El rey de los pases en el Mundial es un central

El historial de partidos hasta hoy nos permite descubrir a las estrellas de Catar en las distintas métricas. Y, en pases, destaca un central por encima del resto de jugadores de las selecciones: Rodri es el mayor pasador del Mundial y los datos revelan que nadie le hace sombra.

A todos nos pilló por sorpresa la titularidad de Rodri como central en el debut de la Selección en el Mundial. Pero, ¿dónde se forjó esa idea? Como diría Piqué: Nations League, "contigo empezó todo". La semilla del éxito se dio en esa competición, durante el encuentro entre España y Portugal.

En este encuentro, los lusos se encerraron en el área y, ante la amarilla de Guillamón, Luis Enrique metió en el descanso a Busquets de mediocentro y retrasó a Rodri. Es aquí donde empezó a brillar: cuando los rivales se encierran, es como jugar con un centrocampista más diferencial en ataque. Ya en defensa es relevante, pero en la fase ofensiva se sale.

Meter a Rodri como central es, por tanto, una garantía tanto ofensiva como defensivamente. Tenerlo a él en el campo no supone una quiebra en la fase defensiva respecto a otros jugadores. De hecho, entre Eric Garcia, Pau Torres y él como centrales, no hay mucha diferencia en aspectos defensivos, incluso hay acciones de anticipación donde Rodri destaca. Pero es en la fase ofensiva donde marca la diferencia, motivo por el que es un valor seguro para Luis Enrique.

Las cifras son reveladoras: en 300 minutos Rodri ha realizado 449 pases. El resto de jugadores del Top 5 en esta métrica no se acerca a estos números aún habiendo jugado mucho más: los 377 pases de Stones (Inglaterra), segundo en el ranking, se dieron en 391 minutos; los argentinos De Paul y Otamendi necesitaron 411 minutos para sus 374 y 353 pases, respectivamente. Completa este ranking el centrocampista francés del Real Madrid Tchouaméni, con 310 pases en 356 minutos.

La matriz de pases de la Selección en los partidos de la fase de grupos ya nos lo dejó entrever, y si miramos los datos de pases por partido, España ha conquistado el ranking. De los seis primeros pasadores con al menos un partido jugado (90 minutos), solo Paredes (Argentina) no es español. Lo encabeza Pau Torres (172,18 pases en 98 minutos), que jugó solo contra Japón, pero lo sigue Rodri (134,89 pases en 300 minutos), quien demuestra que lo difícil no es llegar sino mantenerse. Después de Paredes (115,02 pases en 103 minutos), continúan en el Top Jordi Alba (112,84 pases en 183 minutos) y Aymeric Laporte (108,64 pases en 201 minutos).

No hay rival para España en pases pero, ¿se traducen en más remates? La respuesta es "no". España, con 897,33 pases por partido, deja muy atrás al segundo país en el ranking, Argentina (660,25). Sin embargo, los países que más han rematado son la ya eliminada Alemania (19 remates por partido), Brasil (14,67) y Francia (12,25), que no han necesitado más de 600 pases para destacar en esta métrica. Así, España quedaría cuarta junto con Portugal, ambas con 10,67 remates (pero a Portugal le bastaron 593,33 pases).

Los pases son el medio y no el fin en sí mismo, ya que la meta es marcar gol. Contra el conjunto japonés, los chicos de Luis Enrique fueron superiores en prácticamente todo, excepto en lo más importante, en el gol, lo que supuso la primera derrota de la Selección española en este Mundial. A Japón le bastó únicamente un 17,7% de posesión y 175 pases completados para superar a España, demostrando una vez más que controlar el balón, realizar más pases y tener más posesión no es motivo suficiente para ganar un partido. Con este toque de atención, queda ahora por ver si ser imbatibles en los pases será nuestra mejor baza para conseguir la Copa del Mundo.