes. El agua del río tiene unos niveles de contaminación incompatibles con la práctica deportiva, por lo que se ha tomado la decisión de esperar unos días a ver si la cosa mejora. La prueba se traslada al miércoles a las 10:45h, justo después de la prueba femenina prevista a las 8:00 de la mañana, y esa será la fecha límite. De no mejorar la calidad del agua sustancialmente transformarían la prueba en un duatlón, es decir se quitará el kilómetro y medio de nado y se mantendrán únicamente los 40 kilómetros de bicicleta y los 10 de carrera a pie.

El problema detectado es que las aguas del río superan los niveles de bacterias E. Coli y Enterococcus permitidos por la Federación Internacional de Triatlón después de las lluvias del pasado fin de semana, que también arruinaron buena parte de la ceremonia de inauguración de los Juegos. Además del triatlón también puede peligrar la natación en aguas abiertas, aunque esta sí podría tener una alternativa viable siendo trasladada al Estadio Náutico Vaires-sur-Marne, sede del remo y el piragüismo.

Los deportistas han sido avisados a primera hora de la mañana parisina. Les tocaba cambiar de planes tras una decisión tomada de madrugada por la organización en una reunión que ha tenido lugar a las 3:30 horas — y con la presencia de los representantes de la federación internacional, la ciudad de París, el Comité Olímpico Internacional, Meteo France y la prefectura de la Ille de France — pensando en salvaguardar su estado de salud. Esto significa un par de días más en la Villa y replantearse un poco lo que ha sido la planificación hasta uno de los días más importantes de su vida.

En estas últimas semanas los políticos parisinos han mostrado una gran confianza en que los deportistas pudiesen competir con normalidad. La alcaldesa, Anne Hidalgo, llegó a darse un baño en el río, como tratando de despreocupar a los nadadores, asegurando que el río llegaría a tiempo.

Desde entonces, y tras una ceremonia de apertura en la que navegaron decenas de barcos por el Sena, las noticias han resultado muy preocupantes. Los nadadores no han podido entrenarse desde entonces y finalmente se han visto obligados a retrasar la prueba. El próximo paso, la cancelación de la parte acuática del triatlón, sería un enorme fracaso de la organización, que ha confiado en poder adecentar el río a tiempo y, evidentemente, no lo ha conseguido.