El penúltimo baile olímpico de Marta Vieira acaba en expulsión y entre lágrimas tras una escalofriante entrada

El fútbol es la vida. Te pasas tu carrera regalando imágenes y discursos legendarios y en tu última cita olímpica -LA SEXTA-, te expulsan por una entrada escalofriante.

Marta Vieira Da Silva protagonizó la imagen que nunca hubiese querido. Ni ella ni nadie. En el minuto siete del añadido del primer acto del Brasil - España, Marta impactó su bota con la cabeza de Olga Carmona. La brasileña alzó la pierna demasiado en la disputa de un balón cerca del área carioca. Inmediatamente, el árbitro del encuentro le mostró la tarjeta roja. Casi con la misma celeridad, la brasileña se derrumbó y comenzó a llorar.

Tal es la trascendencia de Marta, que, tras las quejas -lógicas- por la entrada a Olga Carmona, las futbolistas españolas trataban de consolar a la seis veces mejor jugadora del mundo. En la previa del encuentro, las nuestras habían bromeado sobre quién se haría con uno de los trofeos más preciados: la camiseta de Marta. "Estuvimos comentando quién se llevaría la camiseta... yo creo que va a haber peleas", bromeaba Patri Guijarro. "Me hace más ilusión verla jugar que jugar contra ella, te lo puedo asegurar, porque es muy buena jugadora, desequilibrante...", añadía Alexia Putellas.

Detrás del llanto, se podría esconder el último partido de Marta en los Juegos Olímpicos. En caso de que el combinado brasileño se clasificase, tiene pinta de que sí, Marta no jugará los cuartos de final del torneo... y a la espera de lo que decida el Comité Disciplinario de FIFA, que podría aumentar la sanción.

En una vida llena de imágenes icónicas, su expulsión ante España manchará la colección. A sus 38 años, Marta es una de las futbolistas más icónicas en la historia del fútbol y afrontaba su última cita olímpica tras competir en las últimas cinco ediciones: Atenas (2004), Pekín (2008), Londres (2012), Río de Janeiro (2016) y Tokio (2020). Un total de dos medallas de plata y un cuarto lugar.