Nico Paz deja su adicción al ColaCao para impresionar en la gira del Real Madrid

Nico Paz se ha convertido en una de las sorpresas positivas en la pretemporada del Real Madrid. En un principio no estaba planeado que viajase ningún canterano a Estados Unidos más allá de los porteros. A Ancelotti no le gusta tener a futbolistas en la banda sin hacer nada. Pero la inoportuna lesión de Dani Ceballos le abrió la puerta al tinerfeño, que se incorporó a la lista la última semana. Y la ha aprovechado.

Miembros de la primera plantilla no tienen dudas: "Es buenísimo". Nico ha desplegado todo su talento por los estadios de Los Angeles y Texas, con los que ha alucinado. Pudo debutar con el primer equipo en un amistoso contra el Milan en el Rose Bowl (27 minutos) y repitió contra el Manchester United en Houston (19). Con trampa, podrían contarse como su segundo y tercer partido, ya que la primera vez que jugó con el primer equipo fue la temporada pasada en un amistoso a puerta cerrada contra el Getafe.

Pero su mejor nivel se ha visto en los entrenamientos, demostrando una técnica exquisita y mucha personalidad. En algún que otro ejercicio se ha colocado como eje del equipo, asumiendo una responsabilidad que suele ser para Kroos, Modric o Alaba. También ejecutando muchas de las acciones a balón parado, demostrando su golpeo. Tanto ha hecho que le ha penalizado en lo físico, costándole más de la cuenta alguna que otra sesión víctima del alto ritmo y de las constantes sesiones (se marchan de Dallas con diez).

Carlo lo ha utilizado hasta en tres posiciones: como delantero, como mediapunta y como interior. Su punto de partida, el costado diestro, donde se beneficia de jugar a pierna cambiada. Tiene interiorizado el recorte hacia dentro y el disparo cruzado, dejando varios goles sacando a pasear su zurda. Pero lo que más valoran de él los veteranos y el cuerpo técnico es lo poco que se equivoca, aspecto clave en los entrenamientos con jugadores de tanto. Nico no desentona. No parece un canterano.

Estas dos semanas en Estados Unidos lo consolidan como uno de los grandes talentos de La Fábrica. El hispano-argentino, que se fija mucho en Kroos durante las sesiones, madura rápidamente escuchando los consejos de Ancelotti. Sigue siendo un adolescente al que le encanta el ColaCao. De hecho, ha tenido que controlar esa curiosa adicción consciente de que no es lo mejor para su nutrición. Todo ello para dar el salto definitivo a la élite.

De momento, el año que viene le toca seguir creciendo en el Castilla, donde Raúl le guarda un puesto. La relación con el entrenador es magnífica. Le ha dado mucha confianza desde que a principios de 2023 le subiese desde el juvenil. Ahora, ya como futbolista del filial a todos los efectos, se espera que asuma un rol protagonista como 'heredero' de Sergio Arribas en ataque, futbolista diferencial durante los últimos años.

Mientras tanto, esperará su momento de debutar en partido oficial. Está haciendo méritos para ello ante un Ancelotti que confía mucho en sus capacidades. Se seguirá muy de cerca su evolución en un Castilla en el que debería cumplir dos o tres años antes de pensar en una salida. Aunque si sigue demostrando este nivel, lo tiene todo para romper la puerta.