PREMIER LEAGUE

¿Sobreprecio? Rice se suma al grupo de los 100 millones: las razones del éxito de los ingleses

El Arsenal ha confirmado el fichaje de Rice por 120 millones. Bellingham llegó al Real Madrid por 103. Grealish le costó 118 al City.

Jude Bellingham y Declan Rice celebran un triunfo con Inglaterra./REUTERS
Jude Bellingham y Declan Rice celebran un triunfo con Inglaterra. REUTERS
Álvaro de Grado

Álvaro de Grado

En apenas un año natural, tres futbolistas ingleses han sido traspasados por 100 millones de euros o más. Ya no es que los equipos de la Premier League sean los principales dominadores del mercado de fichajes, sino que los jugadores locales también lideran las listas de traspasos. En el mismo verano, Rice al Arsenal (120 millones) y Bellingham al Real Madrid (103 millones) se han llevado los focos de atención en Europa. Ambos son ingleses, ambos tienen menos de 24 años. Son el presente, pero también son el futuro. El verano pasado le tocó a Grealish, por quien el Manchester City activó una cláusula que le permitía salir por 118 millones de euros.

Rice, Bellingham y Grealish son tres de los 12 futbolistas más caros del planeta. Cuando se habla de un futbolista inglés, lo más común es mencionar el sobreprecio de sus traspasos. No es mentira, esto ha existido, pero existe un matiz: el talento emergente salido de Inglaterra empieza a dominar el panorama actual, no se trata de fichajes que se realizan en la Premier League por jugadores de nivel inferior.

Sí, el encarecimiento del mercado es una realidad. Tras el breve receso que se produjo motivado por la pandemia del coronavirus y la necesidad de minimizar gastos (sólo nueve traspasos más de 50 millones en 2021), el boom ha vuelto a lo grande: 18 futbolistas fueron vendidos por 50 millones o más en 2022 y este verano, en un mes, ya se han realizado 10 traspasos con cifras superiores a esa cantidad.

En esa lista estuvo muy cerca de aparecer Harry Kane hace dos veranos, pero se truncó su traspaso al Manchester City por las negativas de Daniel Levy a aceptar la oferta. Dos años más tarde, todavía Kane sigue en el Tottenham, aunque el Bayern aprieta antes de que entre en su último año de contrato con los Spurs.

Declan Rice, en un entrenamiento con Inglaterra. REUTERS
Declan Rice, en un entrenamiento con Inglaterra. REUTERS

Al margen del valor que ya de por sí tiene ser inglés en una competición como la Premier League -se requieren al menos ocho futbolistas británicos o que hayan sido entrenados en un club inglés durante al menos dos años antes de cumplir los 21-, el hecho de llegar a los 100 millones de euros va un poco más allá. El precio también responde al talento y el nivel de los mismos... y a la juventud con la que están despuntando: Bellingham acaba de cumplir 20 años y Rice, con 24, llega al Arsenal con muchas probabilidades de convertirse en capitán para el futuro.

El inicio del cambio: el EPPP

La Federación inglesa dio un giro a su plan futbolístico en el año 2011, cuando se introdujo el denominado "Elite Player Performance Plan" (EPPP). Desde entonces, y motivado por los malos resultados de la selección -la eliminación en la fase de grupos del Mundial de 2010 en Sudáfrica, por ejemplo-, así como por los bajos niveles de futbolistas ingleses en los equipos titulares de la Premier League, se trató de modernizar y profesionalizar las canteras de los clubes. Se obligó a invertir en las ciudades deportivas y en el personal de los equipos, se incrementó el número de horas de trabajo con los canteranos y se puso un mayor énfasis en el desarrollo técnico.

