Así fue el fichaje exprés de Mendilibar por Olympiacos: dos propuestas y prefirió la de cuatro meses

Entonces fue el 21 de marzo de 2023. José Luis Mendilibar acudió al rescate de un Sevilla en peligro de descenso con el propósito inmediato de la salvación, pero también con el aliciente por el camino de que estaba en juego la Europa League y al de Zaldívar le apetecía y le hacía especial ilusión estrenarse en una competición europea. Ahora, un año después, pero mes y medio antes, se vuelve a poner el traje de socorrista para intentar que el Olympiacos, el club más laureado (79 títulos) y popular de Grecia, cuarto ahora en la clasificación de la Liga regular, termine la temporada luchando por el título. Por delante tiene al PAOK, líder con nueve puntos de ventaja; al AEK, a siete y a seis del Panathinaikos, el enemigo directo.

Complicado, por no decir casi imposible, pero a Mendilibar le vuelve a ilusionar que su nuevo club dispute la Conference League, la tercera competición europea. Y, de hecho, su debut en el banquillo será el próximo jueves contra el Ferencvaros, otro histórico del fútbol húngaro. Para la Super Liga ha hecho sus cálculos. Los hizo en cuanto cerró el acuerdo definitivo, aún no firmado, con los griegos. Son tres partidos de diferencia con el líder, pero la segunda fase del campeonato la disputan los seis primeros clasificados de esta primera liguilla de 14 equipos, arrastrando los puntos y enfrentándose todos contra todos, 10 partidos. Su esperanza es que el Olympiacos adquiera una velocidad de crucero y los tres que le superan en la clasificación se quiten puntos entre ellos. La segunda plaza daría acceso a la fase previa de la Champions, que tampoco sería un mal botín.

Hace tres meses, en diciembre, cuando destituyó a Diego Martínez, el Olympiacos ya tanteó a Mendilibar. Finalmente el club decidió incorporar como director deportivo al portugués Pedro Alves y su apuesta fue un técnico de su misma nacionalidad, el ex del Celta, Carlos Carvalhal. Dos meses y tres días ha durado en el cargo (11 partidos). La derrota en la Copa griega y en el último partido liguero ante el gran rival, el Panathinaikos, han acelerado los acontecimientos y el dueño del club, Evangelos Marinakis, todo un personaje, ha dado muestra una vez más de su poca paciencia y además de destituir al entrenador también lo ha hecho con el director deportivo. Esta misma semana ha sido nombrado el nuevo, Darko Kovacevic. Como ocurrió en el Sevilla (tras Lopetegui y Sampaoli), el de Zaldívar llega como tercer técnico de la temporada.

Cabe suponer que la presencia de Mendilibar en El Pireo se debe a la recomendación expresa del exjugador de la Real Sociedad, que ya había estado en el club griego en los tiempos de Ernesto Valverde (2010-13). Pero no se puede obviar que su nombre ya era conocido en el club de aquel primer tanteo del mes de diciembre, cuando todavía era director deportivo el también español, Antonio Cordón y que al llegar el 'clan' portugués (Alves-Carvalhal) pasó a ser 'director de operaciones' del conglomerado de clubes que tiene el armador griego. Además de ser el propietario del Olympiacos, Marinakis también lo es del Nottingham Forest (Premier) y del Rio Ave (Portugal).

Antes del sábado que saldrá para Atenas, la idea de Mendi es llamar a su amigo Valverde, con quien jugó en el Sestao de Irureta en la temporada 85-86 para preguntarle por la ciudad, el funcionamiento del club, la afición... También tiene previsto dar un toque a Míchel, que ha estado más recientemente. Toda información es poca cuando va a cubrir su primera experiencia fuera de España después de pasar por siete clubes de la Liga, más sus comienzos en el filial del Athletic, en el Aurrerá y en el Lanzarote. En el Olympiacos se encontrará también con un viejo conocido, Ariel Ibagaza (Mallorca, Atlético, Villarreal), que en 2010 llegó al club como jugador. Ahora es el entrenador del segundo equipo, pero ha pasado por el primero como ayudante de Paulo Bento y por el fútbol base. Una buena fuente de consulta, sin duda.

