"Nunca he escrito de fútbol, pero me las arreglaré para decir lo que siento"
Tras 15 temporadas como jugador, José Luis Mendilibar se forjó un prestigio como entrenador durante 22 años. Desde este domingo intentará transmitirlo todo en Relevo.

Mendi, su nombre de guerra para los más cercanos, arquea las cejas en la noche de Zaldibar, allá donde nació, donde continúa viviendo y donde se cita con Relevo para escuchar una proposición deshonesta: matar el gusanillo del banquillo escribiendo sobre su vida y sobre su fútbol. Sobre todo, sobre su fútbol. Se trata de que escudriñe el juego para todos nuestros lectores. Nos transmita sus interioridades, sus vivencias, sus creencias. Sin más. Sin trampas. Como es él. Genuino. Directo. Sin recovecos. Como le hemos escuchado durante años y años en las conferencias de prensa y en las entrevistas a pie de campo.
Ese Mendi que no tiene problemas para soltar un taco, pero que reflexiona con sentido común, el más común de los sentidos, sobre su equipo, sobre el contrario, sobre el partido. Y también sobre ese VAR que no le gusta lo más mínimo y sobre esas modernidades tecnológicas con las que no congenia, pero con las convive en el día a día sin en el más mínimo problema.
Se trata de que ahora que no tiene un vestuario que le escuche, tenga una audiencia fiel que a través de Relevo aprenda de su particular manera de entender este juego desde las raíces más profundas. Son casi 40 años de experiencias. Mientras se le presenta la oferta para convertirse en 'escribano', escucha, abre los ojos, frunce el ceño, sonríe, pregunta y vuelve a preguntar. Se nota que no le desagrada la idea, pero le impresiona. "Joeeee, es que nunca lo he hecho... Yo no soy un entrenador mediático de esos que están acostumbrados a los medios de comunicación y a estar todos los días en los periódicos y en las radios. Yo soy de Zaldibar. Los clubes a los que he entrenado nunca ha sido de acaparar portadas. Si acaso el Athletic... y duré once jornadas. No sé si soy realmente lo que buscáis. Pero si no tengo ni la tablet esa que ahora llevan todos los entrenadores debajo del brazo. Siempre he sido de perfil bajo, como hablaba un día con Del Bosque. Leo, escucho y, sobre todo, veo todos los partidos que se pueden ver... Pero me dedico a lo mío. La verdad es que presentado así, como me lo decís, me apetece. No sé si sabré, pero al fin y al cabo es fútbol y el fútbol es mi vida. Intentaré apañarme...".
Y a eso se ha puesto desde este primer artículo que este domingo ya podrán leer. Se trata de que José Luis Mendilibar nos transmita sus experiencias y conocimientos de cuatro décadas. Nos hable de sus compañeros de viaje como futbolista, de sus técnicos y sus discípulos. Desde que comenzó en Lezama hasta su último paso por el banquillo de Alavés. "Como jugador tampoco podré contar mucho porque todas mis condiciones acababan en 'illo'. Era rapidillo, tecniquillo, apañadillo... Tuve a Javier Clemente de entrenador y un día me dijo: 'Mendi, tienes nivel para jugar en Primera, pero te quedarás en Segunda B'. El cabrón acertó. Ya que me pongo a ello, algún día explicaré cómo era yo como jugador. Como entendía el juego. Tenía mucha clase... ¡ojo!, pero no me gustaba mucho meter el pie".
Como entrenador siempre fue un libro abierto. Según pasaban los años, más kamikaze. Para su desgracia, los clubes a los que fue entrenando casi siempre luchaban por ascender o por no descender, pero eso a él le daba lo mismo. Lo suyo siempre fue atacar. Ocupar el campo contrario. Presionar alto. La línea defensiva en la divisoria...aunque tuviera centrales lentos. Siempre intentó ser valiente. En el Valladolid, en Osasuna, en el Levante, en el Eibar... incluso en el Alavés que aceptó sin tener que hacerlo la temporada pasada. "Los partidos hay que buscarlos, no esperarlos. Y más si estás en equipos en los que sabes que muchos de tus enemigos son superiores a ti... pero bueno no vamos a seguir descubriendo historias que de lo contrario no voy a tener nada que contar en los artículos de Relevo...".
Tiene razón, míster. Le seguiremos de cerca.