Situación límite en el Marsella: Marcelino y Longoria se pueden ir tras la amenaza de los ultras
A pesar de que los resultados en liga no son malos, los españoles podrían dar un paso al costado. El club se defiende en un comunicado.
88 días. Dos meses y 25 días. Ese es el tiempo que ha transcurrido desde el día de la oficialidad de Marcelino García Toral como nuevo entrenador del Olympique de Marsella y el momento en el que la gota ha colmado el vaso. El asturiano podría estar viviendo sus últimas horas al mando del Olympique de Marsella pero no va a dimitir, según ha podido saber Relevo. De momento, el club ha emitido un comunicado defendiéndose de las amenazas de los ultras y no ha comunicado ninguna otra decisión.
En este lapso de tiempo han ocurrido muchas cosas. La primera y más importante fue la eliminación en la tercera fase previa de la Champions League tras caer derrotado por el Panathinaikos en la tanda de penaltis tras recibir un gol en el minuto 99 de partido que servía para ir a la prórroga.
Desde ese momento, resultados flojos pero no fatales. El equipo ganó en su debut en liga ante el Reims, pero posteriormente ha conseguido solo una victoria, en casa ante el Stade Brestois. Es cierto que los otros tres partidos no han sido derrotas, empatando ante el Metz, Nantes y Toulouse, encuentros que presumiblemente deberían ganar viendo el nivel de sus rivales.
Situación delicada en el club
El futuro de Pablo Longoria, presidente del club, es delicado. Tras el último empate conseguido en casa, los ultras pidieron reunirse en el día de ayer con la dirección deportiva del club. Sí, los ultras se reúnen con los clubes en Francia, demostrando el poder que todavía, en 2023, ejercen.
Según informó el diario francés mencionado anteriormente, la cabeza visible de esta organización, Rachid Zeroual (con el apoyo de los demás grupos ultras), pidió la dimisión de la cúpula directiva con Longoria a la cabeza, además del director de fútbol Javier Ribalta y los directivos Tessier e Iriondo.
La realidad es que el proyecto deportivo, sin Longoria, no tiene sentido para Marcelino, que llegó al club con el aval del español. El asturiano no comunicó en ningún momento su dimisión a los jugadores y lo que sí hizo fue avisarles de las amenazas de los ultras. Con todo esto encima de la mesa, la situación cada vez es más tensa y todavía no han decidido qué hacer.
El club se defiende en un comunicado
De momento, todos siguen en su puesto. El Marsella ha emitido un comunicado oficial en el que se ha plantado ante sus ultras y ha reafirmado que no cederá ni a chantajes ni a presiones: "El club no puede aceptar amenazas personales. Sus miembros no pueden tolerar ataques individuales ni ninguna forma de difamación pública infundada".
"Desde que asumió el cargo, la junta directiva del Olympique de Marseille ha emprendido una profunda transformación de la organización del club. Los desarrollos relacionados tienen como objetivo principal establecer estándares operativos dignos de un club europeo de primer nivel y construir un equipo capaz de competir al más alto nivel.
La Dirección está llevando a cabo esta transformación en el único y mejor interés del club, buscando establecer una cultura de excelencia y profesionalismo. Se presta especial atención para garantizar que cada decisión se tome con la mayor integridad y respetando los valores y las normas de cumplimiento del club.
La Junta Ejecutiva del OM está particularmente orgullosa de los avances realizados en las dos últimas temporadas, que han permitido fortalecer la situación deportiva, financiera e institucional del club. En 2022/23, el OM subió al podio de la Ligue 1 por segunda vez consecutiva, algo que no ocurría desde 2011. La Dirección del OM también ha implementado cambios importantes y ha comenzado a trabajar en profundidad en su centro de entrenamiento y en su equipo femenino. estar a la altura de las expectativas y ambiciones del club. Todos estos esfuerzos deben continuar a largo plazo para que OM pueda volver al más alto nivel, como desea la Dirección, decidida y enfocada desde el principio en construir un gran club de fútbol.
Sin embargo, tras una reunión celebrada el lunes 18 de septiembre de 2023 en el centro de formación Robert Louis-Dreyfus, los representantes de las asociaciones de aficionados expresaron su deseo de que el actual Directorio del OM dimitiera. Se lanzó la amenaza de una "guerra" (sic) contra ellos, siempre y cuando no renunciaran.
La junta directiva de OM cree en una relación transparente y regular con sus seguidores, y todos en el club (jugadores, personal y dirección) consideran que las críticas son una parte integral del papel y el honor de representar a OM dentro y fuera del campo.
Por otro lado, el Directorio OM no puede aceptar amenazas personales. Sus miembros no pueden tolerar ataques individuales ni ninguna forma de difamación pública infundada. Una relación basada en la intimidación no puede garantizar las condiciones mínimas aceptables para que la Junta Ejecutiva del club pueda seguir invirtiendo en la transformación de OM".