El técnico vasco llega a su nuevo destino con su inseparable Toni Ruiz, mucho más que un preparador físico, y Fran Rico, con los que estuvo en el Sevilla, como mano derecha y mano izquierda. El club griego le puso sobre la mesa dos contratos. Uno hasta final de esta temporada y otro en el que también se incluía el curso siguiente. Mendi no dudó. "Solo cuatro meses y si sale bien nos quedaremos; y si sale mal, pues no vamos. En el Sevilla no tuve estas dos opciones, solo me ofrecieron contrato hasta final del año pasado y aceptamos. Sabemos dónde nos metemos. Si somos el tercer cuadro técnico de la temporada, será porque no están bien, pero es un reto bonito. También lo del Sevilla era difícil y mira como acabamos la temporada. Han demostrado que tienen confianza en nosotros, nos conocen y supongo que también sabrán nuestra forma de trabajar".

Kovacevic y Mendilibar ya han mantenido contactos telefónicos y el sábado, antes del partido contra el Ofi Creta, será la firma del contrato y la presentación oficial. El club pone a disposición del cuerpo técnico, un intérprete y unos apartamentos para evitar la frialdad del hotel. Está previsto que ante el Ferencvaros, en la Conference League, el 'tridente' español se siente ya en el banquillo. Este jueves ya lo han pasado los técnicos viendo partidos del equipo y han repasado la plantilla de arriba a abajo. Una especie de ONU con presencia de varios jugadores portugueses y brasileños y de dos españoles: Vicente Iborra, ex del Levante y el Villarreal, y Quini, ex del Granada. Este curso se han marchado Pep Biel y Fran Navarro.

El Olympiacos es un club con una larga tradición de técnicos españoles en lo que va de este siglo. El pionero fue Pep Segura, que había llegado al fútbol griego de la mano de Serra Ferrer y dio el salto al Pireo como segundo de un técnico local, Takis Lemonis. Destituido éste en el mes de marzo 2008, Segura pasó a ser el máximo responsable. Ganó seis de los siete partidos y se proclamó campeón. También ganó la Copa al Aris Salónica. Aunque tenia un año más de contrato, el técnico catalán vio como el club le destituía para fichar a otro español, Ernesto Valverde (2008-09), que ganó también la Liga y la Copa en una final que se decidió tras 34 lanzamientos de penalti.

Valverde regresó a España para fichar por el Villarreal. En esa temporada, 2009-10, por el banquillo del Olympiacos pasaron cinco entrenadores, entre ellos Zico. El técnico vasco, aclamado a su llegada, regresó a El Pireo para los cursos 2010-11 y 2011-12 y volvió a ganar las dos Ligas y las dos Copas que disputó, anunciando su marcha por motivos personales y renunciando a una renovación millonaria.

El buen recuerdo del trabajo del Txingurri abrió las puertas del club a otros técnicos españoles. En febrero de 2013, recién salido del Sevilla, llegó José Míguel González Martín del Campo, Míchel. Un mes después se proclamó campeón de Liga con cinco jornadas de adelanto. También ganó la Copa. En su segunda temporada, volvió a conquistar el campeonato con un gran comportamiento en la Champions donde fue eliminado en octavos por el Manchester United. En su tercera temporada fue destituido yendo segundo clasificado.

La vía del entrenador español quedaba abierta de par en par, hasta el punto que para comenzar la temporada 2016-17, el club rojiblanco llamó a Víctor Sánchez del Amo, que había trabajado con Míchel en la etapa anterior. Su experiencia fue efímera. La eliminación en la fase previa de la Champions le costó el puesto. Óscar García fue el siguiente inquilino español de ese banquillo. Tampoco tuvo suerte, dos meses de enero a marzo de 2018. Apenas 13 partidos.

No tuvo tampoco más fortuna Carlos Corberán, que en el verano de 2022 fue fichado por el club de El Pireo por su gran trabajo en el Hudderslfied inglés al que estuvo a punto de subir a la Premier. 11 partidos. Su sustituto fue, en una segunda etapa siete años después, Míchel. En esta ocasión, segunda parte no fue buena y el técnico madrileño presentó su dimisión por problemas personales. Su sustituto, el francés José Anigo, duro otros meses y nueva oportunidad para un entrenador español al comienzo de la temporada en curso. De la mano de Antonio Cordón en la dirección deportiva aterrizó Diego Martínez. Cinco meses y 22 partidos, para dar paso a Carvalhal y ahora a José Luis Mendilibar.

Aterriza el técnico vasco en un gran club con sus peculiaridades. La exigencia es máxima. Todo lo que no sea ganar se convierte en un problema vital y en la correspondiente destitución del entrenador. Le avalan 79 títulos nacionales: 47 Ligas, 28 Copas y cuatro Supercopas. Un total de 17 dobletes. Y 34 temporadas participando en la Champions. Ni más ni menos la exigencia que tendrá Mendilibar por delante a pesar de llegar con la temporada empezada y con nueve puntos de desventaja.