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Luis Rioja saca su olfato goleador e impulsa al Alavés al ascenso

El extremo del Glorioso suma seis goles en las últimas cinco jornadas y es uno de los artífices del momento del Alavés.

Luis Rioja celebra un gol/LALIGA
Luis Rioja celebra un gol LALIGA
Pablo Ruiz

Pablo Ruiz

La quinta victoria consecutiva del Deportivo Alavés la encarriló Luis Rioja, con un 'hat trick' en 35 minutos. Era el primero de su carrera deportiva. La victoria frente al Ibiza (4-2) en Mendizorroza fue más sufrida de lo esperado, pero la distancia que puso en el marcador el extremo zurdo del equipo vitoriano fue demasiado para un colista, que sigue compitiendo. El Alavés, con esta racha, vuelve al ascenso directo.

El momento del Glorioso va de la mano del estado de forma de ciertas individualidades del equipo. Asier Villalibre y Antonio Blanco han caído de pie en Vitoria tras llegar en el mercado invernal y han cubierto dos posiciones clave en el esquema de Luis García Plaza, que valoraba en rueda de prensa: "Que seamos el máximo goleador de la categoría te dice algo también. El equipo siempre propone, es vertical e intenta hacer las cosas". El Alavés es el máximo realizador de la competición, con 16 goles en las últimas cinco jornadas.

Mucha culpa de ello también la tiene su pichichi particular, que no es "9", pero que suma esa cifra de goles para complementarlo con cuatro asistencias. En total, Luis Rioja ha participado en 13 de los 39 goles (un tercio) que ha hecho el equipo babazorro en esta competición, siendo el jugador más determinante del Alavés, con el que además tuvo un inicio extraño de temporada, recibiendo cantos de sirena del RCD Espanyol, que se quedaron en un susto para el equipo de Luis García Plaza. El técnico, finalmente, puede disfrutar de su mejor baza sobre el césped, con el objetivo de buscar la vuelta a Primera por la vía rápida.

El camino de Luis Rioja a la élite vino de la mano de la extinta 2ªB y con participación en dos filiales importantes del fútbol nacional. Primero, con el Real Madrid C, en el que coincidiría con Fran Sol, Gonzalo Melero o Mariano Díaz; y después con el filial del Celta, en el que dio un salto cualitativo e incluso goleador, al lado de un Borja Iglesias que también emergía hacia unas cifras goleadoras que le dispararían al fútbol profesional. Después de la experiencia en los filiales, su destino fue Marbella y ahí culminaría su explosión.

La explosión de Luis Rioja

Tras dos temporadas en el conjunto marbellí disputó su primer playoff de ascenso, que casualmente le enfrentaría al filial del Celta. La eliminatoria se decidió desde el punto de penalti y Luis Rioja fue el que falló el disparo definitivo, que dejaba sin opciones a un Marbella, que contaba en sus filas también con nombres propios como José Corpas o Catena. A pesar del penalti errado, la huella del extremo de Las Cabezas de San Juan ya había dejado su sello y el Almería sería su siguiente destino, para debutar en Segunda División.

Tras marcar cinco goles y dar cuatro asistencias en el cuadro almeriense, Luis Rioja acabó recalando en el Alavés, con el que pudo debutar en Primera y mantenerse en esa categoría durante tres campañas. Hasta que llegó la temporada pasada en la que se consumó el descenso. El gen competitivo de una de las actuales estrellas de LaLiga Smartbank se demostró tanto en el campo, como en algunas declaraciones en las que ha dejado claro que nunca se rinde y que confía en sus posibilidades como futbolista.

Después de perder en Mallorca la temporada pasada, en un encuentro crucial para la salvación del conjunto vitoriano, Luis Rioja comentaba: "A mí personalmente mi ética no me permite rendirme, yo voy a ir hasta el final, hasta que las matemáticas digan lo contrario. A día de hoy estoy como toda la afición, como toda Vitoria, pero desde pequeño nunca me enseñaron a rendirme. Hay que luchar hasta el final, hay que darlo todo e iremos todos de la mano allá donde vayamos".

El extremo andaluz, que está destacando en Segunda, ha vestido la camiseta del Alavés en más de cien ocasiones y está completamente identificado con la idiosincrasia del club. No arrojaba la toalla la temporada pasada, cuando más crudo lo tenía su equipo, y su obsesión es devolver a los suyos a la máxima categoría del fútbol español. De momento, con su aportación goleadora y asistente, está siendo uno de los activos más importantes de un Alavés, que es el primer equipo que encadena cinco victorias consecutivas y tiene la mirada puesta en volver por la puerta grande a Primera.