Miguel Ángel Gil, el único español en el Gobierno UEFA: "No me represento a mí, es un reconocimiento al Atlético"
El consejero delegado del club rojiblanco entra a formar parte del órgano de decisión del máximo organismo del fútbol europeo.
París. Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado del Atlético de Madrid, ha sido nombrado miembro del Comité Ejecutivo de UEFA, en el cuadragésimo octavo Congreso Ordinario que el máximo organismo del fútbol europeo ha celebrado este jueves en el Maison de la Mutualité en París.
El directivo del conjunto rojiblanco es miembro del Comité Ejecutivo de la ECA desde 2019, aunque estuvo fuera unos meses tras el anuncio en abril de 2021 de la Superliga, y acompañará a su presidente, Nasser Al-Khelaïfi, en el máximo organismo de la UEFA, un cargo para el que ya había sido designado el pasado mes de septiembre y para el que este jueves fue ratificado. El portugués Pedro Proença, presidente de las Ligas Europeas, fue también nombrado para este comité por el período de un año.
"No me represento a mí mismo, represento al Atlético de Madrid. Es importante que el club esté presente en los diferentes órganos de gobierno del fútbol tanto en LaLiga, como vicepresidente, en el órgano de control audiovisual, como en ECA tanto en el VOR como en el ESCO y ahora en UEFA. Es un reconocimiento al trabajo que estamos haciendo todos y cada uno de los que formamos la familia del Atlético de Madrid", confesó tras su nombramiento Miguel Ángel Gil Marín en declaraciones exclusivas a Relevo.
"Con disciplina y con trabajo", respondió el consejero delegado del Atleti al ser preguntado sobre cómo sacaba tiempo para todo. "Siento satisfacción por poder representar primero al Atlético de Madrid y luego al futbol español".
Gil Marín, que sustituye al alemán Karl-Heinz Rummenigge en este puesto, podrá de este modo dar voz en el ente rector europeo que preside el esloveno Aleksander Ceferin no sólo a los clubes continentales, sino también al fútbol español, que había perdido fuerza representativa tras la dimisión de Luis Rubiales, que era uno de sus vicepresidentes, por el beso a Jenni Hermoso tras la final del pasado Mundial.