La Selección se merece que hablemos un poco de 'furbol', por favor

Pasada la efervescencia de la trilogía Eurocopa (2008), Mundial (2010) y Eurocopa (2012) a la Selección se le respeta y se le presta la atención justa. Reconozcámoslo. Si no de todos, de casi todos. Posiblemente, la coartada sea que después del éxtasis llegaron de forma consecutiva los 'palos' de Brasil (2014), Francia (2016), Rusia (2018) y Qatar (2022) y solo en la Eurocopa multi sedes ideada por Platini, el equipo estuvo medio a su altura y llegó a las semifinales. Después, vino la Nations League que se ganó bien ganada y ahora llega una nueva Eurocopa acosada por la proximidad de los Juegos Olímpicos de París y por la propia crisis institucional en la que es más fácil recitar un once de imputados y detenidos que el del propio equipo.
La selección de esta última década tiene tan poca fortuna que cuando va a disputar dos amistosos de cierto postín, sobre todo el de Brasil en el grandioso Santiago Bernabéu y por primera vez puede ponerse a pensar en la Eurocopa, sin olvidar los jugadores los otros frentes abiertos que tienen sus jugadores a nivel de clubes, resulta que la Guardia Civil entra en las instalaciones colindantes a donde están entrenándose y se lleva media docena de detenidos y un montón de cajas y ordenadores. No fue ni la semana anterior ni la siguiente. Ha sido justamente ésta. Sin suspicacias. La que el juez dictaminó y ojalá encuentren lo que busque. Además, ya sabemos que en este país todo lo que se tiene que hacer, se ejecuta en fechas anteriores o posteriores a la Semana Santa; o antes o después de agosto o, por supuesto, de la intocable Navidad. Dos semanas por delante o dos semanas por detrás. En el medio, recreo.
Bueno, que me lío. Que quería yo escribir un poco de 'furbol' y de esta última convocatoria de Luis de la Fuente antes del gran compromiso de la Eurocopa. Resulta que el seleccionador tenía, más o menos, un '11' titular en su cabeza, variantes incluidas, y resulta que entre las lesiones (Pedri, Gavi, Balde, Yéremy...) y la cabezonería de algunos adolescentes (Yamal y Cubarsí) por romper moldes, va a tener que estrujarse un poco más su calva cabeza para llegar a un once idóneo, con sus correspondientes alternativas. Independientemente de las pruebas que realice en estos dos partidos contra Colombia y Brasil, el de Haro quiere que por su aro se perfile un equipo de 16 titulares e ir mezclándolos en los partidos contra Croacia, Italia y Albania.
Hace un par de meses, la última vez que bebí de sus fuentes directas, andaba De la Fuente muy preocupado con un par de posiciones, la de lateral derecho y la de central. Para la primera cuenta con Carvajal de titular y busca desesperadamente un recambio de garantías que oxigene el desgaste con el que el '2' blanco llegará a la Eurocopa. No es casualidad que sea la única posición que ha triplicado en esta llamada. Además del madridista, Navas y Porro. Del sevillista teme que aún llegue a junio más quemado que Carvajal y del tercero, el más joven, 24 años, que le siga pesando en la cabeza su mal partido contra Escocia en la fase de clasificación en el que fue sustituido en el descanso y que desde entonces no haya vuelto a una convocatoria hasta ahora. Ocho partidos mediante, incluidos los dos de la Nations League.
Para la otra demarcación que le provocaba dolor de cabeza, la de central, De la Fuente se ha encontrado sin esperarlo una alternativa nueva, peculiar, distinta, original, la de Cubarsí. Nada que ver con sus dos centrales titulares: Le Normand y Laporte. Menos físico, menos experiencia, pero más sutileza, más salida de balón en corto y en largo; por fuera y por dentro. El resto de las posiciones, de momento, no le obsesionan. Laterales izquierdos, aún sin Balde y sin Gayá, tiene donde elegir. En el centro del campo, aún sin Gavi, e incluso sin Pedri, que no solo no está descartado si no a quien se esperará, también tiene peones variados. Aquí se parte de una certeza, que Rodri es intocable y Merino y Fabián, casi-casi. Y ante la duda, ahí tiene a Sancet que le encandila por su sentido de la profundidad.
Arriba, una gran noticia, la vuelta de Gerard Moreno. Ese delantero que vale para cualquiera de las tres posiciones de ataque. Como Dani Olmo, uno de sus niños bonitos, que si en un partido tiene que ser interior, lo puede ser sin problema. Como en el Leipzig. El cuerpo le pide al seleccionador jugar más de un día con Yamal a la derecha y Nico Williams a la izquierda. Pero para ello les exigirá compromiso en el retorno, en la faceta defensiva. En ese caso, tendría que formar una tripleta de centrocampistas más física.
No lo duden, todo lo expuesto y algo más está en su cabeza.