Sin ir más lejos, se dividió a las canteras en categorías (de la 1 a la 4, en función de la inversión de cada una). Un club de categoría 1 como el Manchester City o el Liverpool requería un mínimo de 18 personas a tiempo completo, así como un presupuesto mínimo de 2,5 millones -algo que este tipo de clubes de la Premier League superan con mucho margen-. Cada categoría se revisa a los dos años y se reorganiza si es necesario según una auditoría totalmente independiente.

Otra de las decisiones más trascendentes fue la abolición de la regla de los 90 minutos -impedía fichar a jugadores que vivieran a más de una hora y media de la ciudad deportiva-, por lo que los grandes clubes pudieron captar a jugadores de todo el país. Además, la Federación también cambió reglas en las edades más bajas: se priorizó jugar en campos pequeños y no en uno grande en los niños de 10-11 años, con porterías enormes y con la necesidad de mandar la pelota arriba a toda velocidad, empeorando el nivel de juego, con el objetivo de mejorar la educación futbolística y dominar los aspectos técnicos y tácticos.

John Stones fue clave en el título de la Champions League. Getty Images
John Stones fue clave en el título de la Champions League. Getty Images

Los resultados comienzan a verse en los futbolistas que han crecido bajo el mando de este nuevo formato. Sin ir más lejos, en la final de la última Champions League se vio actuar a Stones como mediocentro, a pesar de crecer como central o lateral, adaptándose a nuevas funciones del juego. Otro inglés como Alexander-Arnold también ha adoptado un rol híbrido entre lateral y centrocampista. Más consagrado, y debutante casi después de la instauración del EPPP, surge el caso de un Kane que está muy lejos de ser un nueve clásico, únicamente rematador, y también cumple con funciones más propias de un mediapunta a la hora de la creación.

El proyecto quedó culminado y redondeado con la inversión para construir St George's Park, la ciudad deportiva de la Federación, para moldear una estructura y un sentimiento de club dentro de la propia selección, con su propio personal de trabajo.

Los ingleses celebran el gol del triunfo en el Europeo Sub-21. REUTERS
Los ingleses celebran el gol del triunfo en el Europeo Sub-21. REUTERS

El emergente talento inglés

Si la nueva generación de canteranos son 'hijos del EPPP', hay otros futbolistas que también han surgido en medio de la transformación. En una época donde las oportunidades al primer nivel no han sido tan sencillas como para los canteranos, algunos han conseguido surgir: Foden irrumpió en el Manchester City, Rashford emergió en el Manchester United hasta convertirse en estrella, Mount o James lo hicieron en el Chelsea, Rice fue el capitán que volvió a levantar un título europeo con el West Ham y Kane se convirtió en leyenda del Tottenham. Los dos primeros lo hicieron incluso sin salir cedidos, un paso que sí dieron los demás.

La consecución del Europeo Sub-21 es sólamente una muestra más de lo que ha ido consiguiendo la Federación inglesa en la última década, momento en el que se instauró el EPPP ya mencionado. El triunfo ante España por 1-0 supuso el broche final a una generación dorada que ha dominado el fútbol de categorías inferiores. Desde el año 2015, Inglaterra ha ganado el Europeo Sub-17 (2017), el Europeo Sub-19 (2017 y 2022), el Mundial Sub-20 (2017) y el Europeo Sub-21 (2023). Y lo más importante para darle continuidad: algunos de los que han formado parte de esas generaciones ya han dado el salto a la selección absoluta, y si no lo harán pronto.

Porque es ahí, de la mano de Gareth Southgate, donde se espera el siguiente salto: semifinales en el Mundial de 2018, subcampeonato en la Eurocopa 2020 -disputada en 2021- y cuartos de final en el Mundial de 2022, donde un penalti fallado por Harry Kane impidió una prórroga contra Francia. Los ingleses llegarán como uno de los grandes candidatos a la Eurocopa de 2024 del próximo verano.

"Creo que la ganaremos. En los últimos tres torneos lo hemos hecho muy bien, ahora es el momento de ganarlo", dijo Greg Dyke, expresidente de la Federación.