El miedo escénico del Torino salva a la Juventus

La semana de un derbi es especial. En Turín, una gran parte de la gente es del Toro, 'granata'. La Juventus, por otro lado, es el equipo de Italia, que domina en aficionados a lo largo del país. La presión se suele dividir, aunque el equipo más grande siempre tiene 'las de perder'.

Esta semana, más de lo mismo. La Juventus perdió en Champions con el Maccabi, en Haifa. Tras el encuentro, Allegri decide: "Estaremos concentrados (sí, como ocurría antes cuando los equipos concentraban antes de los partidos) hasta el derbi". Los jugadores, que no querían, enfadados. Los hinchas, enfadados por la derrota. El presidente, enfadado. Todos enfadados.

Pero claro, llega el sábado y el Torino, que está haciendo una temporada bastante normalita, sabe que esta puede ser su oportunidad de lograr una gran victoria contra el rival de la ciudad. Pero a alguien se le ocurre ver las estadísticas... y 'pum'.

De los últimos 34 partidos, el Torino nada más le había ganado uno a la Juventus. El 26 de abril de 2015 fue victoria en el Estadio Olímpico por 2-1. Pirlo había adelantado a los de Allegri y Darmian y Quagliarella remontaron para los locales. Para ver otra victoria 'granata', nos tenemos que ir hasta el 9 de abril de 1995, en Delle Alpi, Aquel día, el Torino ganó 2-1 como visitante con goles de Rizzitelli. Ahora ya no son 34, son 35 partidos y una victoria.

Quieras o no, la historia pesa. El Torino tenía una oportunidad única para volver a ganar un derbi y darle una alegría a su gente. La Juventus no estaba bien, no llegaba de la mejor manera, pero durante todo el encuentro, fue el equipo que más ganas tuvo de ganar. Si no marcó antes fue por culpa de Milinković-Savić: el portero serbio fue el jugador más destacado del encuentro con varias paradas de nivel.

Pero después de tanto ir, ir e ir, llegó el gol. Otro serbio, Vlahovic, marcó la diana de la victoria tras un gran cabezazo de Danilo en el primer palo. El delantero festejaba con rabia y recibía el premio del gol tras cuajar un buen partido, intentándolo en todo momento. La Juventus respiraba.

Tras el pitido final, unión de grupo del equipo bianconero. Los días juntos en la ciudad deportiva de la Juventus surtieron efecto. O tal vez no fue eso, sino que el Torino no se lo terminó de creer y le dio alas al equipo de Allegri.

Un Allegri que respira una semana más... y ya van unas cuantas. Tras el encuentro, comentó: "Los chicos hoy demostraron que somos un equipo. Hemos hecho un partido extraordinario, estando detrás de la línea de la pelota, haciendo buenas jugadas y tirando mucho a puerta. Estoy contento porque es la primera victoria de visitante". Por ahora, tiene el apoyo de los directivos. Veremos qué pasa en las próximas jornadas.