El Chimy Ávila ficha por el Betis tras un día de locos
Los verdiblancos se llevan la puja por el delantero por delante de Getafe y Granada. Osasuna cifra la operación en 6 millones.
Finalmente el Betis se ha llevado la puja por el Chimy Ávila, que vestirá la camiseta verdiblanca a partir de este enero después de un día de locos en el que por momentos parecía que la operación se podía ir al traste. La insistencia del jugador, que desde hacía días se había ilusionado con la opción de recalar en Heliópolis, ha sido determinante, con lo que firmará hasta 2027.
Osasuna ha hecho oficiales las cifras de la operación. Así el Betis pagará cuatro millones de euros por el traspaso, que podrían aumentar en 700.000 euros atendiendo a variables por partidos jugados por el delantero. Además, el equipo rojillo aumenta el porcentaje que dispone sobre Raúl García de Haro, de quien adquirió el 65% el pasado verano por 6,5 millones y ahora incrementa un 10%, valorado en un millón de euros. Además, el Chimy renuncia tanto al porcentaje que le correspondía por el traspaso como también a unas cantidades pendientes de cobro. Por último, Osasuna se reserva el 20% de la plusvalía de una futura venta.
El club verdiblanco prácticamente se ha asegurado dos incorporaciones a la vez, la de Pablo Fornals y la de Ávila, que a sus 30 años recala en un equipo con más exigencia y aspiraciones, una oportunidad de oro para reivindicarse después de un par de temporadas irregulares y de haberse deteriorado su relación con el club rojillo.
Como informamos ayer, el Betis se había reservado una ofensiva final por el Chimy para el cierre del mercado. La aparición de Getafe y Granada, que han estado peleando hasta última hora por el delantero, provocó que el club verdiblanco se guardase las espaldas dejando atada la contratación de Cedric Bakambu. Con la carta del congoleño sobre la mesa, los dirigentes béticos retomaron los contactos a primera hora de la tarde, elevando esa primera oferta que había sido rechazada por Osasuna.
Ese acelerón del Betis ya fue del agrado del conjunto rojillo, que prefería la propuesta bética de un traspaso a la de cesión con opción de compra del Granada, que se ha mantenido hasta el último momento pendiente de la operación. Finalmente, el club verdiblanco se acercó a las cifras que exigía Osasuna para hacerse con la contratación de Chimy Ávila, que siempre fue una opción prioritaria en este mercado de enero. La llegada del argentino permitirá que Pellegrini pueda contar con un atacante polivalente, ya que Chimy puede actuar tanto como de delantero centro como de extremo por la derecha, lo que ofrece más alternativas al ataque bético.
Tanto Osasuna como Betis trabajaron a destajo durante toda la tarde-noche para plasmar en los documentos ese acuerdo que se habúa alcanzado tras una dura negociación, en la que cada equipo ha ido jugando sus cartas. Pero el deseo de Chimy Ávila era el de jugar en el equipo verdiblanco y así ocurrirá.